Hubo un único foco originado por las chispas de la máquina de fuego frío contratada esa noche para la fiesta de la discoteca Teatre. Ese fue el detonante del incendio que terminó con la vida de 13 personas el pasado 1 de octubre. Según el informe definitivo de la Sección de Inspecciones Oculares de la Policía Científica el fuego, de tipo estructural, generó un colapso en la cubierta de Teatre. Según la Científica, la causa del desastre fue “la ignición causada por las chispas de la máquina de fuego frío en el falso techo” y lo califican como un “incendio de carácter accidental por negligencia”.
Tal y como señalan en el informe, según se observa en los videos grabados esa noche, “se hace uso de una máquina de humo blanco, la cual para un correcto uso necesita de un ambiente con humedad. Esta circunstancia aumenta la probabilidad de que se produzca una reacción química entre el oxido de titanio quemado y el agua, creando una atmósfera inflamable”.
En cuanto a la propagación del fuego, cita el documento, “se desarrolla (en un principio) de manera lenta, por este falso techo, hasta que por el tipo de construcción, con una mala unión de los paneles metálicos a la estructura del edificio, se facilita un aporte de oxígeno que hace que el incendio rompa y se desarrolle de manera más acentuada y virulenta”.
La Científica hace notar también que ambas salas incendiadas estaban separadas solo por una pared de pladur, “poco resistente al fuego. En esta pared existen dos puertas, una de ellas en el piso inferior y otra en la parte superior, que se encuentra próxima a donde se desarrolla el incendio con más virulencia, convirtiéndose en la vía por la cual el incendio penetra en la sala La Fonda Milagros”.
Las llamas, provocadas por una máquina de fuego frío, no pudieron controlarse hasta pasadas dos horas y media desde que arrancó el operativo formado por una decena de vehículos y una treintena de bomberos. La primera víctima mortal fue localizada transcurridas tres horas, a las 9.30. La última, a las 15.18.
Las altas temperaturas de fuego (a más de 500 grados centígrados), la expansión del humo y el riesgo de derrumbe de las estructuras del falso techo de los locales no fueron los únicos obstáculos que se encontraron los bomberos para extinguir un incendio “de dificultad máxima”. Una de las puertas de emergencia de la discoteca Teatre –donde comenzaron a propagarse las llamas– estaba inutilizada con una reja y cerrada con dos candados, según revela el informe de los bomberos que participaron en las labores de extinción del incendio. “Que la puerta estuviera bloqueada pudo ser un factor determinante en el rescate”, advierte el letrado José Manuel Muñoz, que representa a dos familias; una de ellas, la de Jairo, de nacionalidad colombiana y padre de Leidy Paola, una de las jóvenes que perdieron la vida en la discoteca junto a Kevin Alejandro Gómez, su pareja.