El consejero de Educación del Gobierno de Navarra, Carlos Gimeno, ha hecho un llamamiento a los sindicatos para que desconvoquen la huelga prevista para el próximo 26 de septiembre y ha indicado que Navarra “está en situación privilegiada en retribuciones, en ratios, en estabilziación, en recursos personales, en proproción de aulmnado/profesorado, somos un sistema tremendamente dotado, es un sistema que se ha dotado estos últimos cuatro años de una manera significativa y relevante”.
Gimeno ha indicado que comprende “las demandas de las organizaciones sindicales” pero asegura “que no es el momento”. “Entendemos que las circunstancias no los aconsejan y, además, creo que el daño que se hace a la escuela pública es importante”. En la rueda de prensa posterior a la sesión de Gobierno, el consejero ha afirmado que los grupos parlamentarios que sustentan al Ejecutivo le han pedido que tenga “un gesto” ante la huelga convocada en Educación y ante ello ha pedido a las organizaciones sindicales que “reconsideren su decisión”.
“El Gobierno obviamente respeta escrupulosamente el derecho a la huelga de las organizaciones sindicales, pero en este caso considera que ese llamamiento es desproporcionado y solo perjudicará a las familias que eligen la educación pública y, sobre todo, lesionará el derecho básico a la educación de los alumnos y las alumnas de la educación pública. Como consejero de Educación solicito que se desconvoque la huelga”, ha indicado.
Gimeno ha asegurado que el departamento mantiene “abierta la vía de negociación con la Mesa Sectorial de Educación, en la que están presentes todos los sindicatos convocantes del paro”.
En todo caso, el consejero ha afirmado que el departamento de Educación “no es competente para negociar un incremento de sueldos, eso es una cuestión que viene vía Presupuestos Generales del Estado o en esta Comunidad se tiene que trasladar a la Mesa General y obviamente tiene que ir ratificado por una ley foral”. “Para trabajar esta cuestión en el ámbito parlamentario no hace falta una huelga”, ha señalado.
Además, Gimeno ha señalado que en Navarra, un maestro funcionario recién ingresado percibe una remuneración media de 34.278 euros, 307 euros más que la media autonómica española. “Exceptuando Canarias, con salarios específicos para compensar su insularidad, solo Cantabria y Castilla-La Mancha están ligeramente por encima del salario de la Comunidad foral”, ha resaltado.
En cuanto a la posibilidad de aplicar una reducción lineal de ratios, Gimeno ha explicado que el Gobierno ya evaluó el coste que supondría esta medida en todas las etapas educativas, cifrándolo en 131 millones de euros. “Es una cuantía inasumible para el presupuesto público e imposible de acometer en cuanto a la infraestructura, espacios que sería necesario desplegar en la red pública y, por supuesto, también tendría que asumirlo la red concertada. Es una exigencia que, además, entendemos no mejoraría la calidad del sistema educativo, no generaría progresividad y perpetuaría las desigualdades al tener como parámetro la igualdad y no la equidad”, ha afirmado.