La recaudación líquida acumulada de la Hacienda Foral de Navarra (HFN) al mes de junio se ha situado en los 1.300,2 millones, lo que supone 235,3 millones menos que en el mismo periodo de 2019 y un descenso del 15,32% en términos interanuales. El Gobierno foral ha manifestado que este descenso de la recaudación tributaria es consecuencia del estado de alarma decretado en el mes de marzo por la crisis sanitaria y que ha tenido una incidencia directa sobre la actividad económica y el consumo.
La recaudación por gestión propia ha sido de 1.003,3 millones, presentando una bajada del 5,8% respecto al acumulado a junio de 2019 y que contrasta con el incremento del 3,7% que acumulaba al mes de marzo. En términos homogéneos, eliminando el efecto del ingreso extraordinario proveniente de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) contabilizado en el mes de enero de 2019 por importe de 45,7 millones de euros, los ingresos por gestión directa descienden en el mes de junio un 1,6% frente al incremento homogéneo del 11,2% del mes de marzo.
Por lo que respecta a las agrupaciones de impuestos la principal caída se produce en los impuestos indirectos, que con un descenso del 27,1% suponen una rebaja de 224,0 millones. Le siguen por orden de importancia los impuestos directos que presentan en su conjunto una merma del 1% y -6,9 millones de euros. Y, por último, las tasas y otros ingresos que pese a la caída del 27,4% debido a su menor importancia relativa restan únicamente 4,4 millones.
Impuestos directos
En cuanto al IRPF, la recaudación global ha ascendido a 614,7 millones de euros, lo que supone un 3,8% más que en el mismo periodo de 2019.
De dicho impuesto, destacan las retenciones de trabajo, tanto por su importancia relativa como por el impacto de la crisis del coronavirus. Pese al estado de alarma y al cierre de la actividad económica decretado, estas presentan un crecimiento del 2,94% en términos interanuales, pasando de los 674,8 millones ingresados entre enero y junio de 2019 a los 694,7 millones ingresados en este ejercicio; 19,9 millones superior.
Esta recaudación refleja los ingresos de las grandes empresas correspondientes a los meses de noviembre de 2019 a abril de 2020: hasta el mes de febrero las retenciones devengadas por estas empresas crecían un 2,8% y entre los meses de marzo y abril han sufrido una rebaja del 6,6%. En cuanto a las pymes únicamente incluyen el impacto de 15 días del confinamiento decretado en el mes de marzo, así como de los aplazamientos extraordinarios aprobadas por el Gobierno de Navarra para inyectar liquidez a estos contribuyentes, y “no será hasta el mes de agosto, con la declaración del 2º trimestre del año, cuando podamos ver el previsible fuerte impacto sufrido por estas empresas”, ha añadido el Ejecutivo.
Las retenciones de capital (imputadas tanto al IRPF como al IS) también se han visto afectadas por la crisis y han pasado de los 64,7 millones totales de hace un año a los 62,9 millones acumulados a junio de 2020; representa una rebaja del -2,7%.
Los pagos fraccionados que ingresan autónomos y profesionales recogen los ingresos correspondientes al 4º trimestre de 2019 y 1º trimestre de 2020. Pese a que apenas computan 15 días de la aprobación del estado de alarma presentan una caída del 20,9%, que contrasta con el importante crecimiento del 10,8% que reflejaban hasta marzo. “Esto es debido, en parte, a la paralización de la actividad económica, pero también a la supresión de los pagos correspondientes al 1º trimestre aprobado como medida para inyectar liquidez a estos contribuyentes”, ha comentado el Gobierno.
El Impuesto sobre Sociedades suma 28,9 millones de euros con una caída del 35,2% respecto al año anterior.
De este importe, el pago a cuenta del Impuesto de Sociedades ha supuesto 12,3 millones frente a los 21,1 ingresados hace un año. Estos ingresos se corresponden con los pagos a cuenta realizados en el mes de abril por las empresas que declaran en base a normativa estatal. La disminución del 41,7% respecto al año anterior parece ser consecuencia de las importantes provisiones registradas por las grandes empresas por pérdidas relacionadas con la crisis provocada por la pandemia de coronavirus, ha añadido.
Impuestos indirectos
El IVA, principal impuesto indirecto, ha ingresado en total 385,6 millones, restando 156,7 millones a los ingresos de hace un año, lo que supone una importante caída del 28,9%.
La recaudación íntegra por gestión propia de HFN presenta un calendario similar al señalado respecto a las retenciones de trabajo. En este primer semestre del año presenta un descenso del 5,6%, pasando de los 733,7 millones de 2019 a los 692,2 de este año. Por lo que respecta a las grandes empresas las cuotas devengadas entre los meses de marzo-abril han caído un 12,1%, frente al importante crecimiento del 22,6% declarado entre los meses de noviembre de 2019 y febrero de 2020.
Por lo que respecta a las pymes las cuotas devengadas en el 1º trimestre han caído un 4,2% y asimismo se han incrementado las solicitudes de aplazamientos. “Pero al igual que con las retenciones, no será hasta el mes de agosto cuando podamos computar el impacto de la crisis en los meses más duros del confinamiento en las cuotas a ingresar por las pymes”, ha dicho.
En lo referente a las devoluciones de IVA presentan una caída del 6,1%, habiéndose situado en los 605,1 millones; 39,5 menos que hace un año. Por un lado, se ha devuelto una mensualidad menos que en el año 2019 dado que el pago de la mensualidad correspondiente a agosto de 2019 se adelantó al mes de diciembre; y con ello, las devoluciones en el primer trimestre del año presentaban un incremento del 0,7%. No obstante, entre los meses de marzo y junio han disminuido las devoluciones efectuadas respecto al año anterior en un 12,8%, “debido fundamentalmente a la casi paralización de las exportaciones de vehículos en el mes de abril”.
En cuanto al ajuste de IVA, contabiliza la liquidación provisional al segundo trimestre de 2020 y la liquidación definitiva de 2019. La regularización definitiva de 2019 resultó un importe a pagar por Navarra de 23,4 millones frente a los 21,8 ingresados en marzo de 2019, lo que explica parte de la caída en este ajuste. Pero, asimismo, se ha producido una importante rebaja en el ajuste provisional al 2º trimestre de 2020, tanto por el ajuste por aduanas como por operaciones interiores, con una caída total del 25%.
Los impuestos especiales presentan también un importante descenso del 25,2% en la recaudación al mes de junio. En concreto, bajan de 235,6 millones en 2019 a 176,3 en este año. “Este descenso viene motivado tanto por la caída en la gestión directa (-18,6%) como por los ajustes fiscales”, ha expuesto.
Las rebajas se deben, ha continuado, al descenso en el consumo de los bienes sujetos a estos impuestos por la crisis sanitaria y el estado de alarma. Destacan por su importancia recaudatoria la rebaja en el Impuestos sobre hidrocarburos (-21,1%) debido a las restricciones a la movilidad y del Impuesto sobre las labores de tabaco (-13,9%) afectado por el cierre de la frontera con Francia. Sufren también importantes caídas, aunque con un impacto recaudatorio menor, el impuesto sobre determinados medios de transportes (-53%) por el desplome en la venta de vehículos, el impuesto sobre la electricidad (-23,6%) por la paralización de la actividad de las empresas y el impuesto sobre el alcohol (-6,7%) por “el menor consumo de estos bienes a raíz del cierre de los establecimientos hosteleros”.
Entre los impuestos indirectos destaca también el comportamiento de los Impuestos sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos Documentados con una alta correlación positiva con la tendencia del ciclo económico y que en términos acumulados líquidos presentan una evolución desfavorable, con caídas acumuladas del 26,1% y 17,5%, respectivamente.