A primera hora de la tarde de este viernes ha empezado a estabilizarse el caudal del río Arga a su paso por Pamplona, aún en alerta, y los vecinos del barrio de la Rochapea han podido acercarse a los vehículos afectados por el desbordamiento del río. Algunos que no pudieron trasladarlos a tiempo antes de que el agua los engullera han tenido suerte. Otros, no tanta. Comercios, negocios, bares y restaurantes achican agua y hacen balance de las pérdidas provocadas por la mayor crecida del caudal de los últimos 20 años. Recogemos en esta galería algunas de las imágenes de las numerosas pérdidas que han sufrido los vecinos de la capital navarra.