La Audiencia Provincial de Navarra condena a 'la manada' por un delito continuado de abuso sexual a nueve años de prisión por los hechos que se remontan al 7 de julio de 2016. El tribunal ha considerado que los integrantes del grupo, Antonio Manuel Guerrero Escudero, Jesús Escudero, José Ángel Prenda, Alfonso Jesús Cabezuelo, y Ángel Boza, son culpables de un delito de abuso sexual y no de agresión sexual, tal y como pedía la Fiscalía y la acusación particular, y del que han sido absueltos. También han sido absueltos de un delito contra la intimidad y solo uno ha sido condenado a 900 euros de multa por el hurto del móvil de la joven: Antonio Manuel Guerrero, que confesó el robo.
El Código Penal define el delito por el que han sido condenados, abuso sexual, como actos que atenten contra la libertad sexual “sin violencia e intimidación” y sin que medie consentimiento. Por lo tanto, el tribunal entiende que no existió violencia e intimidación, tal y como se define el delito de agresión sexual en la ley. Los magistrados sí consideran que hubo prevalimiento, que se produce cuando el agresor se aprovecha de una concreta y especial situación de superioridad, confianza, prestigio o potestad con respecto a la víctima.
Además de los nueve años de condena, el tribunal les ha impuesto la prohibición de acercarse a la víctima a una distancia inferior a los 500 metros y la prohibición de comunicación con la víctima durante 15 años. Además, tras cumplir la pena de cárcel, todos deberán cumplir cinco años de libertad vigilada.
El presidente de la Sección Segunda de la Audiencia Nacional, José Francisco Cobo, ha leído el fallo sobre la una del mediodía en la sala de vistas 102 del Palacio de la Justicia de Navarra. El fallo ha contado con el voto particular del magistrado Ricardo González, que pedía la absolución de los cinco integrantes de 'la manada' y solo reconocía la condena a uno de ellos por el hurto del móvil.
La Audiencia de Navarra también ha considerado que son responsables civiles y, por ello, les ha condenado a indemnizar conjuntamente a la joven con 50.000 euros y con 1.531,37 euros al servicio navarro de salud.
La Fiscalía pedía para los acusados 22 años de cárcel: 18 por un delito de agresión sexual, 2 años por delito contra la intimidad y otros dos por el robo con intimidación del móvil. Las penas que solicitaba la acusación particular ascendían a 25 años. Las defensas, por contra, exigían la absolución de sus clientes.
Las partes, por un lado, Fiscalía y acusaciones populares y particulares, y por otro, las dos defensas, también asistían a la lectura. A las puertas del Palacio, una concentración de colectivos feministas aguardaba con impaciencia el fallo.
Han pasado 21 meses desde el 7 de julio de 2016, el día en que se produjeron los hechos, de madrugada y en solo cuarenta minutos: ese es el tiempo que transcurrió entre la primera conversación entre cinco hombres y una mujer en una plaza de Pamplona y la salida del grupo de chicos de un portal. Dentro, ella, en estado de shock, que poco después fue atendida por una pareja que la vio llorar desconsolada en la calle. “¿Quieres que llamemos a la policía?”. “Sí”, respondió ella. Los agentes recogieron su denuncia por agresión sexual grupal y los cinco chicos fueron detenidos horas después. Los cinco hombres han pasado estos 21 meses en prisión provisional.