El Departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra ha firmado y enviado ya a la empresa Ecofert Sansoian la resolución del cierre cautelar de sus instalaciones, situadas en Artajona, por haber recibido de manera irregular más de 20.000 toneladas de lixiviados (residuos líquidos) enviados desde la incineradora de Zubieta (Gipuzkoa) y la empresa Oleofat así como desde otros dos proveedores que no han sido revelados. El cierre se hará efectivo el próximo lunes, día en el que la empresa ha convocado a sus trabajadores a realizar una cadena humana en señal de protesta. La compañía, dedicada a la generación de fertilizantes y compostaje, ha anunciado que intentará levantar la decisión administrativa con una resolución judicial cautelarísima (urgentísima) ante una sala de lo contencioso-administrativo del Superior con el fin de suspender el cierre de sus instalaciones.
La resolución del Gobierno navarro, algo anunciado ya hace meses, llega tras una cascada de inspecciones e investigaciones que han implicado a técnicos de Medio Ambiente, Guarderío forestal, Policía Foral y Guardia Civil, y que han constatado que la planta recibió de modo “ilegal” residuos líquidos como si fueran lodos, cuando carece de autorización para sustancias que no sean sólidas o lodos consistentes, procedentes de la empresa Oleofat (13.799 toneladas entre 2022 y 2023) y de la incineradora de Zubieta, gestionada por el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK), dependiente de la Diputación Foral (5.500 toneladas). Es más, la Guardia Civil comprobó que había niveles altos de ecotoxicidad en la balsa de residuos de la empresa y que había un trasiego no autorizado de líquidos entre Ecofert Sansoain y otra empresa de los mismos dueños, La Coya.
Además del cierre cautelar de estas instalaciones, el Departamento que dirige José María Aierdi (Geroa Bai) ya ha anunciado sanciones que superan los 100.000 euros a la empresa Oleofat por haber generado un residuo llamado “concentrado de evaporador”, técnicamente catalogado con el código europeo común (LER) 190809 pero que fue enviado a la planta de Ecofert Sansoian de Artajona en camiones cisterna con el código 190814, el equivalente de “lodos” de tratamientos de aguas residuales.
Este área del Gobierno de la socialista María Chivite también ha solicitado a sus homólogos del Gobierno vasco que abran un “expediente sancionador” a Ekondakin, que es la empresa gestora de las instalaciones públicas del Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK), por el envío irregular de 5.500 toneladas de residuos líquidos a Ecofert Sansoain. El presidente de GHK es el diputado foral de Medio Ambiente de Gipuzkoa, José Ignacio Asensio, número dos de la Diputación y secretario general del PSE-EE provincial, que fue denunciado por estos hechos a la Fiscalía. Es un juzgado de Donostia el que investiga la causa, en la que se analiza no solamente el envío a Artajona sino también si Ekondakin caracterizó como lodos los residuos líquidos para camuflar su envío a la planta de Artajona.