La Presidenta de Navarra, María Chivite, y el Presidente de La Rioja, Gonzalo Capellán, han firmado este lunes un protocolo de colabroación para impulsar la investigación, el desarrollo y la innovación en el sector agroalimentario. Los dos presidentes han destacado la “importancia” de este convenio para “consolidar el liderazgo” de ambas comunidades en la tecnología alimentaria.
Según han apuntado en una comparecencia tras la firma del acuerdo, el impulso a los centros tecnológicos ubicados en ambas regiones es una de las prioridades del convenio. Los efectos del trabajo conjunto deben manifestarse en mejorar la competitividad de explotaciones y empresas, su sostenibilidad, así como la digitalización del sector. Para ello, han pactado instrumentar la colaboración de forma paritaria. Ambas comunidades destinarán la misma financiación y recursos de manera que los beneficios recaigan por igual en ambos territorios.
Las actuaciones se ordenan en cinco apartados: infraestructuras y ecosistemas de innovación, impulso a la innovación y transferencia tecnológica, talento, transformación digital y colaboración en redes de innovación. Se trata de dinamizar la mejor de la escala industrial y la gestión a través de la innovación a la par que se incide en la capacitación de las competencias de los y las profesionales del sector. En este contexto, Navarra y La Rioja pactan unir sus fuerzas para participar en redes y alianzas con otros centros de referencia. El protocolo tendrá una duración de cuatro años y las partes pueden acordar su prórroga por un período similar o la extinción.
Chivite ha celebrado que Navarra “es uno de los polos agroalimentarios de vanguardia, no solo de España sino también de Europa” por lo que ha señalado que el acuerdo es una herramienta “facilitadora para avanzar en la sostenibilidad y competitividad del sector”. “Ahí es donde la innovación juega un papel clave para genera procesos productivos más eficientes y atractivos para personas jóvenes; esto es importante en el marco del plan de relevo generacional del sector.”
Gonzalo capellán, por su parte, ha destacado la “cooperación entre administraciones diferentes” para “mantener el liderazgo” del sector en la “economía mundial” a través de acuerdos entre gobiernos “que han sabido priorizar” los intereses del sector.
El documento firmado da continuidad a una larga colaboración entre ambas comunidades en materia agroalimentaria. El Centro Nacional de Tecnología Alimentaria (CNTA) de San Adrián, junto a la privada, atrae inversión pública procedente del Estado y de las comunidades del eje del Ebro: Navarra, La Rioja y Aragón. A este respecto, la presidenta ha anunciado que en los presupuestos de 2025, se prevé “destinar un millón de euros para impulsarlo”.
La agroalimentación supone el segundo sector industrial de Navarra. Sin contar el sector primario, solo la transformación aporta un 5% al PIB de la comunidad foral. En términos de empleo, uniendo las dos vertientes del sector agro –producción y transformación, emplea a 25.000 personas y factura un volumen de 4.500 millones de euros al año, con una producción especialmente destinada al mercado exterior.