Cámaras del Guarderío de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra han confirmado la presencia de un ejemplar joven de oso pardo en las inmediaciones de la localidad navarra de Garde, de apenas 150 habitantes y situada en el valle del Roncal. Tras haber sido avistado por varias personas días atrás, las imágenes confirman la presencia de este plantígrado que pone en alerta a los habitantes de la zona.
Varios vecinos del valle del Roncal alertaron en las últimas semanas de la posible presencia de un oso, lo que llevó al servicio de Medio Ambiente a colocar varias cámaras por la zona de bosque cercana a la localidad de Garde. Las imágenes han confirmado que se trata de un ejemplar joven por su tamaño y se se busca ahora algún rastro que haya podido dejar el animal, como pelo, para realizar un análisis genético que permita identificarlo.
Se sospecha que podría tratarse de una cría de una de las dos osas eslovenas, Claverina y Sorita, que fueron puestas en libertad en 2018 por el Gobierno francés en el Bearn y que estuvieron a punto de provocar un incidente diplomático entre España y Francia por los ataques de estos plantígrados a rebaños de ganaderos navarros.
De hecho, a finales del pasado mes de mayo se registró en la zona de Isaba un ataque de un oso a un rebaño que causó la muerte de cinco ovejas. Se desconoce si el protagonista fue el mismo ejemplar que ahora ha sido captado por las cámaras de Medio Ambiente en Garde, pero se maneja la hipótesis de que así fuese.
En las últimas semanas no se han denunciado ataques por parte de ganaderos navarros, según confirman desde el Gobierno navarro a este periódico, pero los ganaderos de la zona de Garde ya han trasladado su preocupación al Departamento de Medio Ambiente por la presencia de este oso pardo y su difícil convivencia con el ganado ovino.