Sergio Sayas, de Navarra Suma: “Sánchez y Chivite han actuado con una falta de escrúpulos que debería darles vergüenza”

Sergio Sayas (Buñuel, Navarra, 1979) repite como cabeza de lista al Congreso por Navarra Suma, tras obtener el escaño el pasado 28 de abril. Representa a la coalición formada por UPN (partido al que pertenece Sayas), Ciudadanos y PP. Sayas atiende a este periódico en la sede de UPN en Pamplona a primera hora de la mañana, e insiste en que, ahora mismo, son “el partido más foralista de Navarra”. Sobre un hipotético apoyo a Sánchez, lo tiene claro: “Navarra está sobre la mesa”.

Empezamos pidiéndole una valoración sobre el Caso Alsasua

Como todas las sentencias, las respeto. Lo que demuestra la sentencia es que lo que pasó en Alsasua no fue una pelea de bar, y que el odio sigue inoculando muchas localidades de Navarra, donde tener un trabajo que a la izquierda abertzale no le gusta o tener una ideología que no coincida con el pensamiento único que la izquierda abertzale quiere imponer, tiene un coste para la vida personal y privada de esa gente. Y la prueba también de que lo de Alsasua no fue una pelea de bar es que la señora Bel Pozueta es la candidata de EH Bildu.

Sobre la Ley de Símbolos. El PSN aprobó admitir a trámite la propuesta de Navarra, ¿hasta qué punto está dispuesta a ceder Navarra Suma para lograr la aprobación de esa ley? ¿Cuáles son las líneas rojas?

Para nosotros las líneas rojas son que en Navarra ondeen los símbolos de Navarra, pero no es una cuestión de líneas rojas, es una cuestión de absoluta lógica. Los símbolos que representan a toda la Comunidad son la bandera del Ayuntamiento correspondiente, la bandera de la Comunidad Foral de Navarra y la bandera de España y de Europa. Todas las banderas que no sean esas, no deberían estar en las instituciones porque las instituciones nos representan a todos y tienen que estar los símbolos que compartimos todos. Esa es la posición que nosotros vamos a defender. Es la posición que siempre ha defendido el PSN, pero es verdad que matiza una vez que ha llegado a un acuerdo con los nacionalistas porque lo que hoy tenemos en Navarra no es un gobierno socialista, es un gobierno nacionalista presidido por una presidenta socialista.

Respecto al decreto foral del euskera. El Gobierno no va a recurrir la sentencia, pero ha organizado una mesa de trabajo para dar una salida a la sentencia. ¿Cuál sería una buena solución?

Pues el sentido común, que es justo lo que no tenía el decreto del euskera. Los hablantes sí tenemos el derecho de hablar la lengua que queramos, pero las lenguas no tienen derecho a tener clientes obligatorios, y lo que pretendía el decreto del euskera era que el euskera tuviera clientes obligatorios porque era fundamental para trabajar en la Administración pública. Por ejemplo, soy de la Ribera y en esa zona es muy difícil encontrar a alguien que hable euskera y que vaya a la Administración a solicitar un servicio en euskera, pero la realidad era que para algunas oposiciones, el euskera te estaba contando 2,6 puntos. 2,6 puntos son cinco veces la valoración de un máster. Yo puedo entender que el euskera tenga una valoración porque es una lengua propia de Navarra, que en algunas localidades del norte sea un requisito porque sí es una lengua que la gente habla y con la que se dirige a la Administración. Lo que no puedo entender es que se trate de negar una realidad de Navarra, que es la zonificación lingüística, porque no se hace el mismo uso de la lengua en la zona norte de Navarra que en mi pueblo, en Buñuel. No tiene nada que ver, y por tanto, la realidad de la Administración no puede ser la misma.

Entonces, ¿qué peso plantean para el euskera en la Administración?

Creo que es mucho más adecuado a lo que había antes que a lo que cambió el decreto del euskera. Puedo llegar a entender que en algunas zonas de Navarra, se pueda valorar el euskera como saber inglés. Eso sí que me puede parecer una medida para fomentar el uso de la lengua como un conocimiento, aunque no vaya a ponerse en práctica en la Administración. Probablemente el inglés tampoco se va a poner en práctica en muchas localidades de Navarra. Lo que no puede ser es que el euskera sea tan determinante en un concurso público porque hace que solo la persona que lo habla pueda conseguir esa plaza. Y eso no se ajusta a la realidad lingüística.

Menciona el caso del inglés. Con esta situación, se va a dar el caso de que en algunas localidades, el inglés o cualquier otra lengua extranjera va a tener más peso que el euskera. ¿Es lógico que en la Administración se valore más el inglés o el alemán que el euskera?

Pues depende. Por ejemplo, hay puestos en la Administración donde es mucho más importante saber inglés que saber euskera, como en todo lo relativo con el comercio internacional o las exportaciones. Yo no digo que lo que había antes fuese perfecto y que no se pueda avanzar, pero creo que tenemos que ponerle sentido común. Una lengua propia de nuestra comunidad sí tiene que tener un tratamiento en el que se le pueda apoyar, pero una cosa es un tratamiento en el que se le pueda apoyar, y otra cosa es una valoración que la trate de imponer. Hay en algunas plazas donde el euskera es imprescindible, nadie discute eso. Pero en aquellas en las que el euskera no es imprescindible, vamos a adecuar esa valoración a la realidad lingüística de la zona.

Sobre la devolución del IRPF por maternidad, ¿qué solución plantean?

Hay una sentencia judicial que dice que no es obligatorio devolver, como sí es en el resto de España, pero que no impide devolver. O sea, es una decisión política. Hemos presentado una modificación legal en el Parlamento de Navarra, que si saliese adelante, permitiría devolver. No sale porque se ha rechazado, pero hay instrumentos para poder devolver. Hay un compromiso político por parte del PSN y de Navarra Suma, que el PSN no ha cumplido. El PSN dijo durante la campaña electoral que iba a devolver el IRPF a las madres. La señora Chivite se sentó con las madres en una reunión y les dijo que iba a devolver el IRPF, y ahora lo que les está contando es otra cosa muy diferente. Entonces, ha incumplido su promesa. Es una cuestión de voluntad política.

La exención no está permitida por esa sentencia judicial, lo que se ha planteado es una deducción, pero...

Eso es lo que plantea el Gobierno.

Eso dice la sentencia.

No, eso es una interpretación de la sentencia que hace el Gobierno. Yo le digo que sí, que es cuestión de voluntad política, y que hay instrumentos legales para poder devolver.

Dicen que hay que priorizar a las madres navarras, pero fue su propia ley -elaborada por UPN- la que las equiparó al resto del Estado.

Sí, en un momento en el que toda España estaba haciendo eso, solo que efectivamente en España lo hicieron mal y se recurrió y se ganó. Siempre hemos defendido que Navarra no puede estar en peor situación fiscal que el resto de España. Y lo que nos encontramos cuando en el resto de España se devolvió, es que las madres navarras estaban en peor situación que las que habían estado en el régimen común, y propusimos iniciativas legislativas en el Parlamento para tratar de paliar esa situación. Cuando nosotros hicimos esa ley, las madres navarras no estaban en peor situación que las del régimen común, pero cuando ese régimen común se anuló, si se quedaron en una situación peor. Ese fue el cambio de posición.

Hablamos ya de Cataluña. Si la escalada de violencia continúa, ¿debe el Estado central adoptar medidas extraordinarias?

Yo creo que el Gobierno de España tiene que cumplir con su cometido, que es garantizar el orden público, defender la libertad en Cataluña y defender la ley y fundamentalmente, la Constitución. Si el Gobierno catalán hace una dejación de funciones, es más, si el Gobierno catalán se comporta como un CDR, que es lo que está haciendo, pues por supuesto que el Gobierno de España tendrá que actuar. Lo que no puede ser es que se esté devastando Cataluña, que tengamos a gente sin poder salir de casa durante semanas. Se está dañando de una manera notable las inversiones en la generación de empleo, la imagen de Cataluña y lo que eso pueda contribuir al futuro de la Comunidad. El Gobierno de España tendrá que ser responsable en eso.

¿Qué medidas plantean?

Las medidas que legalmente están previstas. Yo creo que ahí hay que confiar en el Gobierno de España, en que dé los pasos adecuados conforme a la legalidad. Hay una medida que me parece fundamental y que es la primera que hay que tomar, que es que los partidos que de verdad piensan en España no deben pactar jamás con aquellos partidos que piensan en romper España. Lo que no puede ser es que Sánchez nos quiera vender la idea de que es contundente en Cataluña, cuando está gobernando con ERC en un montón de ayuntamientos de la Comunidad. Lo que está haciendo es ceder a las políticas independentistas, que lo único que hacen es sembrar de nacionalismo y de independentismo la Comunidad, y que son cómplices de la violencia en Cataluña. El Gobierno catalán es cómplice de la violencia que está habiendo allí.

Repiten fórmula como Navarra Suma. En la anterior campaña aseguró haber convencido a Ciudadanos para que respetase el régimen foral pero, ¿hasta qué punto está respetando la autonomía de Navarra cuando exige la disolución del Gobierno de Navarra para permitir un gobierno de Sánchez?

A ver, lo que está diciendo el señor Rivera, yo lo comparto perfectamente. Lo que no puede ser es que alguien quiera llegar al Gobierno de cualquier manera y a cualquier precio. Es lo que hace el señor Sánchez. Hemos visto a un señor Sánchez al que le daba igual llegar al Gobierno de la mano del PP y de Ciudadanos, vía una abstención, que de la mano de ERC. Eso evidencia dos cosas: uno, que no tiene proyecto político; y dos, que lo que tiene es un interés desmedido por gobernar a cualquier precio. Con lo cual, lo que le está pidiendo el señor Rivera, lo que le pido yo, lo que le pide el señor Casado, y lo que le pide cualquiera, es coherencia. Si usted dice que en España el nacionalismo es malo y que usted no quiere llegar a gobernar con los nacionalistas, pues oye, usted en Navarra y en Cataluña está pactando con los nacionalistas. Sea coherente. El nacionalismo que hay en el Congreso de los Diputados no es menos pernicioso para la sociedad que el que tenemos en Navarra o en Cataluña. Es una cuestión de coherencia, pero eso no tiene nada que ver con el respeto a la autonomía de Navarra. Uno a la hora de pactar podrá poner las condiciones que quiera.

Dejando al margen la coherencia de lo que haga Sánchez, la petición de Rivera de romper ese supuesto pacto con EH Bildu pasa por la disolución del Gobierno navarro...

Para empezar, pasaba porque no se hubiese formado. Me parece que tanto el señor Sánchez como la señora Chivite han actuado con una falta de principios y de escrúpulos que les debería dar vergüenza. Y, sobre todo, es un insulto a los socialistas que durante tanto tiempo en esta tierra han defendido la libertad. Es que el PSN no debería nunca plantearse ser Gobierno con los votos de EH Bildu, pero ya no sólo porque EH Bildu sea un partido que no condena la violencia, que ya me parece una razón suficiente. Es simplemente porque los proyectos políticos que defienden ambos son contradictorios y antagónicos. Entonces, cuando alguien pretende llegar al Gobierno con un partido que defiende posiciones antagónicas, está demostrando que lo único que le importa es llegar al Gobierno. Cuando alguien tiene un proyecto para la sociedad y en lo que discrepa es en el medio de conseguirlo, uno puede dialogar. El problema es cuando el punto final es contradictorio porque uno quiere ir a un sitio y otro quiere ir al que está en el lado opuesto. Es legítimo donde quiere ir EH Bildu, en el sentido de que políticamente es defendible; exactamente igual que es defendible el punto al que quiero ir yo, pero como son contradictorios, yo nunca podría pactar con EH Bildu.

En este momento hay un Gobierno del PSN con Geroa Bai y Podemos, no EH Bildu. ¿Exigir esa disolución es compatible con las ideas de UPN dentro de Navarra Suma?

Sí, claro, por supuesto. Para empezar, el PSN no podría haber aceptado los votos de EH Bildu porque sin los votos de EH Bildu no habría ese gobierno. Esa es la primera parte. Además, el precio de esos votos ya lo estamos viendo en la Mancomunidad de Pamplona, en el Ayuntamiento de Huarte, en la Federación de Municipios. Aparte de eso, con Geroa Bai, tampoco. Geroa Bai está defendiendo un proyecto para Navarra que, por supuesto, es legítimo y respetable, pero es contradictorio con el que plantea el PSN

Si PSN les hubiese apoyado a ustedes para llegar al poder, ¿se entenderían sus proyectos?

Es que no son contradictorios porque el PSN y nosotros queremos una Navarra foral que forma parte de España. A partir de aquí, podremos discrepar en el medio para alcanzar ese fin, que podrá ser que ellos puedan proponer una política social distinta a la nuestra, o nosotros una política económica distinta a la suya, pero eso son los medios para conseguir un fin. Eso es un debate posible. El problema es cuando las realidades institucionales, lo que se quiere para Navarra, es opuesto, porque si la señora Barkos quiere que Navarra sea Euskadi y la señora Chivite, no, tienen dos modelos de Navarra completamente distintos. Es muy difícil acordar.

Por tanto, se ha llegado a utilizar a Navarra como moneda de cambio, como condición, para que haya un Gobierno estatal. ¿Considera peligrosas esas injerencias sobre Navarra?

A mí lo que me parece peligroso es el Gobierno que tenemos. Yo lo comparo con Cataluña. Nosotros admirábamos hace diez años a Cataluña y hablábamos de nacionalismo moderado frente al nacionalismo vasco, que en ese momento tenía una banda terrorista ETA que mataba. Bueno, lo que ha pasado en Cataluña es que durante años han estado sembrando nacionalismo en la sociedad, utilizando los recursos públicos para comprar medios de comunicación y adoctrinando la educación. Y todo eso lo han hecho partidos nacionalistas y el PSOE porque el presidente Montilla ha sido uno de los presidentes más nacionalistas que ha tenido Cataluña; y eso me preocupa cuando lo traslado a Navarra. Le vuelvo a decir, hoy en Navarra hay una presidenta socialista, sí, pero preside un gobierno nacionalista. Y va a seguir la misma senda que la señora Barkos hizo los cuatro años anteriores: sembrar nacionalismo, adoctrinar a través de la educación, imponer una lengua como una vía de construcción nacional, y eso puede hacer que Navarra en unos años sea lo que hoy es Cataluña, y esa es mi preocupación.

¿Qué posición mantiene respecto al autogobierno de Navarra?

Nosotros somos el partido más foralista y que más defendemos el autogobierno de Navarra. Nosotros hemos nacido para defender la autonomía de Navarra, creemos en el régimen foral, creemos en el convenio económico y creemos en los derechos históricos de esta Comunidad. Es nuestra razón de ser.

Pero en la anterior campaña electoral mantuvo en una entrevista que “¿para qué quiere Navarra más competencias?” ¿Esto choca con su planteamiento?

No, yo lo que dije en esa entrevista es lo siguiente. Por ejemplo, nosotros en materia de tráfico de camiones ya tenemos competencia. Y sin embargo, ¿quién está prestando ese servicio? La Guardia Civil en Navarra. Si nosotros estamos diciendo que queremos más competencias para la Policía Foral, y lo que está pasando es que no tenemos policías forales suficientes, o si estamos diciendo que queremos asumir servicios de bomberos nuevos cuando realmente tenemos los parques por debajo del mínimo legal requerido muchos de los días del año... Pues hombre, hay que tener sensatez y prestar bien las competencias que tenemos antes de asumir otras competencias nuevas. Eso es lo que dije, no que no esté de acuerdo en asumir competencias nuevas, sino que las asumamos en el momento en que podamos.

¿Apoyan la transferencia de competencias como Tráfico y Sanidad Penitenciaria?

Nosotros la de Tráfico la hemos defendido siempre, pero lo que dijimos es que una cosa es la titularidad de la competencia y otra es la prestación de servicio. La colaboración institucional tiene que seguir y la Guardia Civil puede estar perfectamente prestando ese servicio, igual que lo hace en materia de camiones. En prisiones, no defendemos esa competencia. Creemos que las prisiones son una competencia del Estado. Mire lo que estamos viendo en Cataluña. No creo que sea ninguna prioridad para Navarra tener la competencia de prisiones en este momento.

De acuerdo con el sondeo electoral realizado por Endika Nuñez para eldiario.es, tienen garantizados sus dos escaños. ¿Qué espera de una campaña que va a ser prácticamente la mitad que el resto?

Lo que espero es que seamos capaces de movilizar al electorado, un electorado que está harto y que está defraudado porque no ha habido un Gobierno en España. Yo creo que es única y exclusivamente responsabilidad de Pedro Sánchez ,y mire que yo no comparto para nada la ideología de Podemos, pero yo no le achaco a Podemos que no se haya formado Gobierno, se lo achaco al señor Sánchez. Creo que esa irresponsabilidad nos ha llevado a una repetición electoral y nosotros vamos a tratar de contarle a la gente durante esta campaña varias cosas. En primer lugar, que quién es el responsable de las elecciones no va a recibir el premio de la gente de reforzarlo, sino todo lo contrario. En segundo lugar, que es hora de la política con principios. Lo que hemos visto es mucho politiqueo de despacho y pocos principios a la hora de pactar. Y en Navarra, creo que el PSN ha demostrado tener muy pocos principios con el Gobierno que ha hecho.

En un hipotético acuerdo entre Casado y Rivera, si tienen que elegir a quien hacen presidente, ¿a quién votaría?

Al que tenga un escaño más.

¿Quién sería mejor presidente de los dos?

Uy, eso ya, como comprenderá, yo soy socio de los dos y ahí la prudencia aconseja no dar esa opinión.

Si Rivera decide apoyar a Sánchez en la formación de un Gobierno para evitar otra repetición electoral, ¿estarían dispuestos a apoyar ese pacto y a aprobar los presupuestos?

Nosotros estuvimos dispuestos a apoyar a Sánchez, siempre y cuando Sánchez tuviera la coherencia de lo que estaba defendiendo en Madrid, hacerlo en Navarra. Rivera y Casado tienen un acuerdo firmado con UPN, que no pueden apoyar a un presidente del Gobierno, si en Navarra no hay un cambio de Gobierno. Eso lo tienen firmado tanto Casado como Rivera. Si el señor Rivera acaba apoyando al señor Sánchez porque Sánchez busca la fórmula para que en Navarra deje de existir el pacto que el socialismo ha hecho con el nacionalismo, nos parecerá muy bien, porque lo que no puede ser es que el señor Sánchez le pida al señor Rivera el apoyo en España para que el nacionalismo no gobierne, mientras tiene aquí un gobierno sustentado en base al nacionalismo.

Entonces, están exigiendo otra vez la disolución de un gobierno que, de momento, está legítima y legalmente constituido.

Nosotros no cuestionamos ni la legalidad de ese Gobierno ni su legitimidad.

Pero lo están exigiendo como moneda de cambio.

Lo que estamos diciendo es que alguien que pide el apoyo para que los nacionalistas no gobiernen en España, no puede tener la falta de coherencia y la falta de escrúpulos de tener en Navarra un gobierno con los nacionalistas porque es incoherente. Aquí la señora Chivite ha podido hacer el Gobierno que le ha dado la gana, y nosotros, a la hora de poner nuestros votos en nuestra mesa, también podremos poner las condiciones que nos dé la gana. Y a partir de aquí, el señor Sánchez las podrá aceptar o no. Navarra es una condición sobre la mesa. Está firmada tanto por el señor Rivera como por el señor Casado, y por tanto yo no tengo ninguna duda de que cumplirán lo que han firmado.

Es difícil que llegue a plantearse la disolución de un Gobierno en pleno ejercicio, por tanto, aunque esta condición no se cumpla, si pudiesen evitar que tuviésemos que llegar a otras elecciones, ¿estarían dispuestos a ceder?

No. Yo no puedo avalar a un presidente que es incoherente, que no tiene un proyecto para España. No es cuestión solo de que haya elecciones o de que no haya. El problema es que el señor Sánchez, si se presenta a una investidura, tendrá que elegir bien a sus socios y elegir a sus socios, significa defender un proyecto político. Y ese proyecto político no es el mismo si uno llega con ERC, que si llega con el PP. El problema del señor Sánchez es la incoherencia, además de la desidia que ha tenido a la hora de hacer el Gobierno, porque desde luego, alguien que quiere hacer un gobierno no está quince días en Doñana en agosto, repanchingado, tomando el sol.

Si resulta elegido, como indican los sondeos electorales, ¿cuáles van a ser sus prioridades?

Para nosotros las prioridades son el tren de alta velocidad (TAV) y el Canal de Navarra. Sobre el canal, nosotros creemos que el sector agroalimentario es clave para el futuro de Navarra, y una infraestructura como el canal es irrenunciable para esta Comunidad. Y en segundo lugar, el TAV. Cuando se plantea el tema del tren, desde el punto de vista de llegar antes a Madrid, es absurdo. O sea, el tren no es para llegar antes a Madrid. El tren es para hacer a Navarra una ciudad más competitiva, una puerta de salida a Europa. En la medida en que nosotros mejoremos las infraestructuras en Navarra, estaremos atrayendo más inversión y, por lo tanto, generando más empleo y más economía para esta tierra. Es por eso por lo que estamos defendiendo esas infraestructuras, no son un capricho ni una banalidad. El TAV es fundamental para Navarra porque nos va a conectar con la Y vasca, nos va conectar con el resto de Europa y nos va a hacer llegar a cualquier zona de España en un tiempo muchísimo menor.