El Partido Socialista de Navarra (PSN) ha aplicado en Pamplona y en el resto de ayuntamientos de la comunidad foral su máxima de no pactar con EH Bildu, tal y como se habían comprometido en campaña y cumplieron este mismo viernes en el Parlamento foral, donde la coalición abertzale ha logrado un puesto en la Mesa pero sin el apoyo expreso de los socialistas. Así, la derecha de UPN ha hecho valer sus 9 concejales para mantener la Alcaldía de Pamplona por ser la lista más votada.
Pese a que desde EH Bildu confiaban en un acuerdo de última hora, no ha habido sorpresas. La propia secretaria general del PSN, María Chivite, había confirmado el viernes que no iban a investir a Asiron pese a que necesita los votos de la izquierda abertzale para ser investida de nuevo presidenta de Navarra. Los cinco concejales socialistas han votado en blanco y han imposibilitado que EH Bildu, con 8 concejales llegase a la mayoría absoluta de 14, pese a que Asiron sí ha recibido los apoyos de Geroa Bai (2) y Contigo/Zurekin (1). Cristina Ibarrola, de UPN, ha sido por tanto investida nueva alcaldesa de Pamplona con el apoyo también del PP del tránsfuga Carlos García Adanero.
UPN logra mantener así la Alcaldía de la capital navarra pese a la fractura de la derecha en las elecciones forales y municipales y que también se ha confirmado en las generales. La coalición Navarra Suma (UPN, PP y Ciudadanos) es ya historia pero, pese a pasar de 13 a 9 concejales, los regionalistas siguen siendo el partido con más apoyos en Pamplona.
Finalmente no se ha llegado a plantear la “tercera vía” que había propuesto el PSN ante el veto impuesto EH Bildu. El plan que habían diseñado consistía en un parche temporal, investir alcalde a uno de los dos candidatos con menor representación, Koldo Martínez (Geroa Bai, dos escaños de 27) o Txema Mauleón (Contigo/Zurekin, sin más compañeros). Se buscaba, en definitiva, un candidato de consenso que contara con el apoyo de los socialistas y de EH Bildu para impedir un nuevo Ejecutivo de la derecha. Pero EH Bildu cerró la puerta desde un principio a esta alternativa al entender que les sólo les podía corresponder a ellos liderar el Gobierno municipal por haber sido la fuerza progresista más votada. “Las terceras o cuartas vías que aceptan el veto a EH Bildu solamente están sirviendo para aliviar la responsabilidad del PSN, que sigue empeñado en dar paso a la derecha en Pamplona para satisfacer sus propios cálculos políticos”, lamentaba esta semana Joseba Asiron.
El candidato de EH Bildu, Joseba Asiron, se ha mostrado molesto tras el pleno en el que ha resultado investida Cristina Ibarrola. “Si Pamplona tiene un Gobierno municipal de derechas, la única responsabilidad de ello tiene que recaer en quien se ha empeñado en imponer un veto a la fuerza progresista más votada en la ciudad -EH Bildu-”. “Sobre la base de la exclusión, sobre la base de los vetos, no se puede construir nada, y mucho menos se puede construir algo que quiera ser progresista”, ha aseverado Joseba Asiron, quien ha descartado la posibilidad de una futura moción de censura a la nueva alcaldesa regionalista, como había planteado el concejal de Contigo/Zurekin, Txema Mauleón.
La edil socialista Elma Saiz, por su parte, ha asegurado que han sido “coherentes” con lo que habían prometido en campaña. “Dijimos que no íbamos a investir alcaldesa a Cristina Ibarrola ni alcalde a Joseba Asiron, y eso hemos hecho”, ha señalado tras apuntar que trataron de sacar adelante “la tercera vía hasta el último momento”.
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