Ante el temor a una nueva oleada de coronavirus que pueda afectar de nuevo a las residencias de ancianos, que durante el pico de la pandemia fueron los centros que más sufrieron el impacto de la COVID-19, Navarra formará a través del Servicio Navarro de Empleo a 300 personas en cuidados básicos de personas en situación de dependencia para poder así contar con una bolsa de profesionales a los que poder recurrir ante una posible necesidad de contratación en estos centros por el empeoramiento de la situación epidemiológica.
“Se van a generar bolsas de empleo de personas mínimamente cualificadas para poder cubrir de manera rápida bajas derivadas de contingencias COVID-19, como pueden ser bajas por enfermedad o aislamientos preventivos”, ha señalado la consejera de Derechos Sociales, Mari Carmen Maeztu, que ha apuntado que la medida se toma pensando sobre en todo en los centros residenciales de la zona rural, al ser los que más dificultades pueden tener para encontrar personal cualificado en caso de necesitar reemplazar personal de baja. Y es que en las 71 residencias, públicas y privadas, de la tercera edad de Navarra, trabajan en torno a 2. 000 cuidadores y cuidadoras. Durante la cuarentena, hubo en torno a 500 bajas por COVID-19. Situación que se quiere evitar en caso de una segunda ola de la pandemia.
Los únicos requisitos para acceder a la formación son tener competencias básicas (lingüísticas y de lecto-escritura) y estar de alta como demandante de empleo o en mejora de empleo en el SNE-NL. El curso no conlleva certificación de profesionalidad pero está catalogado y las personas recibirán diploma. Los cursos, de 30 horas de duración, serán impartidos en cinco días de una misma semana, según ha indicado la consejera.
El curso de cuidados básicos abordará cinco temas, uno por día: cuidados básicos (higiene, prevención, camas, promoción de la autonomía), movilizaciones y actividad física (traslados, cambios de postura, ayudas técnicas), alimentación y medicamentos (dietas, fármacos y primeros auxilios, medidas de aislamiento), enfermedades transmisibles y comunicación y psicología (habilidades sociales, acompañamiento, enfermedades y ética del cuidado). Serán impartidos por docentes especializados y profesionales de residencias.
También serán prácticos (habrá camas articuladas, grúas, sábanas especiales) e incorporan, además, el manejo de equipos de protección individual.
Serán impartidos por Cruz Roja y Areté. En Pamplona, se ofrecerán cursos de mañana y tarde (estos en el centro Iturrondo de Burlada/Burlata). El SNE-NL cuenta con un presupuesto de 80.000 euros.
La consejera ha animado a la población interesada a inscribirse. “Al margen de la situación de la COVID-19, tendrán mejor posicionamiento ante ofertas de trabajo y podría ser el inicio de un itinerario formativo sociosanitario”.