La candidata de Geroa Bai a la Presidencia de Navarra, Uxue Barkos, ha asegurado que no conformará un “gobierno de cuotas de partidos” y, además, ha afirmado que sigue aspirando a que al “sustento” de los partidos “comprometidos con el proyecto de cambio” (Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e Izquierda-Ezkerra) se sumen “en su momento” los del PSN.
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Barkos ha insistido en que, en caso de que sea elegida, intentará conformar un gobierno “estable e integrador” que sea capaz de “mirar a cuatro años vista”. De cualquier modo, ha precisado que, “no solo corresponde a Geroa Bai” su conformación, sino que será “un gobierno acordado entre las fuerzas del cambio”.
La representante de Geroa Bai ha asegurado que no presidirá “un gobierno de cuotas de partidos”, en el que cada formación hace “un pequeño reino de taifas”, y ha reconocido que, en este momento, es “difícil” que pueda formarse un gobierno de cuatro formaciones, aunque ha asegurado que “tampoco imposible”.
En relación al PSN, ha explicado que, si bien “no ha dejado de haber conversaciones”, los socialistas han insistido en “no converger de ninguna manera” con EH Bildu, lo que no significa que no aspiren “a que esos 26 escaños en el Parlamento de Navarra, hoy comprometidos de manera abierta con un proyecto de cambio, no tengan en su momento el sustento de 33 parlamentarios” al sumar los apoyos de PSN.
“Sin revanchismo”
Barkos, que ha apostado por gobernar “sin revanchismo” porque “aquí no sobra nadie”, ha asegurado que, si es elegida presidenta, se realizará una “severa auditoría” sobre la situación “real” financiera de Navarra y se estudiará, “de manera detenida, qué tipo de gestiones se han llevado a cabo de manera evitable, con falta de rigor en la gestión”.
Entre las primeras medidas que considera necesario impulsar desde el Gobierno, ha citado el “compromiso especial con la senda de paliar la brecha de injusticia y dolor en la pobreza que sufre una parte importante de sociedad”.
También ha apostado por fomentar que los ciudadanos navarros tengan “la oportunidad de valorar, querer y hablar” euskera “desde la no imposición”. En esta línea, ha planteado que toda la red navarra de educación pública permita estudiar en lengua vasca, sin que las ikastolas, que han estado asumiendo “el esfuerzo que debería haber hecho la administración”, sufran “un bofetón”.
Por otro lado, en materia de memoria, ha afirmado no compartir con EH Bildu que “no se lleve a cabo una condena rotunda y sin paliativos” de la violencia “con cualquier término o proposición semántica”, si bien ha censurado también que UPN “se ponga de perfil” y mantenga “el nombre de la plaza Conde de Rodezno o el Mausoleo de Mola y Sanjurjo”.