El apoyo de Errejón a Bosch aviva las críticas en el final de campaña de Podemos en Navarra

Podemos afronta una semana decisiva, también en Navarra. Desde el lunes y hasta el viernes, cualquiera que se registre en su web puede elegir entre las tres candidaturas a la Secretaría General, un paso clave para conocer los referentes de la formación en las próximas elecciones forales. Desde dentro ha habido quien se ha referido a este proceso incluso como una muestra de con quién quieren los y las simpatizantes del partido que pacten en la Comunidad Foral. Como un plebiscito, con esas palabras.

La posibilidad de un pacto con Bildu que pueda arrebatar la Presidencia del Gobierno Foral a UPN ha sido el gran tema de discusión con el que arrancó este proceso, el segundo que afronta la formación encabezada por Pablo Iglesias en Navarra tras la elección de sus líderes municipales. Y el último cruce de reproches ha surgido precisamente por el apoyo evidente de la cúpula del partido a una de las candidaturas, la primera de las tres en anunciarse, la que encabeza Joan Josep Bosch. Entre tanto, ha habido acusaciones para todos los gustos: de manejar una estructura de arriba abajo como los partidos al uso (a Bosch), de ser una opción B de la izquierda abertzale (a Laura Pérez Ruano) y de quejarse simplemente por sentirse apartados (a Sandra González).

Incluso, también ha habido reproches por la escasa presencia que se ha dado en los debates a tres que durante la semana pasada se desarrollaron en cuatro puntos de Navarra a quienes se presentan como independientes a formar parte del Consejo Ciudadano. Esta tensión en general ha avivado las críticas por la falta de una línea común. Sea como fuere, estas son las características de las tres candidaturas que optan a ser el referente de Podemos (y está por ver si también del cambio, como pronosticó la discutida encuesta del Navarrómetro) en la Comunidad Foral. El resultado se conocerá este 14 de febrero.

Bosch, el candidato apoyado por Errejón

Ha sido el gran tema de discusión del cierre de campaña: que el número dos de Podemos, Iñigo Errejón, acudiera este sábado al final de la campaña de Navarra sí puede, la candidatura de Joan Josep Bosch. Este economista y profesor asociado en la UPNA ya era considerado, en cualquier caso, el candidato oficial tras haber formado parte de las listas europeas de la formación. De ahí que sorprendiera que una de sus propuestas clave fuera acudir a las elecciones con unas siglas diferentes a las de Podemos, lo que permitía asegurar, afirmó, la toma de decisiones en Navarra sin afectar a la formación en todo el Estado.

En cualquier caso, Bosch se ha convertido en el claro contrincante a batir, y las otras dos candidaturas han criticado, por ejemplo, que su estructura ha sido la de un partido habitual, con una propuesta realizada de arriba abajo para, solo después, abrirla a la participación. Bosch, por su parte, defiende que su candidatura es la más trabajada de las tres, que su campaña ha sido “escrupulosamente educada” y que se ha basado “más en la propuesta y menos en la crítica”. Porque, admite, le han dolido ciertas críticas procedentes de otras candidaturas.

Pérez Ruano, cerrada al pacto con UPN, PSN y PPN

Su presentación ha marcado su candidatura. Laura Pérez Ruano, abogada y profesora de euskera en un instituto de Estella, afirmó de entrada que no pactaría con UPN y PPN, pero tampoco con el PSN. Esta apuesta la situó como la candidata de Podemos que apoya el acuerdo con Bildu.

Por otro lado, la candidatura ha sido muy crítica con el apoyo, en principio a título individual, de Errejón a Bosch, algo que en su opinión “puede contravenir el artículo 5 del reglamento para las elecciones a cargos autonómicos”. En cualquier caso, su propuesta, Podemos cambiar Navarra, también ha sido respaldada por referentes del partido en Andalucía como Teresa Rodríguez, y en Madrid, como Miguel Urbán. De las tres candidaturas en Navarra, es la que más ha insistido en sus políticas sociales, como la apuesta por un plan de empleo, una banca pública o una política fiscal progresiva. “Hemos salido de la calle y no vamos a dejarla”, aseguran, insinuando que otras candidaturas se han olvidado de las bases.

Sandra González, la opción de Tudela

La tudelana Sandra González fue la última en anunciar su candidatura y eso la ha convertido en la tercera en discordia, crítica con las dos anteriores candidaturas. Frente a Bosch, ha defendido que su opción es la de ser una opción 100% Podemos (de ahí el nombre de la candidatura) que no aboga por adoptar otros nombres; y, frente a Pérez Ruano, ha asegurado que Podemos no tiene por qué lanzarse ya a hablar de pactos, por ejemplo, con Bildu. Desde su candidatura insisten en que los acuerdos deberían ser programáticos, y no solo por un juego de siglas.

La candidatura de González fue, por otro lado, la primera en criticar la falta de organización de este proceso foral. También ha censurado que se haya restado presencia a los candidatos y candidatas independientes, ha acusado a las otras dos opciones de prácticamente presentar los debates como un enfrentamiento a dos bandas, y ha criticado a sus rivales por vender los apoyos desde el exterior (como Errejón o Rodríguez) cuando “todos somos Podemos”. Cómo se resuelvan estas diferencias será clave para que quien ocupe la Secretaría General sepa aunar la complicada diferencia de sensibilidades agrupada en el partido.