Dos de los exresponsables de la empresa navarra Koxka, como parte de AIAC, han demandado al fondo de inversión estadounidense por despido improcedente. Se trata de Jordi Martínez y Mark Johnston, que son dos de las cuatro personas que figuran en la denuncia de los trabajadores para que el Juzgado de lo Mercantil considere culpable el concurso de acreedores de esta planta, situada en el polígono pamplonés de Landaben. Es decir, una representación de la plantilla defiende que la empresa hace aguas por culpa de estos gestores, a quienes también han señalado los proveedores de la firma, que insisten en que la deuda con ellos se disparó durante la etapa de AIAC al frente de Koxka, una empresa dedicada a la fabricación de mobiliario industrial de frío, adquirida por este fondo en 2010 a través de la sociedad Isoard BV. En concreto, se habla ya de 16 millones de euros de deuda con alrededor de 90 proveedores.
Una representación de diez de estas empresas proveedoras es la que, al igual que parte de la plantilla, el pasado 23 de febrero pidió que el concurso sea declarado culpable, una posibilidad remota, que apenas se da en un 5 o 10% de los casos, según apuntan expertos en Ley Concursal. En esa denuncia están agrupadas Tafatrans Logística y Servicios, Fevimax Logística, Sumelec Navarra, Talleres Auxiliares Alfi, Miramón, Gureak Navarra, Maderas Azcona, Imprenta Zubillaga, Suministros Eléctricos Gabyl y Comercial Navarra Instrumentación. En el texto, se carga contra la actuación tanto del Consejo de Administración como de los apoderados que permitieron que, mientras en octubre de 2013 las deudas de los proveedores eran de 463.578 euros, en apenas dos meses ascendiera hasta 1,74 millones. Pero esa cifra se disparó en 2014; tanto, que ahora rondaría los 16 millones mencionados, repartidos entre alrededor de 90 empresas.
Fuentes de estas empresas, que se refieren a esta actuación como un “desfalco”, hablan de supuestas falsas promesas de pago, engaños para ocultar los problemas de insolvencia de la empresa y presiones para que siguiera llegando el material. Una situación que ha obligado a estas firmas, según argumentan, a llevar a cabo ajustes en la plantilla y realizar, en conjunto, en torno a un centenar de despidos, además de buscar nuevas formas de financiación para tapar el agujero.
Esta presunta mala praxis coincide, grosso modo, con el relato realizado por representantes de la plantilla. 178 de ellos, junto a los sindicatos UGT, CCOO e Independientes, han colaborado para pedir también que el concurso sea culpable. Y, por ello, insisten en referirse a AIAC como un “fondo buitre” que ha “expoliado” la empresa. En concreto, en esa denuncia hablan de salidas de capital de Koxka por valor de 10 millones de euros en beneficio, presuntamente, de personas vinculadas a AIAC. La plantilla insiste en que ha detectado, a través de la contabilidad de la compañía, supuestos falsos asesoramientos, transferencias sospechosas entre empresas, y pagos cuestionables con tarjetas a cuenta de Koxka, como hoteles de lujo, un tratamiento de fertilidad, centros de fisioterapia y un largo etcétera. Cabe recordar que, en esas mismas fechas, a la plantilla se le pidió una reducción de sueldo y, en un momento dado, se anunció que no se pagarían las nóminas, un momento de tensión que obligó a la Policía Foral a personarse en la fábrica para escoltar a los jefes durante su salida.
Por esta mala gestión, esta representación de la plantilla ha señalado a Anthony Zandos, Jordi Martínez y Mark Johnston. Y sus acusaciones contrastan con la reacción de estos últimos, que han denunciado al responsable de AIAC (en realidad, se cita a diversas de sus empresas), Leonard Maleson Levie, por despido improcedente. En concreto, este martes estaba prevista una vista, a las 11:10 horas, en el Juzgado de lo Social nº 8 de Barcelona para abordar el despido de Martínez, que había pedido que testificara el también mencionado Zandos pero, al no personarse este, ha habido que anular esa cita, según han confirmado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya. Por otro lado, la citación de Johnston está anunciada para el 21 de abril en la misma sala.
El concurso, a expensas de la Seguridad Social
Fuentes de la plantilla de Koxka se llevan las manos a la cabeza ante estas demandas, especialmente teniendo en cuenta que, mientras, proveedores y sindicatos piden un concurso culpable en Koxka por la mala gestión de precisamente estos mismos administraciones. El concurso, por cierto, sigue delante de forma paralela (hay dos ofertas pre-vinculantes que optan a hacerse con la compañía), un proceso que también depende, sobre todo, de la deuda acumulada con la Tesorería General de la Seguridad Social que, según ha apuntado la Administración Concursal, asciende ahora a 7 millones de euros. Qué parte de esa cifra se exija ahora a esas dos ofertas (en una participan mandos intermedios de Koxka y, en otra, parte de la plantilla) será clave para aclarar el futuro de la planta. La plantilla, por su parte, ya ha sido despedida.