Navarra afronta unas “caóticas” rebajas marcadas por la confusión en los cambios normativos

El caos de las rebajas ya no solo se refiere a la fiebre por hallar los mejores descuentos, sino también a si finalmente habrá este periodo especial de ofertas en los productos ofrecidos a lo largo de la última temporada o no. Navarra afronta a partir del 1 de julio unas rebajas de verano como las hasta ahora conocidas. El anuncio, habitual por estas fechas, es sin embargo noticia porque se trata del reflejo de una decisión judicial que permite a los comercios navarros regirse, por el momento, por la normativa navarra y no la estatal, que daba libertad para la apertura en festivos y para los periodos de descuentos.

Desde la Federación de Comercios de Navarra, que agrupa a unos 2.900 negocios a través de diversas asociaciones locales y sectoriales, lamentan que esta situación haya generado cierta confusión entre los comercios, puesto que algunos han llegado a ofertar esos descuentos anticipados y otros han esperado a las rebajas, y, en consecuencia, esa confusión ha afectado a los clientes, que realmente no saben a qué atenerse. “Es verdad que es una situación kafkiana, después de que en el último año haya habido tres modificaciones y el Real Decreto Ley que, en el apartado nacional, ha sido un caos. Porque este mismo debate que se ha dado en Navarra también se ha producido en otras comunidades (Cataluña, País Vasco o Andalucía). Y porque, al final, esos cambios no han servicio ni para aumentar la demanda ni el empleo”, apunta la gerente de la federación, Elisabeth Azcárate.

Esta representante se refiere a la medida, aprobada por el Gobierno de Rajoy en mayo de 2013, mediante la que se liberalizó el periodo de rebajas (se dejaba atrás el modelo tradicional, de dos periodos al año durante un máximo de dos meses) y se ampliaron los horarios comerciales, para permitir por ejemplo que se abriera en domingos y festivos. El objetivo, según defendió entonces el Ejecutivo, era que esta medida sirviera para impulsar el comercio tras la caída de las ventas por la crisis económica. Sin embargo, desde Navarra no vieron la medida con buenos ojos.

La comunidad, a través de la Ley Foral 15/2013, de 17 de abril, y con el apoyo de todos los grupos parlamentarios, fijó otro sistema. En concreto, se concretaron los periodos de rebajas y, además, se decidió que los comercios de más de 300 metros cuadrados o pertenecientes a cadenas pudieran abrir un máximo de ocho días en domingos y festivos al año. Desde Madrid se recurrieron estos artículos y el Tribunal Constitucional los admitió a trámite el pasado 15 de febrero, por lo que la Ley quedó en suspensión cautelar. Sin embargo, y aunque todavía no se ha resuelto el caso, el Constitucional decidió levantar esa suspensión. Por lo que la norma navarra, según anunció el Gobierno Foral el pasado día 13, volvió a entrar en juego. Y, por tanto, de ahí que este verano vuelva a haber rebajas.

¿Y por qué los comercios navarros prefieren este sistema? Azcárate explica que “las rebajas siempre han sido una forma de organización del comercio beneficiosa para todos. El consumidor, por ejemplo, cuenta con una legislación a este respecto”. Esta legislación es la que asegura que los productos ofertados han estado esa misma temporada a la venta. Y eso es lo que, según la gerente de la Federación, buscan los clientes navarros, que sobre todo concentran sus ventas durante las primeras semanas de estos descuentos, cuando buscan el género “de moda y de más calidad”.

Por el contrario, los periodos de descuentos, según lamenta Azcárate, “puede llevar a prácticas como la publicidad engañosa o a la competencia desleal en un sector tan heterogéneo”. En Navarra ya se han detectado tiendas que emplean este sistema de descuentos (no los fraudulentos, sino la medida en general), pero la Federación de Comercios lo atribuye a la “confusión” generada por los cambios normativos. Por ello, confían en que el Gobierno de Navarra pueda aclarar esta situación al sector.

Ropa de temporada, por menos dinero

Los consumidores, por su parte, tienen que tener claro que el 1 de julio arrancan las rebajas de verano. Se trata de un periodo atípico en Pamplona, puesto que está marcado por el cierre de muchos comercios por las fiestas de San Fermín, pero en el resto de Navarra (donde, cabe recordar, hay 130 localidades con oferta comercial) sí se notará que, básicamente, el comercio continúa con la forma tradicional de organizar estos descuentos. Es decir, artículos de temporada, que han estado expuestos, por menos dinero. Así de claro.

¿Servirán para salvar la temporada? Azcárate defiende que en la Comunidad Foral nunca ha sido así, sino que más bien este periodo sirve para unas ventas más residuales entre un público con un nivel de vida alto y que busca, ante todo, la calidad, pero sí que ahora “es lógico que si ha bajado el gasto medio familiar, se acuda más a estas fechas para realizar compras”. Así que habrá rebajas, mientras Navarra pueda.