Pamplona anuncia sanciones contra bares “por la oleada de racismo” contra la población gitana

N. Elia

“En #Iruñea hay bares que niegan el acceso a personas gitanas. Esto es inadmisible. No queremos racistas en nuestras calles y barrios. Estamos recogiendo información sobre este tema junto con las compañeras de @gazkalo. Ayúdanos a difundir”. El llamamiento en redes sociales de SOS Racismo Nafarroa en colaboración con la federación de asociaciones gitanas de Navarra Gaz Kalo el pasado 22 de enero ha tenido una primera y contundente respuesta institucional.

El Ayuntamiento de Pamplona se ha comprometido a luchar “contra la ola de discriminación y racismo que está padeciendo la población gitana en el acceso a locales de ocio y bares de la ciudad”. El Consistorio advierte de forma pública que sancionará a los “locales que impiden el acceso por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.

Un portavoz de Gaz Kalo aseguró hace unos días que habían comenzado a recibir quejas similares de asociados a quienes se había denegado la entrada a bares y locales de ocio por tener “pinta de gitanos”. Según esta asociación, “la identificación discriminatoria se hace bajo parámetros estereotipados y racistas” y se trata de una práctica “que viene dándose durante años, pero que en el último mes se había intensificado”.

Así que denunciaron lo ocurrido a través de las redes sociales y recopilaron más información de casos parecidos. Uno de los afectados interpuso además una denuncia en el juzgado de guardia de la Audiencia de Navarra. “Nos encontramos ante una situación discriminatoria que no sólo menoscaba la dignidad de las personas afectadas, sino que también fomenta y propaga el racismo y la xenofobia”, denuncian desde Gaz Kalo. “Queremos vivir en una ciudad libre de discriminación, libre de espacios de impunidad, en la que todas las personas tengamos garantizado el acceso a los derechos y servicios en igualdad de condiciones, y donde nuestra diversidad esté reconocida y puesta en valor”, reclaman.

Con estos argumentos se dirigieron al Ayuntamiento de Pamplona que, a propuesta de su presidencia y por unanimidad, ha aprobado una declaración institucional que recoge casi íntegramente las peticiones de la asociación gitana. Además del compromiso de actuación inmediata contra la “ola de discriminación y racismo”, el consistorio se aviene a revisar el decreto foral que regula las condiciones de acceso y permanencia y asistencia a las actividades de ocio o diversión celebradas en establecimientos y locales autorizados en la Comunidad foral. La revisión tendrá como objetivo “instaurar criterios de habilitación y funciones de personal de control”. Además, el Ayuntamiento adoptará “las medidas efectivas para reparar el daño causado a las personas afectadas” y establecerá “mecanismos verificables de control, necesarios para que no vuelva a suceder”. También se compromete el consistorio a “mantener una actitud vigilante ante situaciones de discriminación por origen”.