Miren, una mujer de 43 años que se quitó la vida el pasado sábado tras recibir una carta de su banco en la que le advertían de su complicada situación, no aguantó más. Después de que la crisis le sacudiese de diferentes maneras, la depresión pudo con ella. Pero para sus compañeros su final no es del todo 'voluntario'. “No es un suicidio, un asesinato, porque ha sido el sistema, las empresas, la crisis lo que le ha hecho tomar esa decisión”. Así analiza Mikel Otazu, compañero de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Ansoáin el suicidio de Miren, su compañera, que decidió quitarse la vida tras recibir una carta del banco en la que le negaban la aplicación del código de buenas prácticas. Según sus compañeros, la carta ha sido la gota final que ha hecho que la mujer “no aguantara más”, después de dos años en el paro.
Miren acudió a la Plataforma cuando se acercaba el momento de dejar de cobrar el subsidio de desempleo con el que sobrevivía porque pronto no podría pagar más su hipoteca. Comenzaron a negociar con el banco su situación, negociación que no había terminado, aunque no soportó la primera negativa para acogerse al código de buenas prácticas.
Desde la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Ansoáin invitan a los vecinos a acudir al funeral, que se celebrará esta tarde, y a la concentración que tendrá lugar mañana para mostrar su solidaridad a la familia. Además, han convocado una manifestación el sábado para denunciar el caso de Miren y cómo “la desesperación de la gente que no aguanta la situación está llevando a que muchas personas se quiten la vida”.
Declaración en el Parlamento
El caso ha llegado también al Parlamento, donde los miembros de la Mesa y Junta de Portavoces han aprobado una declaración en solidaridad con la familia y allegados de la fallecida. El texto, propuesto por Bildu, Aralar-NaBai e I-E, ha sido aprobado por unanimidad en sus dos primeros puntos. En primer lugar, el Parlamento muestra el apoyo a sus allegados y el deseo de que ninguna persona padezca esta situación. En el segundo punto, el Parlamento expresa “su convicción de que la muerte de Miren es consecuencia de un sistema económico injusto y de un marco legal que la ha abandonado a una situación de radical desamparo”.
El tercer y cuarto puntos han sido aprobados con el voto en contra del PPN y la abstención de UPN. En ellos, el legislativo considera “necesario y urgente” que el gobierno central retire el recurso ante el Constitucional contra la ley foral de medidas para garantizar el acceso a la vivienda y rechaza “rotundamente” la reforma laboral que “otorga mayores facilidades para el despido libre de las personas trabajadoras, como en el caso de Miren Peña”. “En este caso concreto, denuncia también la actitud de la empresa Faurecia para con sus trabajadores y trabajadoras”.