Los productores de energía solar ven por fin la luz: piden al Parlamento que regule ya su exención fiscal

La exención del impuesto del 7% para los pequeños productores y productoras de energía solar en Navarra es, al menos sobre el papel, un tema solucionado tras el acuerdo entre el Gobierno Foral y el estatal a cuenta del Convenio Económico. No obstante, los afectados y afectadas con representación en la asociación Anpier, que en la Comunidad Foral rondan los 5.600, están ahora “a la espera” de cómo se resuelve esta polémica en el Parlamento de Navarra, que en principio consistirá en sacar adelante un nuevo proyecto de ley, que compense a quienes abonen este impuesto vía IRPF e Impuesto de Sociedades. La clave está, para este colectivo, en que este paso pueda producirse antes de que se disuelva la actual Cámara, a finales de marzo, para, de una vez por todas, dar el tema por zanjado.

“Lo importante es que no vamos a tener que pagar, que era nuestro objetivo, el de quedar exentos de ese impuesto”, apunta el delegado en Navarra de la asociación Anpier, Juan Antonio Cabrero.

Esa es la meta del nuevo proyecto de ley que prevé el Gobierno Foral, como ya adelantó a través de un comunicado tras anunciar su acuerdo con el Gobierno central a cuenta del IVA de Volkswagen y el Convenio Económico. Uno de los puntos de ese entendimiento (cuestionado, por otro lado, por ciertos grupos de la oposición en el Parlamento Foral, que criticaron que todo había sido una representación de diferencias para después vender el acuerdo) es la resolución de otros contenciosos de materia fiscal, entre los que se encuentra el del impuesto sobre el valor de la producción de energía eléctrica.

En este caso, se trata de tramitar un nuevo proyecto de ley foral, similar al que se aprobó en 2012 y que provocó el recurso del Gobierno central, pero esta vez armonizado con las exigencias estatales. Esta, por así decirlo, vía intermedia, no incluye esta exención, sino que plantea una compensación a los productores y productoras después, vía deducción de IRPF e Impuesto de Sociedades. De esta forma, las personas afectadas pagarían el impuesto pero, después, mediante una modificación legislativa fiscal, podrían beneficiarse de lo que antes funcionaba mediante exención. Además, funcionará de forma retroactiva, para incluir el año 2013. Lo que falta por aclararse, según confirman fuentes del Gobierno Foral, es si será necesario que cada afectado tenga que acudir a Hacienda para cambiar su última declaración o si este trámite se completará de forma automática.

¿Y quienes ya han pagado?

Cabrero reconoce su satisfacción por que este tema por fin se resuelva, algo que muchos de los afectados y afectadas pusieron en duda cuando, en octubre de 2014, recibieron una carta en las que le pedía que abonaran el impuesto mencionado del 7% (la cantidad iba en función de la cantidad de energía producida, el mantenimiento y la inversión realizada) en 2013 y 2014. Incluso, les venía a decir que lo hicieran con rapidez (en noviembre) o podían afrontar un recargo del 20%. Este portavoz asegura que hubo quien decidió abonarlo, para evitar males mayores, y ahora no está claro qué pasará con esos importes. “Mandamos una circular recomendando que se esperase, pero había miedo”, apunta.

Para quienes sí aguardaron, como se prometía desde el Gobierno Foral y desde la Delegación del Gobierno en Navarra, a que hubiera una solución, esta es la ahora anunciada. Eso sí, Cabrero confía en que los trámites se solventen en el Parlamento ante de su disolución, para así dejar el tema cerrado y ajeno a cualquier cambio en la composición de los respectivos gobiernos tras las elecciones. El integrante de Anpier espera, además, que desde Bruselas se declare nulo el impuesto a esta producción, una vía paralela que, como apunta, también pondría punto final a más de dos años de “angustia y preocupación”.