Llegan las fiestas, se suceden las campañas a favor de la igualdad
La preocupación por las agresiones contra la libertad sexual aumenta durante las noches. La sensación de inseguridad de madrugada, más aún si es festiva, es una constante entre las mujeres jóvenes. Por ello, las instituciones vascas han puesto en marcha diversas iniciativas para detener el incremento de estas cifras del miedo y para aplacar a los posibles creadores de este: los agresores. Lo cotidiano a partir de ahora será observar autobuses haciendo paradas extraordinarias o a taxistas esperando a que el usuario, tras abonar el viaje, entre en el portal. Aplicaciones de móvil, voluntariado, mayor vigilancia, diversos protocolos municipales y por supuesto, autodefensa feminista. Todo esto, para lograr un verano libre para todas.
Los Sanfermines, con el recuerdo de Nagore Laffage en la memoria (10 años de su asesinato durante las fiestas) y con la controvertida liberación de ‘la Manada’ en la retina, han estado blindados: ‘puntos violeta’ de atención e información, un mayor número de efectivos policiales, un mayor número de voluntariado de apoyo, una campaña bajo el lema “Pamplona: libre de agresiones sexistas”, 200.000 pegatinas, 60.000 chapas y 600.000 servilletas con el “No es no” y multitud de protocolos para aplacar las agresiones en las fiestas. El final de las fiestas pamplonicas dejó seis denuncias por agresiones contra la libertad sexual, cuatro de los agresores fueron detenidos. El año pasado, fueron doce las denuncias.
Para paliar la convulsión que todo esto ha podido provocar –según se ha visto plasmado en las movilizaciones sociales–, desde los ayuntamientos de varias ciudades del Estado se han puesto en marcha multitud de iniciativas destinadas a la erradicación de las violaciones, agresiones, y en general, los peligros de la noche en períodos festivos. Otras medidas tienden a ser de carácter permanente, pero han nacido del reflejo de las fiestas locales del periodo veraniego.
Conductores velando por la seguridad ciudadana
Conductores velando por la seguridad ciudadanaBilbobus puso en marcha el primer domingo de julio una iniciativa que pretende reducir el acoso nocturno a través de un servicio mediante el cual el autobús se podrá detener en cualquier lugar del trayecto, sin tener por qué corresponder a las paradas hábiles durante el día. Esta medida permite que las mujeres dejen el transporte público lo más cerca de sus viviendas, acortando la posibilidad de sufrir una agresión en el trayecto. Inés Ibáñez de Maeztu, concejala adjunta del área de Movilidad y Sostenibilidad, ha señalado que “desde el 4 de julio, cuando se solicitó por primera vez, hasta el 22, última actualización, se ha solicitado 29 veces la parada intermedia”. Mismo proyecto se ha desarrollado en Donostia, sin embargo, en la capital guipuzcoana, a diferencia de Bilbao, solo entró en funcionamiento en una línea y se mantiene como ‘proyecto piloto’ en esa misma, la B8 Miraconcha-Seminario. Otra prueba más de que iniciativas así germinan en el seno de la proximidad de celebraciones es la puesta en escena de la ‘parada a demanda’ en la compañía de autobuses Tuvisa, en Vitoria, donde el servicio se prestará durante la festividad de La Blanca y podrá ser solicitado por mujeres menores de 18 años en la línea nocturna principal G-3. Fuera de Euskadi, la propuesta de las paradas a petición sigue en estudio en territorios como Gijón, Segovia o Sabadell. Ciudades como Vigo, Terrassa, o A Coruña también están llevando a cabo iniciativas similares, en el caso de la última, su funcionamiento cubre viernes, sábados, las vísperas de festivo y los festivos.
Es en la capital alavesa donde los taxistas han anunciado que, en un compromiso con el Ayuntamiento, esperarán a que el usuario haya entrado en el portal para abandonar el lugar. Esta medida, nueva de este verano, ya se viene poniendo en práctica desde hace años con colectivos vulnerables o clientes que lo solicitan. En Bilbao también se presentó el acuerdo hace unas semanas, aunque no haya entrado en vigor aún. Borja Musons, presidente de la Federación vasca del taxi y de Radio Taxi Bilbao lo ha explicado así: “La ordenanza aún está en exposición pública. Hicimos un llamamiento a principios de año para que los colectivos más vulnerables tuvieran oportunidad de solicitarlo. Se hizo de forma paralela una campaña interna para que los trabajadores hicieran la pregunta ‘¿Perdona, quiere que espere a que entre usted en casa?’. La respuesta de muchos taxistas fue que eso lo llevan haciendo años”. Musons ha explicado que “muchos taxistas, por iniciativa propia, ya lo hacían sin haberse plasmado en ningún papel” y que, como profesionales, la empatía con el usuario es fundamental “sobre todo, en lugares poco iluminados con ciertas personas que comprendemos más sensibles.” Como ha indicado, no es una medida exclusiva para mujeres, también se preocupan por invidentes, discapacitados o personas mayores. Aunque la medida se haya “puesto sobre la mesa” en Bilbao como ciudad pionera, Musons ha recalcado que está seguro de que en “Vitoria y Donostia la empatía de los profesionales es la misma y se lleva años practicando”.
Históricamente la profesión del conductor ha estado de alguna forma reservada a los hombres, y aunque la tendencia esté evolucionando, aún son un 8% las mujeres que conducen taxis en Bilbao. Son también aún una minoría en la conducción de autobuses, alrededor de 11% son conductoras según datos de Bilbobus, lo que deja un 89% de conductores hombres. Hombres como los que, durante las fiestas de Santurtzi (Bizkaia) han acompañado a sus casas a 388 personas. De tal cantidad de solicitudes de acompañamiento, diez fueron por parte de varones menores de edad, el resto mujeres de todo tipo de perfiles.
Iván López, concejal de Régimen Interior y Seguridad Ciudadana de Santurtzi ha señalado que “durante todo el año se celebran talleres de sensibilización y educación” pero que vieron necesario actuar “dando una vuelta de tuerca” a la situación. “Desde el departamento de Acción Social comunicaron a los diferentes grupos y asociaciones de mujeres que se iba a poner en práctica este sistema de acompañamiento. Tuvo buena acogida y lo incorporamos el primer fin de semana. A raíz de la gran demanda, lo mantuvimos los diez días festivos”, apunta.
Solicitaron los servicios de una empresa privada formada por hombres, profesionales de la seguridad. López también ha reseñado que está contento con los resultados, aunque ha reconocido que es un servicio que ojalá no tengan que volver a utilizar. “El acompañamiento no priva de la libertad, no lo consideramos así. Iban acompañados por personas de ‘paisano’, es decir, en ningún momento los acompañados eran señalados. Lo que prima es la seguridad. Si el servicio se ha demandado, por algo será”, ha concluido.
Desde el Ayuntamiento de Vitoria se ha instado a las cuadrillas de blusas y neskas a la supresión de cualquier cántico homófobo, sexista o machista durante el tradicional paseíllo. De hecho, de la convocatoria de subvenciones aprobada por la Junta de Gobierno Local, tras el reparto habitual de los fondos para las 26 cuadrillas, se otorgará una prima de 15.000 euros a aquellas cuadrillas que participen activamente en programas de igualdad e iniciativas para tumbar las cifras de violencia contra la libertad sexual. En el día de Santiago, muchas neskas acompañaron su uniforme con una chapa a favor de la igualdad.
A pesar de la ebullición de este tema ante el inminente período de fiestas, el movimiento feminista ha dejado claro que la lucha contra la violencia de género “es algo diario”. No obstante, ha desarrollado un protocolo específico que consideran necesario para La Blanca 2018, que comienzan oficialmente el 4 de agosto. Su programa queda dividido en concienciar y socializar el problema, en cómo actuar ante una agresión sexista desde una perspectiva feminista y, por último, en la idea de empoderamiento y autodefensa feminista, pues como han afirmado, “todas somos sujetos activos”. También han denunciado la pasividad del Ayuntamiento. Han informado de “la falta de interés sobre su protocolo” y ha exigido “menos palabras y más recursos”. “No acabaremos con las agresiones sexistas con el color morado y lavados de cara”, han pronosticado.
En Donostia la campaña anti-acoso se adelantó a su Semana Grande con el objetivo de llegar concienciados a las fiestas como tal. Desde el Ayuntamiento han reconocido que es un proyecto dedicado a todo el año y a cualquier momento, pero que “durante las Euskal Jaiak y las regatas” se “reforzarían los servicios”. Bajo el lema “No es no” y “Si no hay sí, es no”, apostillamiento nuevo que incide en la educación social del consentimiento sexual explícito, han serigrafiado miles de pañuelos que repartirán por tiendas de las calles de la capital e incluso en la estación de autobuses de la capital durante el inicio de la festividad.
Bilbao cerrará el periodo lúdico del verano con su Semana Grande de 8 noches y 9 días. Es la última capital vasca, la que cierra la puerta al verano y la que, en gran medida, apagará la bombilla de las iniciativas temporales para la igualdad. Para esta Aste Nagusia se ha desarrollado una aplicación que, con tal sólo pulsar un botón alerta a la Policía Municipal, sin la necesidad de realizar una llamada, pues según ha señalado, ese tiempo podría ser determinante. La aplicación, llamada “Agre Stop/Era Stop”, tiene un carácter gratuito y diversas funcionalidades: puedes avisar de estar siendo testigo de una agresión, de estar siendo agredida y una opción para comunicar que necesitas acompañamiento virtual familiar hasta casa. Esta última opción otorga la posibilidad de elegir a un contacto de la agenda para compartir el trayecto que ha de seguir la solicitante y hacer un seguimiento mediante un mapa. Aunque desde el Ayuntamiento de Bilbao han creado esta iniciativa para mujeres durante Aste Nagusia, Policía Municipal y Ayuntamiento no descartan que su uso se extienda a toda la población en un futuro.
Todos estos protocolos, proyectos e iniciativas eventuales están fuertemente arraigados a la creciente conciencia feminista. El pasado 8 de marzo de este 2018, Día Internacional de la Mujer, salieron a las calles millones de españolas a expresar desde cualquier formato, que, sin ellas, el mundo se para. Y lo demostraron. La jornada, según la prensa internacional, fue histórica. 'The New York Times' escogió para su portada una fotografía de la concentración que se desarrolló esa misma mañana frente al edificio del ayuntamiento bilbaíno.
Y entonces, ¿después de las fiestas qué?
“Está claro que durante las fiestas hay una mayor preocupación y se debe trabajar también en estos periodos, pero las iniciativas temporales son simplemente complementarias. Los protocolos municipales en el ámbito festivo son una pequeña parte de toda la cuestión. Son propuestas accesorias al trabajo continuado, con el objetivo de la solución a corto plazo. La educación, por ejemplo, podrá incidir a largo plazo en el cambio del sistema de valores”, ha advertido Izaskun Landaida, directora del Instituto Vasco de la Mujer (Emakunde). Landaida también ha propuesto una reflexión sobre el sistema imperante en las sociedades, “trabajar el empoderamiento de las mujeres y cuestionar los modelos de masculinidad desde edades tempranas, esta es una de las claves para atajar el machismo”, un machismo, que según ha afirmado con rotundidad es “multidimensional y estructural, afecta a todos los ámbitos”, por lo tanto, si la igualdad fuera una característica ya asumida “también serían igualitarias las festividades”. Es decir, desde Emakunde se pretende lanzar un mensaje de “trabajo constante” en cualquier aspecto, sin olvidar el día a día. “Pero más que en las formas con las que se lucha, lo vergonzante es que en S. XXI exista una demanda de estas iniciativas por parte de las mujeres jóvenes. Sería interesante que los hombres cuestionasen su propia masculinidad y se convirtiesen en agentes de cambio. Todo esto deja en evidencia al sistema actual”, ha manifestado Landaida.
Desde Emakunde se lanzó una campaña destinada a todos los ayuntamientos de Euskadi, con la motivación de interpelar a todos los organismos. La iniciativa, con la denominación y lema ‘Beldur barik’, que cuenta con el apoyo de Eudel (la asociación municipal mayoritaria de Euskadi), está cargada de contenido pedagógico e información, y está destinada principalmente a los jóvenes. Se ofrecen números de atención y ayuda, una guía para romper con los tópicos, con los prejuicios y con los micromachismos. Es una campaña destinada, en la praxis, a la prevención del acoso y las agresiones sexistas en los periodos que preceden a las fiestas.
El peso de la 'tradición' en tres fiestas vascas
El peso de la 'tradición' en tres fiestas vascasDesde que el pueblo de Hondarribia se levantó contra la tropas francesas se celebra cada año un alarde. Un desfile militar que constituye un acto de fe pero también de celebración para todo hondarribitarra. Pero en estos primeros compases del siglo XXI también ha supuesto tensión, controversia e incertidumbre. Debido a que la procesión estaba vetada a la participación de las mujeres se abrió una brecha social. Con la creación de una compañía mixta, 'Jaizkibel', el debate sigue candente. Entre la falta de apoyo institucional y atuendos de color negro desfila 'Jaizkibel'. El pueblo ha quedado dividido: los que aplauden y los que piden la vuelta de la tradición mediante el silencio y carteles de “Betiko alardea” (El alarde de siempre, en euskera), es decir, reivindicando un alarde donde perviva la distinción sexista. 'Jaizkibel' contó el pasado septiembre con el apoyo de Emakunde, EH-Bildu, Podemos e Izquierda Unida, así como de una parte de la población que acudió allí a respaldar a la compañía.
El alarde de Irún, de forma paralela, lleva celebrándose estos últimos tiempos acompañado por la polémica. En 1998 se celebró por primera vez un alarde integrador donde participaron un grupo reducido de mujeres. La compañía tuvo que ser escoltada por las fuerzas policiales ante abucheos, insultos, empujones y golpes a sus participantes. Hoy son 1.500 mujeres y hombres los que desfilan en grupo mixto por la conmemoración de la victoria de la milicia foral sobre el ejército francés en 1522. Aunque en material de paridad la tradición evoluciona, las instituciones siguen sin brindar el apoyo pleno a las compañías mixtas. De hecho, el alcalde irundarra José Antonio Santano, como lleva haciendo varios años, únicamente recibe en el ayuntamiento a los 'altos mandos' de los grupos tradicionales que no han incorporado a mujeres en sus compañías.
Una tradición de más de 400 años en una cofradía de Llodio (Álava) también ha sido partícipe de una evolución hacia una futura igualdad. La entrada de mujeres en la Cofradía de San Roque estaba vetada desde 1599 hasta que, en 2010 por fin pudieron participar en el almuerzo tradicional. Ese año, únicamente entraron a formar parte 14, ahora superan la veintena. Es una cifra considerable puesto que, hasta el pasado año, los requisitos para solicitar la entrada eran estrictos: ser descendiente directo de uno de los cofrades de San Roque. Se espera que en las próximas jornadas, la paridad sea un hecho cada vez más cercano.