“Nadie ha reconocido que haya filtrado un examen en Osakidetza”
El consejero de Salud, Jon Darpón, ha superado este jueves su particular Alpe d'Huez en una sesión extraordinaria -y que ha suscitado gran expectación- de la comisión de Sanidad del Parlamento Vasco. Arropado por un veintena de cargos del Gobierno vasco, Darpón ha tenido que dar explicaciones durante casi siete horas por las anómalas curvas estadísticas -tantas como las del mítico puerto del Tour de Francia- que arrojan los resultados de los exámenes de las especialidades médicas de la gran OPE de Osakidetza y que aventuran que sólo un factor externo ha podido hacer que en varias de ellas se repita el patrón de exámenes casi perfectos coincidentes con el número de plazas ofertadas y que se concentran en determinados hospitales frente a un pelotón de aspirantes, muchos con años de experiencia en esas disciplinas, que han logrado notas inusualmente bajas, cuando no directamente un 0. Pese a la vehemencia en la promesa de investigar hasta el final si se han producido filtraciones y a la evidencia de que “la OPE no ha sido normal”, las explicaciones y las medidas expuestas por Darpón no han satisfecho a los opositores, fuesen políticos o fuesen aspirantes a una plaza en la convocatoria pública.
Darpón sostiene que en Osakidetza las plazas de los hospitales no se reparten “como en la lotería nacional de Navidad” y que “se demostrará” -“¡dennos un poco de tiempo!”- que “en la mayoría de tribunales no ha habido ningún problema”. También ha apostillado que “no ha conseguido que nadie hasta la fecha reconozca que o bien ha filtrado un examen o bien que ha recibido una filtración” y eso que en Osakidetza no hay ningún motivo para tener miedo a denunciar irregularidades, a su juicio. “Yo no he pasado miedo jamás”, ha indicado Darpón, que ha sido directivo en la Sanidad vasca en diferentes puestos a lo largo de su trayectoria.
Así las cosas, la única “tentativa” de manipular la OPE que ha logrado constatar la investigación interna del Servicio Vasco de Salud afecta de lleno a las personas que dieron el paso, pese a su temor a “represalias”, de denunciar las irregularidades. Se trata de tres especialistas de Anestesia, Manoel Martínez, Roberto Sánchez y Marta Macho, que desde marzo -dos meses antes de los exámenes- acudieron a distintas instancias para advertir de que se producirían filtraciones, como en convocatorias anteriores. Al recibir un portazo de la Fiscalía y del Ararteko, una de sus iniciativas fue que Macho pidiera “apadrinamiento” para lograr la plaza con el ánimo de lograr pruebas.
La propia Macho adelantó estos hechos en una entrevista con este periódico: “Mira, como todo el mundo nos pedía una prueba real de que esto estaba ocurriendo, bajo consejo sindical decidí ir a pedir las preguntas del examen a mi hospital de referencia, al centro en el que me formé. Fui allí y pedí apadrinamiento directamente, que es lo que se suele hacer. ‘Hola, vengo a pedirte apadrinamiento porque estando donde estoy ni siquiera me voy a acercar a una plaza. Tranquilo, que no pienso perjudicar para nada la lista de gente que tienes para darle las preguntas. Yo me quiero quedar en el comarcal y nada más’. Esto fue bastante antes incluso de que se conformara el tribunal, pero esta persona iba a formar parte de él. Su respuesta fue ‘Es que yo todavía no sé si voy a formar parte del tribunal. Pásate si eso a final de mes’. No conseguí las preguntas, como es obvio [Risas] Así que sí, hay pruebas”.
“No puede quedar sin consecuencias”
Ha sido el portavoz del PNV en la comisión de Salud, Kerman Orbegozo, el que ha preguntado a Darpón y a su equipo por esta entrevista. La directora general de Osakidetza, María Jesús Múgica, ha tomado la palabra para explicar que en la investigación interna abierta por las denuncias de irregularidades en la categoría de Anestesia se constató que “varios opositores” solicitaron “bien las preguntas o bien ayuda” a miembros del tribunal evaluador. Ha añadido que por supuesto “no fueron atendidas” y que no hubo “irregularidad alguna” ni filtración. Por ello, ha añadido que los denunciantes de este caso cometieron una “tentativa de actuación fraudulenta”. Ha añadido que “ese expediente con tentativa de actuación fraudulenta ha sido puesto en manos de la Fiscalía”.
El consejero ha tratado de matizar que Osakidetza ha enviado al ministerio fiscal -que ha abierto una investigación penal por las presuntas filtraciones- no sólo esta “tentativa” de los denunciantes, sino la documentación completa de las cuatro categorías que inicialmente se paralizaron, Cardiología, Angiología y Cirugía Plástica además de Anestesia. Ha dicho igualmente que no se “persigue” a nadie. Sin embargo, el mensaje ejemplarizante ha llegado de nuevo por parte de Orbegozo, que ha asegurado que le produce “desasosiego” que profesionales de Osakidetza “vayan donde un compañero a tenderle una trampa” y que Macho pueda en un futuro ocupar un “puesto directivo” en la Sanidad vasca. “No podemos permitir que esto no tenga ninguna consecuencia”, ha dicho el representante del PNV.
La parlamentaria del PP Laura Garrido ha preguntado en voz alta cómo es posible que se haya decidido repetir los exámenes de Anestesia, Cardiología y Angiología sin que haya pruebas de las filtraciones. La respuesta es que “los resultados no son estadísticamente normales”. El Gobierno se ha apoyado en un experto de la Universidad de Oviedo, José Muñiz, que ha acompañado a Darpón y Múgica en la comisión. También en otras denuncias internas. En el caso de Cardiología (22 plazas y 22 exámenes prácticos perfectos), un miembro del tribunal ya advirtió de la existencia de filtraciones de antemano y, 'a posteriori', dos vocales firmaron un voto particular al acta de las notas con los mismos argumentos. Uno de ellos, Ángel Loma Osorio, confirmó las irregularidades en una entrevista con este periódico. Igualmente, en Angiología otro vocal lanzó la misma advertencia.
Sin muchos más detalles y apelando a “denuncias” o a “informaciones públicas”, Darpón y Múgica han comunicado que se abre también una investigación en Urología, Intensivos, Traumatología y Digestivo. Los sindicatos de Osakidetza elevan a una veintena las categorías con estadísticas anormales e indicios de filtración. Este periódico, por ejemplo, ha publicado el caso de Neurocirugía.
Preguntas sin respuesta a Podemos y PP
Siete horas de comparecencia han dado para mucho, incluso para que Darpón hiciera gala de su oratoria y “mal carácter”, según él mismo ha bromeado. Sin embargo, la oposición ha salido quejosa de que ni el consejero ni sus colaboradores hayan dado cumplida respuesta a algunas preguntas.
Cristina Macazaga (Elkarrekin Podemos) no ha logrado aclarar las sombras detrás de la OPE de Cirugía Plástica, que incluye una renuncia de una opositora que hizo el examen y la modificación (hasta tres veces) de la lista de admitidos en la prueba colgada en la 'web' oficial del proceso. Macazaga, que ha hablado de “sistema corrupto” y de “prácticas mafiosas”, tampoco ha logrado que el consejero aclarara el coste del examen estadístico encargado a la Universidad de Oviedo, que no entra a determinar los factores de las anomalías en las curvas de resultados. La representante de la coalición de Podemos, IU y Equo, muy beligerante, ha lamentado por “insólito” que la gran medida anunciada por Darpón haya sido llevar a la Fiscalía a los denunciantes.
Desde las filas del PP, Laura Garrido no ha conseguido que se expusiera la relación entre quienes han elaborado los exámenes y las personas aprobadas, es decir, si comparten centro hospitalario. “Esto es un ejercicio de escapismo. Son necesarias más explicaciones”, se ha enfadado la portavoz 'popular', que ha asegurado que era evidente que la investigación interna no iba a probar las filtraciones porque “nadie lo va a reconocer en una simple conversación”.
La tercera portavoz de la oposición, Rebeka Ubera (EH Bildu), se ha referido a la “impunidad” que se vive en Osakidetza y ha repetido en varias ocasiones que esta crisis hace caer “el mito del PNV como buen gestor”. Se ha preguntado también si hay “condiciones” y “garantías” para que la OPE se repita en las categorías señaladas “con los mismos tribunales” que han gestionado el primer examen.
Finalmente, el PSE-EE ha mantenido un perfil bajo como socio de Gobierno del PNV. “Este grupo no llega con una sentencia, con conclusiones fáciles a las que sólo se llega leyendo los medios de comunicación. En política no vale todo. Es peligroso que aquí parezca que todo se ha hecho mal y se lleve haciendo mal desde hace 30 años”, ha dicho Natalia Rojo. En la primera OPE de Osakidetza, gestionada por los socialistas, se detectaron irregularidades.
Parte de los exámenes del IVAP los hizo Osakidetza
Una de las novedades en la OPE celebrada este año por Osakidetza fue el encargo al IVAP (Instituto Vasco de Administración Pública) de las pruebas teóricas de las especialidades médicas, con un valor del 65% frente al 35% de los ejercicios prácticos, elaborados por los tribunales del propio Servicio Vasco de Salud. Con Darpón y su equipo han comparecido también Maite Iruretagoyena y Fulgencio Aledo, directora y secretario general del IVAP, respectivamente. Ellos han explicado el papel del organismo en las oposiciones.
Iruretagoyena ha indicado que se persiguió en todo momento garantizar la “trazabilidad” y la “confidencialidad” de la confección de las preguntas, lo que incluía una cláusula de confidencialidad e incluso “salas de seguridad” y vigilantes privados de las cajas “precintadas”, que no se pusieron a disposición de los tribunales hasta dos horas antes de la celebración del examen. No obstante, el IVAP no dispone de expertos en medicina, por lo que en muchos casos -que no se han concretado- se solicitó a la propia Osakidetza que propusiera a esos especialistas.
Se habilitó una plataforma informática para volcar esos documentos, pero no todos ellos la emplearon y hubo exámenes que llegaron por 'email' o en memorias USB. A preguntas de la oposición, los responsables del IVAP aseguran haber controlado el material mientras estuvo en su poder pero que no existe la misma “trazabilidad” en la fase anterior, aunque de nuevo no hay pruebas fehacientes de filtraciones.