Neurocirugía: las mejores notas para los colegas del autor del examen
Una de las novedades de la última OPE de Osakidetza, en busca de mayores garantías para el proceso, fue la decisión de externalizar la confección de parte de los ejercicios. Así las cosas, se encomendó al Instituto Vasco de Administración Pública (IVAP) que se encargara de la elaboración de las pruebas teóricas de las especialidades médicas, que además tendrían un valor del 65% frente al 35% de la práctica, en manos del propio tribunal compuesto por cargos del Servicio Vasco de Salud. Sin embargo, la falta de especialistas en el IVAP hizo que se pidiera recomendación a la propia Osakidetza y que, en el 80% de los casos, los autores de la parte teórica fuesen también médicos. En el caso de Neurocirugía, según ha podido saber eldiarionorte.es, el autor del examen teórico fue el jefe de servicio del que procedían los aspirantes con las mejores notas y la media de resultados frente a la de otros centros fue mucho más elevada.
La pasada semana este periódico recogió la denuncia de un grupo de opositores de Neurocirugía. Con los resultados de la prueba teórica en la mano, indicaron que se han podido producir filtraciones similares a las de otras categorías como Anestesia, Cardiología y Angiología, en las que el Servicio Vasco de Salud ya ha tomado la decisión de repetir los exámenes aunque formalmente sólo admite problemas de “modelo” de las preguntas y de “corrección”. De hecho, el consejero de Salud, Jon Darpón, insistió el jueves en el Parlamento en que no hay pruebas fehacientes de que se hayan producido esas filtraciones.
Una de las diferencias en esta categoría es que las denuncias de irregularidades recaen fundamentalmente en el primer ejercicio, el que estaba en manos del IVAP y no de Osakidetza. En este caso, ese primer examen lo preparó el doctor José Antonio Elexpuru, desde 2015 jefe de servicio en el hospital de Basurto.
La directora de este organismo ajeno al Departamento de Salud, Maite Iruretagoyena, detalló en el Parlamento que existe todo un protocolo para garantizar la “trazabilidad” de los exámenes, que no se entregan al tribunal hasta apenas dos horas antes de la celebración de la prueba. Iruretagoyena aludió a salas de seguridad cerradas con lleva, contraseñas informáticas e incluso a vigilantes privados para custodiar las cajas precintadas con los ejercicios. Sin embargo, a preguntas de la oposición, indicó que ese control se realiza una vez recibido el examen confeccionado por los asesores, no durante su fase de elaboración. Señaló que se habilitó una plataforma informática para que éstos entregaran las preguntas. Sin embargo, varios de ellos ni hicieron uso de ella y enviaron el material bien por 'email' o bien físicamente en una memoria USB.
En Neurocirugía se ofertaban 4 plazas y aspiraban a ellas 23 personas. En los resultados se aprecia un grupo de cinco personas con notas muy altas y el resto con notas notablemente inferiores. “Entre el quinto y el sexto candidato hay 25 puntos”, explicaron los trabajadores de Osakidetza afectados. Es una diferencia “suficiente” y decisiva para que “no sirva de nada” el resto de méritos puntuables, como la experiencia, la formación o el euskara. Se da la circunstancia de que “todos los candidatos del hospital de Basurto se encuentran en este grupo” de cabeza, tres personas colegas del autor del examen. Es más, “no hay ningún candidato de este hospital que haya sacado menos de 90 puntos” sobre 100.
El Sindicato Médico de Euskadi, en sus informes estadísticos sobre todas las pruebas de la OPE, concluyó también que hay “indicios marcados de filtración en el examen 1” de Neurocirugía. En otro análisis, el sindicato LAB llega a la misma conclusión. La media de los presuntos beneficiarios de este fraude es de 91,6 puntos y el resto acredita 47,5. Como en el resto de la OPE, la prueba tuvo una dificultad elevada.
El propio informe psicométrico elaborado por la Universidad de Oviedo a instancias del Departamento de Salud alude a estas anomalías. “La distribución de las puntuaciones de los opositores en la prueba teórica no se ajusta a una distribución normal [...]. Llama la atención que ningún aspirante haya obtenido puntuaciones entre 65 y 90”, indica el trabajo coordinado por el catedrático José Muñiz, que destaca también la variabilidad de notas entre los aspirantes de Basurto y el resto, un patrón que, por cierto, se detecta también en la prueba práctica. No obstante, Muñiz matiza que el escaso número de aspirantes impide extraer conclusiones más contundentes y, como destacó en el Parlamento, el informe sólo arroja indicios de que factores externos han podido influir en la estadística pero no pruebas fehacientes de las filtraciones.
Según los denunciantes, “la probabilidad de que estos resultados sean debidos al azar (a la variabilidad entre los candidatos) es menor de un 0,01%. Es decir, la probabilidad de que haya algún factor de 'interferencia' es mayor del 99,99%”. Estos opositores aspiran a que Osakidetza actúe en Neurocirugía y se puedan repetir los exámenes, como ocurrirá en Anestesia, Cardiología y Angiología. Sin embargo, se han abierto cuatro nuevas investigaciones y ninguna corresponde a esta categoría, ya que afectan a Traumatología, Digestivo, Intensivos y Urología.
