Osakidetza promete más personal en los ambulatorios ante la convocatoria de tres huelgas
Con tres huelgas anunciadas y en el marco de movilizaciones en toda España, el consejero de Salud, Jon Darpón, ha presentado este miércoles una batería de 35 medidas “para reforzar la atención primara en Euskadi”. La más importante es el refuerzo de personal (40 médicos y 46 enfermeros) para paliar el colapso en aquellos centros de salud con mayor ratio de pacientes potenciales por profesional y porcentaje superior del 15% de mayores de 75 años. La mitad de las plazas nuevas en los ambulatorios deberían estar cubiertas antes del verano y la operación tendría un coste de 4,6 millones.
Las previsiones no juegan a favor de Osakidetza. Euskadi es una de las poblaciones más envejecidas y la demanda de atención sanitaria crece con la edad. Por otro lado, hay prevista una cascada de jubilaciones en el Servicio Vasco de Salud que obligarán a actuar. Los cálculos oficiales es que “con las plazas de MIR” habrá “cierto desequilibro” en los dos o tres próximos años, por lo que se incentivará el retraso de la edad de retiro de los 65 a los 68 años. En picos de mayor demanda o de más ausencias por bajas o vacaciones esas tensiones de plantilla se harán más evidentes y Osakidetza impulsará que voluntariamente algunos profesionales puedan ampliar la jornada (1,2 millones pagados en horas extraordinarias).
El Gobierno vasco espera que “en cuatro años se puedan sacar más profesionales que los que se jubilan”, aunque habrá que “hacer atractivo” el trabajo en atención primaria para que los MIR no opten por otros destinos. Sea como fuere, ya está articulada una bolsa de médicos jóvenes con “contrato flexible” que ahora dura un año y que están disponibles para bajas en varios centros de salud. En 2018 226 jóvenes fueron contratados con esta fórmula y en 2019 se prevén otros 77 contratos, a los que se promete dar más seguridad que la de doce meses.
En el caso específico de Pediatría, Osakidetza entiende que no hay una “situación deficitaria” de especialistas, sino una “inadecuada distribución” que “es necesario corregir”. El reto es que esos facultativos “dirijan su carrera” a la atención primaria y que “con carácter general” todas las plazas de Pediatría las ocupen pediatras sin perjuicio de que alguna zona geográfica concreta sean médicos de familia los que asuman esas tareas.
Otras de las quejas recurrentes de los profesionales es el escaso margen de tiempo para cada paciente, 28-29 adultos diarios y 20-21 niños. “Atención sin tiempo al paciente, atención de riesgo”, ha sido el lema de algunas movilizaciones. La media es de entre 9 y 10 minutos. En palabras del viceconsejero Iñaki Berraondo, “es un tiempo adecuado”, pero ha apuntado que el plan de mejora de la atención primaria permitirá desahogar las agendas. Y no sólo por el prometido incremento de efectivos, sino también por la intención de “desburocratizar la labor del personal médico y de enfermería” para que se centren en los pacientes. La emisión de certificados médicos o la gestión de ambulancias son dos de las tareas que serán derivadas al personal administrativo.
En cuanto a las huelgas, el consejero Darpón ha enfatizado que no han sido convocadas legalmente todavía y ha destacado que las fechas elegidas (15 de marzo, 12 de abril y 17 de mayo) coinciden con algunos puentes festivos. “Ninguna huelga en un servicio básico nos agrada”, ha zanjado el titular de Salud, que, bromeando, ha pedido más atención para este plan y menos para los informes de la Fiscalía sobre la OPE.
