Urkullu protege a su consejero Darpón frente a las peticiones de dimisión y la investigación de la Fiscalía
Si la crisis abierta en el Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) como consecuencia de las filtraciones de exámenes en las oposiciones de las especialidades médicas del pasado año fuese una partida de ajedrez, el 'rey' Jon Darpón ya habría perdido a su reina, la directora general de Osakidetza, María Jesús Múgica, a algunos alfiles como Juan Carlos Soto, responsable de Recursos Humanos, y hasta peones, tales como el relevo en el equipo de Comunicación. Todos ellos han ido saliendo de sus puestos estos meses aunque la versión oficial es que no había “elementos objetivos” que confirmase la manipulación de la OPE.
Ahora, tras conocerse que la Fiscalía aprecia un delito de revelación de secretos al ver indicios de filtraciones en hasta 11 categorías y que apunta a la responsabilidad de varios miembros del equipo del consejero de Salud, el Gobierno vasco ha optado por jugar un enroque. A pesar de las peticiones reiteradas de la oposición y de los sindicatos de Osakidetza, el lehendakari, Iñigo Urkullu, continúa protegiendo al rey y en la inminente reforma de su gabinete, si no hay sorpresas, sólo saldrá el titular de Turismo, el socialista Alfredo Retortillo, candidato en Barakaldo.
Preguntado por un posible relevo en el Departamento de Salud, el portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka, ha asegurado que “no tiene sentido”. “Todo lo contrario, habría que intentar que continuara en ese trabajo. Ha acreditado su voluntad de llegar hasta el fondo”, ha remarcado el portavoz sobre su colega. Darpón romperá su silencio tras el paso dado por el ministerio fiscal este miércoles en Vitoria en una rueda de prensa convocada a mediodía en la sede central de Osakidetza. Horas antes, hablará en los micrófonos de Radio Euskadi.
Darpón también ha recibido un capote desde el PSE-EE. Su secretaria general, Idoia Mendia, ha dicho que lo principal es que las OPE sean transparentes y ha defendido que Darpón ha dado todas las explicaciones, ha hecho su trabajo y ha pedido responsabilidades, informa Efe.
Reprobación y comisión de investigación
Entretanto, en el marco también de la precampaña de cara a las sucesivas citas electorales, los partidos de la oposición han elevado el tono. Elkarrekin Podemos y EH Bildu han anunciado ya iniciativas en el Parlamento Vasco para depurar responsabilidades por el fraude de la OPE. La portavoz 'morada' Cristina Macazaga, que ha hablado de “prácticas corruptas asentadas” en la Sanidad vasca, ha anunciado que elevará a la Cámara una propuesta para reprobar a Darpón. Y la abertzale Rebeka Ubera ha vuelto a registrar una iniciativa para crear una comisión de investigación parlamentaria como la que tuvo lugar hace dos décadas en torno al 'pucherazo' en la primera gran OPE del Servicio Vasco de Salud.
Ambas parlamentarias han interpelado directamente al PP. Juntos, los tres partidos suman 38 escaños por 37 de las formaciones que sustentan al Gobierno de Urkullu, PNV y PSE-EE. Hace unos meses, los 'populares' optaron finalmente por no secundar la apertura de una comisión de investigación y dar un voto de confianza a Darpón tras el cese de la directora de Osakidetza, María Jesús Múgica.
El líder del PP vasco, Alfonso Alonso, ya ha dejado claro que habiendo una investigación judicial en marcha no ve necesaria una comisión parlamentaria -en el pasado los 'populares' defendieron lo contrario en asuntos como el 'caso Margüello' o el 'caso De Miguel'-, pero sí ha deslizado que Urkullu debería dejar caer la ficha de Darpón. Alonso, a pesar de las reiteradas preguntas de los periodistas, no ha llegado a verbalizar una petición nítida de cese o destitución, pero sus palabras sobre el “fin de un ciclo” o sobre la “agonía” que ha de acabarse tenían un claro mensaje latente. “Urkullu debe decidir si quiere seguir quemándose en este asunto y que Osakidetza siga bajo sospecha o si quiere terminar con esto”, ha zanjado Alonso, que fue ministro de Sanidad.
Los principales responsables no son cargos políticos
Al margen de la defensa de Darpón, las explicaciones del Gobierno en torno a la investigación de la Fiscalía son muy limitadas. Erkoreka ha repetido que el Ejecutivo no ha tenido una notificación “oficial” por parte de Carmen Adán y que sólo conoce el alcance de sus conclusiones por las informaciones aparecidas en los medios de comunicaciones. En todo caso, el portavoz ha reconocido que “sería grave” que los tribunales confirmasen la denuncia de la Fiscalía.
El consejero-portavoz ha querido rebajar el alcance del caso porque, según ha subrayado, la Fiscalía sólo es capaz de señalar a tres personas como presuntos responsables directos de las filtraciones -los jefes de servicio de Anestesia, Angiología y Digestivo- y ninguno de ellos es “responsable político” o “pertenece a la organización directiva” de Osakidetza. El ministerio fiscal alude también a la responsabilidad de Soto como director de Recursos Humanos y de otros dos altos cargos, su 'número dos', Xabier Balerdi, y el responsable de Asistencia Sanitaria, Andoni Arcelay. Ellos facilitaron al Instituto Vasco de Administración Pública (IVAP) la lista de personas que elaboraron los exámenes en las distintas categorías.
Una de las claves es que Salud presentó esta OPE como la de mayores garantías porque iba a ser un órgano externo como es el IVAP el encargado de hacer parte de las pruebas. Sin embargo, al no tener expertos médicos realmente esa labor recayó de nuevo en Osakidetza y, singularmente, en las personas elegidas por su dirección. La fiscal apunta a que el juez deberá determinar si Soto, Balerdi y Arcelay fueron meros testigos o tuvieron implicación directa en las filtraciones, también por su gestión posterior de las investigaciones a raíz de las denuncias.
Precisamente Erkoreka, como consejero de Gobernanza y Administración Pública, es el responsable político del IVAP. A preguntas de los periodistas ha reconocido que “no se puede garantizar al 100%” que se hayan cumplido los “compromisos de confidencialidad” exigibles en una oposición, aunque ha limitado a “tres personas” de “más de 1.200” que integraban los tribunales esas irregularidades.
Osakidetza “como un batzoki”
Entretanto, Elkarrekin Podemos ha puesto de manifiesto que en uno de los casos en que la Fiscalía da por probadas las filtraciones y apunta con nombre y apellidos al responsable de ellas, la especialidad médica de Digestivo, el proceso de la oposición continúa con normalidad y que se están adjudicando las plazas de un proceso trucado. “La Fiscalía ve claramente delito”, ha alertado Macazaga.
Se da la circunstancia de que este martes estaba convocada la mesa sectorial de Osakidetza, el foro que aglutina a la Administración con los sindicatos. El segundo punto del orden del día era precisamente la nueva OPE ya anunciada. LAB, según ha explicado en un comunicado, se ha levantado de la mesa al entender que se buscaba dar una “imagen de normalidad” pasando por alto las conclusiones de la Fiscalía. “Como si no ocurriera nada”, lamenta LAB, que sostiene que Osakidetza “no es un cortijo de nadie ni puede ser un batzoki”.
ESK, como LAB, fue una de las centrales que acudió a la Fiscalía a denunciar las irregularidades de la OPE. Los tres anestesistas que dieron el paso de destapar estas irregularidades, Roberto Sánchez, Marta Macho y Manoel Martínez, son afiliados de este pequeño sindicato, que reclama “el fin de este sistema corrupto y clientelar”. ESK ha pospuesto al jueves una rueda de prensa hasta conocer las primeras valoraciones de Darpón, mientras LAB mantiene su convocatoria para este miércoles.