El debate europeo no está ocupando un espacio relevante en las elecciones alemanas, centradas sobre todo en los asuntos domésticos. Gran error, pues lo cierto es que la evolución de la economía alemana se ve influida por lo que acontezca en el espacio comunitario, del mismo modo que el presente y el futuro de la Unión Europea (UE) y de la zona euro dependen en buena medida de las políticas que cristalicen en este país. En las líneas que siguen, presento algunas ideas que podrían articular un debate que apunte en la dirección de una economía alemana y una Europa para las mayorías sociales.