¡Europa se mueve!

Natalia Munevar Sastre

Plataforma Auditoria de la Deuda - PACD —

Son tiempos difíciles para Europa. Los movimientos sociales plantan cara a las políticas de austeridad que castigan el bolsillo de las mayorías. La lucha renace entre la adversidad y el sufrimiento de las clases trabajadoras y la ilusión vuelve a través de iniciativas como DiEM25 (Democracy in Europa Movement 2025) y el Plan B que, en el caso de España, impulsa una convergencia de fuerzas políticas y sociales que puedan enfrentar a las políticas de austeridad económica y reclamar una democracia verdadera.

Desde hace unos cinco años, en países como Grecia y España, la sociedad civil tomó las plazas y las calles para manifestar su indignación. Nuevas generaciones imprimieron a la movilización social un sello cultural y ético esperanzador que viene abriendo el camino de una izquierda sin complejos y resuelta a derrotar al sucio contubernio de políticos y empresarios que sólo sirven a los intereses de las multinacionales y de los capitales especulativos.

Este proceso generacional de la izquierda se erige a los dos lados del Atlántico: Latinoamérica y Europa. Es una experiencia que se alimenta de manera recíproca y en la que se hace culto a la audacia y la perseverancia. Aunque los contextos sociopolíticos son diferentes el enemigo es común y es menester enfrentarlo mediante una estrategia común. Los pueblos de Latinoamérica y Europa se necesitan. El neoliberalismo vuelve a asomar la cara en la Argentina que resistió el “corralito” y combatió a los “fondos buitres”. En Venezuela, los aliados del intervencionismo norteamericano han adelantado una feroz campaña de sabotaje económico contra el gobierno popular y pretenden desterrar la imagen de Simón Bolivar “El Libertador” que ha inspirado la lucha por la soberanía continental.

América Latina solo representa el 3% de la economía mundial, pero sin embargo la revolución campesina, indígena, estudiantil, obrera e insurgente ha inspirado a muchos de los movimientos que emergen en Europa. Los latinoamericanos depositamos muchas esperanzas en la lucha de doble vía. El neoliberalismo depredador desgarra por igual las carnes de los pueblos de Europa y Latinoamérica.

En este orden, convocamos a una movilización transnacional que tenga como valores morales tres ejes:

  • Transparencia
  • Restauración de la democracia
  • Asamblea Constituyente

La transparencia tiene que ver con el derecho de la ciudadanía a ser testigo de la manera como se toman las decisiones políticas que afectan la vida cotidiana de los pueblos. Se trata de poner fin a los procesos políticos opacos instaurados desde las instituciones europeas y que impiden que la gente común y corriente ejerza un control democrático sobre el dinero, las finanzas, las condiciones de trabajo y el medio ambiente.

Al hilo de la transparencia vamos en un proceso de recuperar la democracia. Hoy en día nuestros derechos se ven recortados en beneficio de los poderes económicos, lo cual se evidencia en las políticas impuestas por la Unión Europea. Son directivas basadas en la austeridad, la privatización de los bienes comunes, la destrucción de los derechos sociales y laborales. Son políticas que, en lugar de enfrentar a las causas iniciales de la crisis, consiguen agravarla. En este contexto la recuperación de la democracia pasa por la recuperación de las instituciones que trabajen para el bienestar de la sociedad. Gobiernos de la gente y para la gente. Promover espacios de participación ciudadana y garantizar los derechos de organización social, manifestación y movilización.

La Asamblea Constituyente será el paso definitivo. Sería el espacio ideal mediante el cual los pueblos de Europa tendrían el derecho y el deber de considerar su futuro. Este será el paso definitivo para quitarle a los fríos e insensatos tecnócratas el control de nuestros Estados.

El primer paso es dar vida a una plataforma o iniciativa que genere un espacio de trabajo colectivo en el que se pueda construir y dar forma a la propuesta. Así nace el Plan B. En Berlín, el pasado 9 de febrero Yanis Varoufakis hizo el lanzamiento de DiEM25 y dio lectura a un manifiesto que aborda el tema de la crisis económica y promulga la convocatoria de una Asamblea Constituyente transparente que tome decisiones en el transcurso de los siguientes diez años.

Por otro lado, en Madrid los días 19, 20 y 21 se presentará el Plan B un espacio de construcción de propuestas para la democratización de Europa y la recuperación de la soberanía de los pueblos contra las políticas de austeridad. Este evento tocará siete ejes de trabajo: Deuda, Moneda, Comercio, Arquitectura Europea, Derechos Laborales, Migración, Ecología y Feminismo. Cada tema se debatirá a través de dos o tres talleres y un plenario. Un centenar de expositores provenientes del activismo social y político presentarán sus ideas con relación a los siete ejes.

Hoy vemos como el mundo entero recupera la capacidad de asombro y de interés frente a lo que sucede en Europa y podemos decir: ¡Europa se mueve!