Gracias al programador gallego Juan Elosua y a la Fundación Ciudadana Civio, se ha creado una aplicación en la web España en llamas que permite conocer los datos necesarios sobre los incendios forestales de 100 hectáreas o más ocurridos en España entre 2001 y 2010. En 170.822 incendios, se quemaron 1.137.566 hectáreas, una superficie similar a la de toda la Comunidad de Murcia. La aplicación es interactiva: el usuario puede examinar los datos en función de los criterios que elija.
Los autores del trabajo han seleccionado ocho historias con las claves de cada periodo. De todos esos años, el 2005 fue el peor. Casi un 20% del suelo calcinado entre 2005 y 2010 era parte de un espacio natural protegido. Los datos económicos sobre pérdidas y el gasto en extinción son incompletos, pero se puede calcular que el daño económico directo como mínimo fue de alrededor de 1.000 millones de euros. Los grandes incendios forestales, de 500 hectáreas o más, son una ínfima minoría, el 0,2% del total, pero son los culpables de la mayor devastación: afectaron a un 40% de la superficie quemada. more
La información procede de la base de datos nacional de incendios forestales del Ministerio de Agricultura. Cada año el Gobierno central recibe de las comunidades autónomas estos datos que salen de los informes realizados por las brigadas de extinción. Juan Elosua los solicitó al Ministerio. Hasta ahora sólo estaban disponibles en informes en PDF en la web del Ministerio.
El proyecto permite comprender la importancia de la transparencia en la comunicación de las bases de datos en poder de la Administración, así como de las posibilidades de ofrecer esta información de forma interactiva.
En paralelo a la puesta en marcha de esta iniciativa, Civio ha lanzado una iniciativa de 'crowdfounding' (financiación colectiva) con la que soportar los gastos de la ampliación de esta investigación.
“Queremos llegar donde muchos medios de comunicación no lo hacen e indagar en el porqué de tantos incendios forestales”, dice la directora de Civio, Mar Cabra. “Investigar temas como quiénes son los culpables y qué ocurre con ellos o cómo afectan los recortes al gasto en prevención y extinción”. La campaña aspira a recaudar un mínimo de 4.650 euros.