Hace unos meses se hizo viral el vídeo de un chico tirando al suelo a una chica de una patada, sin motivo, sólo por diversión, que el propio amigo que lo grabó subió a la red para que más gente pudiera disfrutar de la hilarante ocurrencia. No era la primera vez que lo hacía, supimos luego, era un hobby que llevaba años practicando, siempre con chicas.
Ayer, un vídeo parecido se viralizó de nuevo, éste de EEUU: un chico le lanza un balón a una chica que va en bici, haciéndole caer y frenar de cabeza contra la carretera. Lo subió a Facebook uno de esos perfiles nada sintomáticos que tienen millones de seguidores y que se ríen de cosas así, además de hacer chistes de otras agresiones y de violaciones. Obtuvo sólo en dos días 8 millones de reproducciones.
Lo que sucede en el vídeo es lo siguiente: un chico juega con un balón frente a la cámara de un amigo, por detrás pasan dos chicas en bici, él las ve y le dedica un saludo “Hey, ladies”. Muchos critican que la chica le devolvió el saludo con un poco amable “Fuck you”, justificando por eso que él la agrediera. Muchos de los comentarios en las redes sociales, de hecho, aseguran que “la puta lo merecía” o que “así aprenderá a tener la boca cerrada”, sin darse cuenta siquiera de que el chico ya está lanzando la pelota antes de que ella abra la boca. Se entiende bastante bien el “jódete” de la chica si éste es el trato que suele recibir del chaval.
Pero aunque no se conocieran de nada, aunque fuera la primera vez que se veían y él obtuviera esa respuesta descortés por parte de la desconocida, ¿está justificado el balonazo? Muchos lo creen así, porque al parecer al saludo de un extraño, una mujer debe contestar como él desee, y si le parece invasivo que la salude un extraño, lo máximo a lo que puede llegar (si no quiere ser agredida) es callarse la boca.
Muchos de los usuarios comentaban, por su parte, que el chico tiene un problema. Este chico, en particular. No que sea un problema cultural que hace que haya perfiles como el que comparte entre risas el vídeo, no un problema social que hace que millones de personas le siguen, nada por lo que preocuparse aunque haya cientos de miles de personas que la culpan a ella y otros tantos que, simplemente, se ríen. No, es un problema del chico en particular y no hace falta darle bola.
También hubo quien analizó la situación de otra manera, aunque desgraciadamente fueron los menos. Un usuario decía en los comentarios del vídeo: “Estáis enfermos, por cosas como ésta las chicas nos tienen miedo”. Y otro: “Si le damos a cámara rápida, primero vemos a un chico lanzando un balón y luego a un joven disparando a chicas en el campus”.
Muchas chicas defienden a la agredida también, pero hay muchas más que se ríen y comparten el vídeo, sin tener consciencia de lo que ese gesto supone para ellas mismas. Porque muchas mujeres también están alienadas por el patriarcado, no sólo los hombres, por supuesto. Por eso no es un problema puntual, por eso no es algo a lo que podamos seguir haciendo oídos sordos, no es algo aislado, es la forma natural de relacionarse que tienen hombres y mujeres desde pequeños. ¿Cuántas veces hemos oído las chicas desde pequeñas: “Si te tira del pelo es porque le gustas”? ¿Cuántas veces hemos visto cómo se normalizan las agresiones de todo tipo hacia nosotras con argumentos como la pasión, los celos y el amor verdadero?
Al parecer es pronto para ver la relación entre la educación patriarcal que se no da a unos y a otras desde pequeños con el hecho de que los hombres matan a 70 mujeres por año sólo en España. Es pronto para que la clase política se ponga manos a la obra con campañas y programas de concienciación, con formación al profesorado, con control sobre los medios de comunicación y la publicidad que fomenta que esto siga pasando.
Es pronto porque aún quedamos un montón de mujeres, ni que nos estuviéramos extinguiendo.