La grave crisis sanitaria, social y económica que ha comenzado en 2020 puede provocar un cambio drástico en las actitudes y creencias de los ciudadanos. Ante este hecho, echar la vista atrás para comprobar cómo han evolucionado las creencias y los valores sociales en España en los últimos 40 años puede ofrecer indicaciones sobre los cambios culturales que se avecinan. Respecto a la evolución pasada del conjunto de creencias y valores, cualquier observador de la vida social en España habrá notado un notable cambio entre el periodo de la transición democrática y la actualidad.
A la vista de la mayor presencia de ciudadanos de otros países, menor atención pública prestada a eventos religiosos y mayor libertad con la que actúan y se expresan grupos históricamente discriminados, existe una percepción generalizada de que los valores sociales han evolucionado sustancialmente. Si bien persisten indudables tensiones y conflictos culturales, los medios de comunicación y conversaciones informales sugieren que nuestra sociedad es en la actualidad más cosmopolita, secularizada, tolerante y comprometida con la igualdad de oportunidades que durante la Transición.
Esta percepción de hecho coincide grosso modo con las conclusiones de décadas de estudios científicos sobre el cambio de valores en democracias occidentales incluida la española. Según estas investigaciones, los valores de la mayoría de la población – entendidos como creencias sobre los objetivos y comportamientos deseables en sociedad – están modernizándose. Estos estudios (aquí y aquí) apuntan a que dicha modernización ocurre como un proceso homogéneo y consistente en el cual la población confiere paulatinamente menos importancia a la acumulación de bienes e ingresos y la protección de tradiciones, a la vez que confiere cada vez más importancia a la felicidad individual, la expresión de opiniones personales, la búsqueda de la belleza y la verdad y la empatía con el sufrimiento ajeno.
Una transformación cultural de tal magnitud sólo es posible, a juicio de los científicos sociales, por el aumento gradual de la seguridad económica alcanzada en las últimas décadas, refuerzos en la capacidad crítica asociados con la expansión educativa y por las cada vez más frecuentes interacciones con desconocidos que exponen a la población a otras formas de vida. Como queda patente en un informe reciente, la evolución de las actitudes y creencias de los españoles desde que pueden documentarse con datos de encuesta resulta consistente con la teoría de la modernización cultural. En comparación con los españoles de los años ochenta, los actuales residentes en nuestro país son más tolerantes con la homosexualidad, menos xenófobos (al menos en sus declaraciones públicas) y más igualitarios entre otros aspectos.
Sin cuestionar que la sociedad española está observando una clara modernización cultural, este artículo quiere recalcar un aspecto menos conocido: la velocidad del cambio cultural varía sustancialmente entre valores sociales o dimensiones culturales. Concretamente, el cambio en cuatro valores sociales clave – el apoyo a la igualdad, la elección individual, la independencia/autonomía personal y la autoexpresión – no ha evolucionado de modo homogéneo. Para mostrar este hecho, a continuación presento la evolución de la posición media de los españoles respecto a cuatro actitudes que reflejan su compromiso personal con cada uno de estos cuatro valores. Las cuatro variables han sido elegidas porque son habitualmente utilizadas en estudios sobre cambio cultural y porque ofrecen las series temporales más largas disponibles relativas a España. La última encuesta en la que se incluyeron estas preguntas es de 2017.
El apoyo a la igualdad de género – reflejado en la oposición a la discriminación laboral de las mujeres – ya era generalizado en los primeros noventa, pero desde entonces ha crecido de modo más o menos lineal. El compromiso con la libertad de elección – reflejado en la tolerancia hacia la homosexualidad – muestra una transformación aún más impresionante. Desde unos niveles de homofobia declarada muy elevados, con datos de los últimos años la mayoría de los españoles declara su tolerancia y aceptación de la homosexualidad. Por tanto, el peso cultural de los valores de igualdad y elección individual ha crecido sustancialmente en España en los últimos 40 años.
Con respecto a la importancia dada a la independencia personal y a la autoexpresión también se aprecia un claro cambio cultural. No obstante, dicha transformación ha sido claramente menos intensa. El apoyo a la independencia individual reflejado en la percepción de si es importante inculcar la independencia/autonomía en los niños era muy bajo a comienzos de los años ochenta. Entonces sólo uno de cada cuatro encuestados apoyaba dicha posición. Desde entonces, el apoyo a la independencia personal ha aumentado, pero aún en 2017 algo menos de la mitad de los españoles consideraba que éste era un valor importante para inculcar en los niños. Algo similar ocurre con el apoyo a la autoexpresión. Si bien el nivel inicial de apoyo a esta forma de expresión era muy bajo y aumentó durante los años ochenta, en las dos siguientes décadas incluso cayó y sólo ha remontado moderadamente en la última década. En 2017 cinco de cada diez encuestados creían que era más importante aumentar la influencia de la población y proteger la libertad de expresión, que preservar el orden social y luchar contra la inflación.
En resumen, contamos con evidencia sólida del carácter heterogéneo o asimétrico del cambio cultural ocurrido en nuestro país desde comienzos de los años ochenta. En la actualidad los españoles confieren más importancia a la igualdad de oportunidades, la libertad de elección, la independencia personal y la autoexpresión que hace cuatro décadas. Sin embargo, dicho cambio no ha ocurrido al mismo ritmo para estos cuatro valores. El compromiso con la igualdad de oportunidades y la libertad de elección han ganado mucha más importancia que el compromiso con la independencia personal y la autoexpresión. Los científicos sociales tienen ahora un reto importante a la hora de explicar la heterogeneidad de este cambio cultural y los posibles cambios que se avecinan.
5