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¿Una increíble historia de amor?

La primera vuelta de las elecciones francesas ha dejado dos nombres sobre la mesa: Macron y Le Pen. Y un tercero, el de Brigitte Trogneux, la esposa del candidato de En Marcha, que compite con Le Pen en la segunda vuelta de las elecciones galas. ¿Por qué su nombre ha ocupado decenas de titulares y minutos de televisión? Por su edad, porque es algunos años mayor que su marido y porque además fue su profesora de francés. La Vanguardia tituló: “Brigitte Trogneux, la 'cougar' que intriga a Francia”. “Cougar”, que significa “puma” en inglés, se usa para referirse de forma peyorativa a mujeres que “buscan” o “quieren cazar” a un hombre más joven. En definitiva, a mujeres de mediana edad con una vida sexual... ¿Cómo decirlo? Con una vida sexual y punto. Si, digo esto porque realmente a la sociedad le sorprende que una mujer de determinada edad pueda sentir deseo sexual, acostarse con hombres más jóvenes o pueda, simplemente, enamorarse, enamorar o atraer. Este no ha sido el único titular que le han dedicado:

Brigitte Trogneux, la atípica aspirante a primera dama de la que todo el mundo habla

Brigitte Trogneux, la atípica aspirante a primera dama de la que todo el mundo habla Así es Brigitte Trogneux, la mujer de Macron 24 años mayor que él

Así es Brigitte Trogneux, la mujer de Macron 24 años mayor que élLa mujer de Macron: su profesora de francés 20 años mayor

Brigitte Trogneux, la maestra que enamoró a Emmanuel Macron

Incluso un titular rezaba: “La increíble historia de amor”. ¿Increíble? ¿En serio? ¿Por qué? Porque vivimos en una sociedad que lo penaliza, lo castiga y no se lo cree. Algo así simplemente no puede ser de verdad en el imaginario colectivo.

Tal ha sido el revuelo que ha llegado a ser ridiculizada en redes sociales caminando con ayuda de un andador en el palacio del Eliseo. Y es que no solo escuece el hecho de que ella le saque dos décadas sino que él es, según los medios, “un hombre atractivo” y además puede llegar a ser presidente. El mundo esperaba otra cosa de un hombre como él...

Brigitte, ¿a quién se le ocurre romper con los estereotipos? ¿Cómo se te ocurre enamorarte de alguien más joven y tan guapo? Algo, que por cierto, estamos cansadas de ver a la inversa en política, cine y en todas las esferas de la sociedad sin que genere tanto alboroto. Si tecleamos el nombre de Brigitte veremos que todas las entradas hacen referencia a la diferencia de edad y a lo “asombroso” de su historia de amor. Sin embargo, a nadie le parece sorprendente que ellos estén con mujeres más jóvenes, salvo excepciones escandalosas, y no se les dedica titulares. Sencillamente, se considera que es lógico que una mujer joven se enamore de hombres “con experiencia”, un eufemismo muy utilizado.

Un ejemplo reciente: Donald Trump (1946) y su mujer, Melania Trump (1970). A nadie le ha parecido sorprendente esa historia de amor; se ha hablado del estilismo de Melania, eso sí. Habría que preguntarse porqué.

Silvio Berlusconi tiene 79 y su pareja, Francesca Pascale tiene 31. Y no hace falta viajar para encontrar ejemplos: Mariano Rajoy tiene 62 (aparenta más porque el poder envejece muchísimo) y su mujer Elvira Fernández tiene solo 52. Diez añitos de nada que a la inversa le habrían traído a Elvira unos cuantos titulares.

Cuando ellas son las mayores en la relación hay un esquema de poder que se tambalea y el mundo reacciona en busca de respuestas y lleno de sospechas. Algo falla en una sociedad que entiende como valores supremos de las mujeres la juventud y la belleza: si estos dos pilares no están, nadie lo entiende. Ellos pueden resultar deseables sea cual sea su edad: por su inteligencia, sentido del humor, poder, clase, sabiduría, experiencia... Pero ellas, según los esquemas tradicionales y misóginos, no.

Bimba Bosé era 17 años mayor que su pareja Charlie Centa, que estuvo a su lado hasta el final. Otras mujeres como Jennifer López, Alaska, Kylie Minogue o Madonna han tenido y tienen largas y bonitas relaciones con hombres mucho más jóvenes que ellas. Casi todas han sido analizadas por salir con “jovencitos” y más de una ha recibido el apelativo de “cougar”.

Dice Madonna: “La mayoría de los hombres de mi edad están casados y tienen hijos. No pueden ser novios. Yo soy una persona muy aventurera con una vida loca. Tengo cuatro hijos. Tienes que ser de mente muy abierta y aventurero para entrar en mi mundo. Las personas mayores que tienen sus costumbres más arraigadas probablemente no sean tan aventureros como alguien más joven”.

La directora Deborra-Lee Furness (61), mujer del actor Hugh Jackman (48), también ha sido objetivo de los medios, que una y otra vez se sorprenden de que esta pareja siga unida. Además, Furness ha sido ridiculizada en redes sociales de manera cruel por estar con el deseado “Lobezno”.

Según el Instituto Nacional de Estadística, en 2010 los matrimonios en los que la mujer era entre 6 y 10 años mayor que el marido fueron solo el 3,4%.

Mercado y patriarcado tratan de atraparnos y encerrarnos en unos modelos de mujer concretos y también en unos modelos de relación determinados. La realidad es que una mujer de 55 o 60 años puede transmitir erotismo y sensualidad con su forma de hablar, con su mirada y también con su cuerpo. Sin embargo, en muchas películas, por ejemplo, vemos a hombres de 50 años emparejados con mujeres de 30 sin sorpresa general pero no a la inversa porque para el cine y para la sociedad una cualidad fundamental para que una mujer sea atractiva es que sea joven.

Siguiendo con el séptimo arte: el celuloide muestra que hay algo “maligno” en aquellas mujeres que se han “atrevido” a sentirse atractivas pasados los 50 o a vivir aventuras con chicos más jóvenes. El Graduado es un buen ejemplo de ello y el “pobre” y joven Dustin Hoffman acaba “cayendo en las redes” de la perversa “mujer mayor”.

De vuelta a la vida real: que si ella podría ser su madre, que si esa pareja no tiene futuro, que si él podría estar con mujeres más jóvenes y ella con alguien de su edad… Aún estamos en esas y el trasfondo de todo esto es un férreo sistema de creencias sobre el papel que cada género debe desempeñar en una pareja.

La primera vuelta de las elecciones francesas ha dejado dos nombres sobre la mesa: Macron y Le Pen. Y un tercero, el de Brigitte Trogneux, la esposa del candidato de En Marcha, que compite con Le Pen en la segunda vuelta de las elecciones galas. ¿Por qué su nombre ha ocupado decenas de titulares y minutos de televisión? Por su edad, porque es algunos años mayor que su marido y porque además fue su profesora de francés. La Vanguardia tituló: “Brigitte Trogneux, la 'cougar' que intriga a Francia”. “Cougar”, que significa “puma” en inglés, se usa para referirse de forma peyorativa a mujeres que “buscan” o “quieren cazar” a un hombre más joven. En definitiva, a mujeres de mediana edad con una vida sexual... ¿Cómo decirlo? Con una vida sexual y punto. Si, digo esto porque realmente a la sociedad le sorprende que una mujer de determinada edad pueda sentir deseo sexual, acostarse con hombres más jóvenes o pueda, simplemente, enamorarse, enamorar o atraer. Este no ha sido el único titular que le han dedicado: