Un total de 3.848 personas han sido desalojadas la pasada noche de diversos espacios de Barcelona por la celebración de botellones ilegales y sin respetar las medias para la prevención de la COVID-19.
Los Mossos y la Guardia Urbana han desarrollado de nuevo esta noche un dispositivo conjunto en la ciudad para impedir la concentración festiva de ciudadanos, lo que les ha llevado a actuar sobre todo en las playas de la ciudad y en el entorno del Arco del Triunfo.
Las concentraciones multitudinarias las noches de festivos en la capital catalana se reproducen cada fin de semana, especialmente desde que decayó el toque de queda, aunque el pasado el puente de la Segunda Pascua las cifras de participantes bajaron debido a que muchas personas salieron de Barcelona para disfrutar de las fiestas en otros puntos de Catalunya, según los datos que maneja el departamento de lnterior.