Arturo Fernández pierde la concesión de la cafetería del Congreso
El presidente de la patronal madrileña, Arturo Fernández, ha perdido la concesión de la cafetería del Congreso, un servicio que gestionaba desde 1996 y por el que fue acusado de pagar en dinero negro a sus trabajadores. El Congreso ha zanjado este miércoles el concurso y ha adjudicado el contrato a la empresa Eurest.
La Cámara Baja se vio forzada a no renovar el contrato a Arturo Fernández a raíz del escándalo de las irregularidades en los pagos a los trabajadores que prestaban el servicio en la cafetería a través del Grupo Cantoblanco. Entonces inició el el proceso para renovar la adjudicación. El jefe de los empresarios madrileños se presentó a la competición Grupo Cantoblanco Restauración.
Las empresa de Fernández obtuvo la mejor valoración desde el punto de vista económico por ser la “más ventajosa” y se situó entre las favoritas con la valoración de los criterios técnicos. El pasado mes de julio la mesa de contratación del Congreso valoró los servicios que ofrecían cada una y colocó por delante de las seis a Eurest, con cerca de 45 puntos, seguida muy de cerca por el Grupo Cantoblanco, que obtuvo casi 41 puntos. A mucha mayor distancia quedaron el resto de las ofertas, entre ellas Mediterránea de Catering, que no llegó a los 34 puntos, mientras Cafestore obtenía 35; Central Catering, cerca de 31; y Alcesa, 27 puntos.
La media de las valoraciones económica y técnica ha dado la victoria a Eurest, de origen británico y con amplia implantación internacional. Así, Arturo Fernandez pierde una adjudicación que ha gestionado durante casi 20 años.