Fernández Díaz jubila al comisario responsable de las maniobras contra Podemos con una medalla y una paga
El comisario que el Partido Popular escogió para dirigir la Policía en su regreso al poder hace cuatro años, Eugenio Pino, se jubila el próximo 23 de junio. Pero antes será condecorado con la Medalla de Plata al Mérito, una de las más altas distinciones policiales, que conlleva una asignación vitalicia del 15% del sueldo que cobra a día de hoy como director adjunto operativo, 4.500 euros en una estimación conservadora.
La orden por la que se condecora a Pino va firmada por el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz. Del comisario Pino, desde cuya Dirección Adjunta Operativa (DAO) se ha investigado a la oposición política, ya fueran los independentistas catalanes o Podemos, Fernández Díaz asegura que “ha sobresalido en el cumplimiento de los deberes de su cargo” y que su actuación “ha redundado en el prestigio de la Corporación”.
Con esta afirmación, el ministro se asegura de que Pino cumpla con un requisito para su condecoración, concretamente el recogido en la letra c del artículo quinto de la Ley de 1964 que sigue regulando la concesión de medallas en la Policía: “Dirigir o realizar algún servicio de trascendental importancia que redunde en prestigio de la Corporación, poniendo de manifiesto excepcionales cualidades de patriotismo, lealtad y abnegación”. El anterior DAO, Miguel Ángel Fernández Chico, fue condecorado con la misma distinción, ya con Fernández Díaz como ministro del Interior.
La orden del ministro Fernández Díaz lleva fecha del pasado 2 de junio. Ese día se celebró una comida de despedida al director adjunto operativo en un restaurante de la capital. A la misma asistieron, entre otros, el ministro; el secretario de Estado, Francisco Martínez; los miembros de la Junta de Gobierno; y algunos policías que, aun sin representar el mando de unidad alguna, han tenido un destacado papel bajo las órdenes de Pino, caso el comisario José Manuel Villarejo Pérez.
De la Dirección Adjunta Operativa que dirige Pino han salido informes “de inteligencia” sobre presunta corrupción de políticos catalanes, favorables a la independencia, publicados coincidiendo con momentos álgidos del proceso. Eldiario.es publicó en marzo de 2015 que la DAO albergaba una unidad dedicada a investigarlos en secreto, sin control judicial. También con la marca de la DAO surgió el denominado informe PISA que intentó atribuir a Podemos financiación ilegal procedente de Irán en las fechas de la negociación de gobierno, posteriores a las elecciones del 20 de diciembre.
El peso del comisario Pino en las estrategias del Ministerio del Interior para influir en la actualidad política está quedando de manifiesto en los últimos días de su carrera policial. El ministro Fernández Díaz le ofreció alargar su vida laboral unos meses como su asesor en Interior. Sin embargo, fuentes del departamento aseguran que eso no se va a producir en ningún caso, y no porque el policía haya renunciado a ello.
La salida de Pino ha tenido una segunda derivada polémica, el nombramiento de un sucesor. En el seno del Cuerpo se esperaba una solución de circunstancias hasta la formación de un nuevo Gobierno. Sin embargo, el ministro en funciones ha decidido convocar la plaza, un formalismo ya que se trata de un puesto de libre designación. El director adjunto operativo que elija el ministro deberá ser confirmado o destituido por el próximo Gobierno, sea del Partido Popular o de otra formación.
El de Pino no es el primer reconocimiento discrecional de Fernández Díaz como ministro en funciones. El director del periódico de La Razón, Francisco Marhuenda, fue nombrado comisario honorario de la Policía Nacional por decisión suya el pasado mes de abril. Esta decisión creó un profundo malestar en el seno del Cuerpo, incluida su escala ejecutiva. El Sindicato Unificado de Policía está pendiente de la decisión que adopte el Tribunal Supremo respecto a la querella por prevaricación que presentó contra Fernández Díaz por el nombramiento honorífico de Marhuenda.
Militarización de la Policía
El comisario Pino es el responsable de la militarización exterior de la Policía. Bajo su mandato, Interior ha gastado más de 3 millones de euros en cambiar las insignias del uniforme para asemejarlas a las de las Fuerzas Armadas. También se ha introducido el bastón de mando al pasar revista y el cántico religioso La muerte no es el final en homenaje a los caídos.
El Ministerio del Interior asegura que en esta legislatura la delincuencia ha descendido más del 10 por ciento, situándose precisamente en niveles de 2004, el último año de los gobiernos de José María Aznar. La Policía, cuya dirección operativa ha encabezado Pino, es responsable de la seguridad en las ciudades de más de 30.000 habitantes, a excepción de las de Cataluña y Euskadi.
La Policía, bajo el mandato de Pino, ha organizado grandes despliegues coincidiendo con las manifestaciones con motivo de la crisis. Al final de las marchas de la dignidad se produjeron graves incidentes e Interior decidió condecorar a los responsables del operativo. Con Pino al frente, Interior está especialmente satisfecho de cómo transcurrió la celebración de la coronación de Felipe VI.
[En una primera versión de esta información se apuntaba por error que el Gobierno socialista había condecorado al anterior DAO con la Medalla de Plata al Mérito cuando la distinción se produjo con el actual Ejecutivo].
