Partido Popular y PSOE, principales beneficiados de una repetición electoral que no cambiaría el peso de los bloques
El Partido Popular y el PSOE serían los principales beneficiarios en caso de repetición de elecciones. Es la principal conclusión del barómetro de junio elaborado por Celeste-tel para eldiario.es. Según este sondeo, la formación que lidera Pablo Casado recuperaría una decena de diputados, a costa de Ciudadanos y Vox. El PSOE también subiría ligeramente de acuerdo con el pronóstico realizado por Celeste-Tel. Lo haría a costa de Unidas Podemos. En cualquier caso, el peso de los bloques se mantendría prácticamente idéntico, sin mayorías claras ni posibilidad de pactos que garanticen la configuración de un Gobierno.
El Partido Socialista repite, según la encuesta, como formación más votada: obtendría ahora el 30,6% de los votos y 128 escaños, cinco más de los que consiguió el 28 de abril. Las dificultades para alcanzar un gobierno de izquierdas persisten pero unos nuevos comicios beneficiarían al PSOE más que a Unidas Podemos, que perdería cuatro escaños.
El Partido Popular es la formación con más posibilidades de rentabilizar una virtual repetición de elecciones. Según el sondeo, en caso de nuevos comicios, el PP consolidaría su posición al frente de la oposición en el Parlamento: obtendría el 19,4% de los votos y 76 escaños, frente a los 66 que consiguió en abril. La formación de Casado sube 2,6 puntos con respecto a su medición en las elecciones de abril: es el partido que mayor rentabilidad obtendría de una repetición de elecciones.
Celeste-Tel mantiene a Ciudadanos como tercera fuerza en el Congreso, pero cada vez más lejos del PP. El grupo liderado por Albert Rivera perdería 1,4 puntos en apoyo electoral y cuatro de los 57 escaños que tiene en la actualidad.
La encuesta sitúa a Unidas Podemos en cuarta posición y también sufriría una ligera caída. La formación liderada por Pablo Iglesias y Alberto Garzón perdería cuatro escaños. La encuesta augura una caída de 1,2 puntos, con respecto a sus últimos resultados.
Vox también ofrece síntomas de desaceleración. Los datos de Celeste-Tel señalan que los apoyos electorales de Santiago Abascal caerían 1,6 puntos, la mayor pérdida porcentual, y su presencia en el Congreso pasaría de los 24 escaños actuales a 20.
Desaparecen votantes de Ciudadanos y Vox
Ciudadanos y Vox serían quienes peor afrontarían una nueva convocatoria electoral y el reto de mantener en sus filas a los votantes que les acompañaron en las elecciones de abril. Según Celeste-Tel, solo el 76,6% de los apoyos que Rivera obtuvo en abril se mantendrían fieles a las siglas en otros hipotéticos comicios. Un 12,6% de sus electores de las pasadas elecciones generales harían el camino de vuelta al Partido Popular.
Solo Vox registra peores datos de fidelización entre su electorado que Ciudadanos: el 73,9% de los votantes de la formación de extrema derecha repetirían papeleta en caso de nuevas elecciones. Casi dos de cada 10 electores (18,6%) cambiaría de opción, para irse al Partido Popular.
El resto de partidos mantienen una alta tasa de fidelidad. Unidas Podemos conserva al 84,6% de sus votantes, el PP al 84,9% y el PSOE al 93,5%.
Los bloques se quedan igual
Los trasvases de voto en caso de nuevas elecciones se producen dentro de los dos bloques ideológicos, sin provocar alteraciones en los mismos. Los datos de la encuesta no inducen a pensar que unas nuevas elecciones traerían consigo una alteración del reparto de poder a izquierda y derecha.
Las tres derechas no tendrían el peso suficiente para conformar una mayoría y sumarían conjuntamente 149 escaños. En la izquierda, lo mismo: la suma de PSOE y Unidas Podemos seguiría lejos de los 176 escaños necesarios para gobernar sin sobresaltos. Obtendrían conjuntamente 166 escaños.
Tras meses de concentración electoral, una nueva llamada a las urnas tendría como consecuencia un aumento de la abstención. El sondeo asegura que la participación se resentiría con respecto a las elecciones del 28 de abril, cayendo 3,7 puntos: del 71,8% al 68,1%. Celeste-Tel calcula los datos de abstención incluyendo los resultados que aporta el censo de residentes ausentes.
