Ábalos defiende que “todo el Gobierno” apuesta por “ensanchar los espacios” para lograr el respaldo de otras fuerzas

Pedro Sánchez tiene la vista puesta en la recuperación del país tras la emergencia sanitaria de la COVID-19 que tendrá su primera parada en el Congreso con la elaboración de las conclusiones de la comisión de reconstrucción. La segunda serán los Presupuestos Generales del Estado en los que el Gobierno pretende sentar las bases de ese camino para el que el FMI pronostica una caída de doce puntos del PIB. Con el horizonte electoral en Catalunya y, en consecuencia, la relación con ERC más tensa, el Gobierno mira a Ciudadanos como un posible aliado para las cuentas públicas, aunque el optimismo no es el mismo dentro del PSOE -donde hay dirigentes que ven más factible que otros ese eventual respaldo de Inés Arrimadas- ni del Gobierno, donde Unidas Podemos ve con reticencias el posible cambio de socios.

Sin embargo, el ministro de Transportes y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, ha defendido que “todo el Gobierno en su conjunto” -miembros de los dos partidos que lo sustentan pero también independientes- tiene “la misma convicción”: “Si queremos salir juntos, tenemos que abrir espacios para que todos quepamos. No tenemos ningún sectarismo. Si el tema es salir todos juntos tenemos que ensanchar los espacios para que podamos caber todos en esa empresa común”.

Preguntado por las cesiones que ha tenido que hacer el Ejecutivo -por ejemplo en la propuesta de reconstrucción en la que ha dejado fuera de las recetas el impuesto a las grandes fortunas o la derogación íntegra de la reforma laboral-, Ábalos ha reconocido que en esta situación hay que “abrir espacios para que quepamos todos”. “Todos sabemos cuándo es posible llevar a adelante algunas posiciones y cuándo es necesario contemporizar”, ha expresado en un encuentro digital organizado por Thinking Heads. También Ciudadanos ha rebajado su programa de máximos y se abre a subir impuestos como el de sociedades, según ha publicado El País.

Ábalos ha dado la bienvenida al “apoyo de fuerzas políticas” y ha subrayado la necesidad de “encontrar soluciones que nos pueden satisfacer a todos”. El dirigente socialista ha asegurado, además, que esa apertura al acuerdo con otras formaciones no supone una brecha entre los socios de Gobierno que, pese a tener una “naturaleza distinta” que han acordado “cierta autonomía” de sus grupos parlamentarios, “habla como uno solo” en lo que tiene que ver con el Ejecutivo.

El ministro ha rechazado que “no hay ningún compromiso con el soberanismo” más allá de “solucionar un conflicto político con las herramientas” que permite la Constitución. “No tenemos ningún acuerdo con los soberanistas”, ha insistido. No obstante, otros miembros del Gobierno, entre ellos la vicepresidenta Carmen Calvo, siguen sosteniendo que priorizarán a los aliados de la investidura en la negociación presupuestaria.

Ábalos ha perdido que “aquellos que quieren reconstruir tomen nota, pero que no se dejen llevar por la deriva de los que no quieren construir” en referencia al PP y a Vox. A los de Pablo Casado les ha pedido lealtad, en la misma línea que otros miembros del Gobierno, entre ellos el propio Sánchez, especialmente en el marco de la negociación europea.