La presidenta del PP de Madrid y expresidenta de esa comunidad, Esperanza Aguirre, ha pedido el voto para los populares tras acusar a los socialistas de haber “arruinado” al país pese a sus “buenas intenciones” y, frente a ello, ha elogiado la gestión de Alberto Núñez Feijóo en la Xunta, a quien, ha recordado, en su día quiso fichar para ser consejero en su comunidad.
Aguirre, que participó en un almuerzo-mitin ante cerca de 300 personas en Vigo, resumió las “complejas” causas de la crisis de España en que se gastó “más de lo que se podía” y advirtió de que, “en ese pecado las administraciones públicas tuvieron una parte muy importante de la culpa”, si bien “no todas cometieron los mismos errores”.
En ese sentido, tras indicar que bajo el gobierno de Feijóo en Galicia se contuvo el gasto y se “sanearon las cuentas como nadie”, aludió a los 8 años de gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en España para explicar que ese Ejecutivo se distinguió por su “torpeza” para diagnosticar y afrontar la crisis. Así, criticó iniciativas como lo que consideró un “absurdo” Plan E, al tiempo que abogó por “no mirar atrás”, excepto para “tomar nota de los errores y no volver a repetirlos”.
“Creo que después de la catastrófica experiencia socialista, sólo se me ocurre decir una cosa: nunca máis”, espetó la dirigente popular, que arrancó con estas palabras el aplauso de los asistentes al acto de campaña, en el que fue presentada por la candidata número 5 por Pontevedra y conselleira de Facenda, Elena Muñoz.
Aguirre, quien se mostró defensora de las políticas de austeridad y, por tanto, de suprimir gastos que “no son estrictamente necesarios”, consideró que los gobiernos del PP, como en Madrid y Galicia, tienen el convencimiento de que “la solución a la crisis pasa por quitar el protagonismo a las administraciones y dárselo a los ciudadanos”, pues el dinero está mejor en sus manos que en las de “dilapidadoras” de “políticos y tecnócratas”. También abogó por aprovechar la crisis para “afrontar reformas y cambios” que, a su juicio, ya había que haber impulsado antes.
“BUENAS INTENCIONES”
A lo largo de su intervención, Esperaza Aguirre volvió a dedicar palabras a la gestión de los socialistas en los gobiernos, reiterando que “gastaron mucho más de lo que podían gastar”. Así, apuntó que “salvo en los casos de corrupción” los socialistas habían “arruinado” al país, pero llenos de “buenas intenciones”, por creer en que “los poderes públicos sustituyeran a los ciudadanos en decisiones de sus vidas”.
No obstante, advirtió de que “el camino del infierno está empedrado de buenas intenciones” pues, “en política, las buenas intenciones son peligrosísimas” y no hay que juzgar en base a ellas sino en función de los “resultados”. Así, contrapuso un modelo socialista basado en “dirigir la vida de los ciudadanos” frente al del PP, que pasa por que “los ciudadanos sean dueños de sus vidas”, y puso como ejemplos las iniciativas desarrolladas en Madrid para la libre elección de centro escolar o de médico y hospital.
En esta misma línea, y tras apuntar que los países que han salido ya de la crisis son los que han otorgado mayor libertad al ciudadano y han “renunciado al intervencionismo constante de poderes públicos”, estimó que Galicia y Madrid son las comunidades que “mejor pueden hacer frente” a la actual situación de dificultades económicas.
Entre otros aspectos, la dirigente del PP madrileño aludió a la gestión “impecable” de la Xunta, que permite que Galicia no tenga que acudir al fondo de liquidez, y consideró que los gallegos “acertaron de pleno” cuando, en las pasadas elecciones, “eligieron” a Feijóo.
“Intenté ficharle para consejero de Sanidad en 1993 en Madrid”, rememoró y añadió que “no pudo ser”, algo que sintió. No obstante, dijo que se alegra por sus “éxitos” conseguidos.
NACIONALISTAS
Esperanza Aguirre no sólo aludió a la crisis económica, sino a una “profundísima crisis política provocada por el oportunismo de partidos nacionalistas” que, a su juicio, han decidido ahora “quitarse la careta” y aparecer como “independentistas”.
En ese sentido, lamentó que “amenazan con que esa separación” y los pasos para ella “piensan darlos incumpliendo la ley y la Constitución”, y denunció que ello supone un “desafío” a la realidad social, cultura y sentimental de España, así como a su historia.
En ese sentido, acusó a “algunos nacionalistas” de querer “cambiar el pasado”, para luego recordar que Cataluña lleva “unida a España más de 2.000 años” y “no es como Escocia”. Así, juzgó que “nadie” puede entender Cataluña sin España ni España sin Cataluña y aseguró que, con la actual Constitución, esta comunidad “ha logrado las mayores cotas de autogobierno de su historia”, por lo que pidió que “no cuenten cuentos de un pasado mítico”.
Por todo ello, consideró estas reivindicaciones separatistas una “insensatez” y “una de las ocurrencias que tienen los políticos cuando piensan en la rentabilidad electoral a corto plazo”. Frente a ello, destacó la “sensatez de los gallegos” que permite que en esta comunidad “haya dos lenguas oficiales y un bilingüismo de hecho”, por lo que no tiene “ese problema”.
FEIJÓO “SEGUIRÁ SIENDO PRESIDENTE”
Finalmente, cerró su intervención mostrándose “convencida” de que Alberto Núñez Feijóo “seguirá siendo presidente de la Xunta con el voto de los gallegos el próximo domingo”.
La jornada de Aguirre en la ciudad olívica comenzó con una rueda de prensa en la sede del partido y, posteriormente, se desplazó andado hasta una cafetería cercana donde tomó un café. Posteriormente, su agenda en Vigo concluyó con una comida-mitin en el Auditorio Mar de Vigo, donde realizó una intervención en un comedor con vistas a la ría, las cuales aseguró no conocer hasta ese momento.
Antes de tomar la palabra en el auditorio, fue presentada por Elena Muñoz, quien la calificó como un “ejemplo de lo que debe ser un político” y, además, aseguró que ahora “más que nunca” son necesarios “referentes” que demuestren que “ no todos los políticos son lo mismo”. Así, destacó que se trata de una “persona íntegra y que defiende siempre sus pensamientos e ideas”.