Alberto Garzón califica de “teatro” las negociaciones entre PSOE, Podemos y Ciudadanos
Alberto Garzón ha alertado este domingo ante los miembros del Consejo Político Federal de IU que de repetirse las elecciones generales el PP, “el partido más corrupto de Europa”, estaría diez meses más en funciones sin rendir cuentas en el Parlamento, lo que sería “una anomalía democrática”. Además, seguir con un gobierno del PP, según Garzón, propiciaría más “precariedad” y aumentaría el sufrimiento de una sociedad española que está cansada de la situación de bloqueo político que ha generado el PSOE al empeñarse en ir “de la mano de Ciudadanos”. El dirigente de IU ha calificado como “teatro” las negociaciones que han llevado a cabo tanto esas dos fuerzas políticas como Podemos en estas últimas semanas.
También Cayo Lara ha advertido de la posibilidad de que unas elecciones anticipadas aumenten la abstención, por lo que, pese a sus discrepancias con Garzón, ha apelado durante la presentación de su informe de gestión, a la “unidad” de IU y a superar las diferencias que les separan.
El dirigente de Unidad Popular afronta este domingo un Consejo Político decisivo de cara a la XI Asamblea Federal prevista para los días 4 y 5 de junio, si no hay adelanto electoral, en el que hay confrontados tres modelos diferentes de modificación de los estatutos y de participación de la militancia. El de Garzón; el que lidera la eurodiputada Paloma López y que cuenta con el apoyo de Cayo Lara y los firmantes de la Declaración de Zamora, y el de Izquierda Abierta, el partido de Gaspar Llamazares. Para que la propuesta de Garzón sea aprobada debe lograr el apoyo mínimo de 3/5 del Consejo Político Federal de IU, es decir, 152 miembros de los 254 que integran el máximo órgano de la coalición entre asambleas.
“Acuerdo imposible” con Ciudadanos
En su intervención ante el Consejo Político, Garzón ha criticado con dureza al PSOE por decidir “ir de la mano a todos los espacios con Ciudadanos dejando en sus manos la política económica”. “Nos ha parecido un acuerdo imposible y contraproducente para la sociedad”, ha dicho, para sentenciar a continuación que desde el principio se vio que era un pacto “condenado a no salir”.
“Esa opción de dos fue una decisión política de los socialistas. El PSOE optó por el matrimonio con Ciudadanos y por presionar a los partidos de izquierda”, ha lamentado el líder de IU, cuando en su opinión debería haber ocurrido al revés “para lograr un Gobierno de resistencia”.
El dirigente de IU ha reclamado un gobierno “que haga políticas diferentes, no un gobierno que haga la misma política del PP”, mientras resaltaba que en estos tres meses de negociación “todo sigue agudizándose, el hambre, la precariedad y la desigualdad”, por lo que ha insistido en la necesidad de alcanzar un gobierno “de emergencia social”. “Hemos hecho todo lo que estaba en nuestra manos para propiciar ese Gobierno de resistencia”, ha recordado Garzón.
“IU sigue haciendo política”
Sin embargo, a su juicio, tras la fracasada investidura, las negociaciones entre el PSOE y Ciudadanos para lograr cerrar ese pacto de gobierno “se han convertido en un teatro en los que los actores están mirando más a las elecciones y a la campaña electoral”, y “eso ha cansado a la sociedad”.
En contraposición, “IU ha seguido y seguiremos haciendo política atentos a los problemas reales de la sociedad”, ha afirmado Garzón. Como ejemplo, ha recordado la preocupación de la coalición por la situación de los refugiados y la querella contra Rajoy que han presentado “para que en nuestro nombre no se cometa esa atrocidad”.
El líder de IU ha asegurado también que su organización está preparada para unas elecciones anticipadas por que cuenta con “una militancia activa” que trabaja en un proyecto político basado en la coherencia.
“Somos la única fuerza que no hemos cambiado ni hemos engañado a la ciudadanía, No vamos a fallar a los que depositen su confianza en nuestro proyecto”, ha asegurado Garzón.
Cayo Lara crítico y a la vez conciliador
Cayo Lara crítico y a la vez conciliadorPor su parte, Cayo Lara también ha alertado de la posibilidad de que ese hartazgo que hay en la sociedad se traduzca en un aumento de la abstención si se adelanta la cita con las urnas. Lara ha arremetido contra las negociaciones que ha protagonizado el PSOE, y ha sentenciado: “hemos pasado del bipartidismo neoliberal al cuarteto de la desesperanza”, en alusión a los socialistas, PP, Ciudadanos y Podemos.
“No es bueno que haya elecciones anticipadas cuando tenemos a un PP en rebeldía en el Congreso”, ha apostillado.
Pese a sus discrepancias con Garzón, Lara ha hecho un llamamiento a la “unidad” para poder aprovechar el buen momento que pronostican todas las encuestas a IU. El coordinador general ha pedido un esfuerzo para ver si es posible llegar a una síntesis en las propuestas organizativas de cara a la XI Asamblea. También ha apostado por “mirar al futuro” y no anclarse en los errores del pasado
Sin embargo, su informe de gestión ha sido sumamente autocrítico. En él Lara reconoce que la coalición no ha conseguido cerrar el proceso de refundación que inició hace ahora ocho años en la IX Asamblea. Porque para empezar “ni siquiera hemos definido ni concretado bien lo que entendemos por Refundación”, ha dicho.
“Nos creímos que bastaba con subir en las encuestas para resolver nuestras deficiencias y por ello unas buenas encuestas nos hicieron creer que las habíamos resuelto”, ha afirmado Lara, que también ha opinado que en los últimos años “no hemos conseguido dar forma a un equipo ejecutivo”.
Pero donde ha sido más crítico Lara ha sido en reconocer que pese al esfuerzo que ha hecho la organización y las movilizaciones que han abanderado “no hemos conseguido la implicación de la sociedad organizada” y “hemos tenido limitaciones en nuestro papel de impulsores del conflicto social”.
El coordinador general de IU ha ratificado su apuesta por “la Convergencia Política y Social”, pero lamenta que ésta haya sido “gestionada de forma irregular”. Sin embargo, ha asegurado que esta apuesta ha sido “sincera y clara”, lo que les ha hecho aparecer como una fuerza política “más creible” a la hora de hablar de conseguir la “unidad popular”.
Su balance de gestión ha sido aprobado por 103 votos a favor, 17 en contra y 45 abstenciones.