Aldama acusa a Ábalos de pedir comisiones a cambio de adjudicaciones públicas de obras en autovías

El empresario Víctor de Aldama ha enviado un escrito al Tribunal Supremo en el que desarrolla, días antes de su declaración como imputado y poco después de quedar en libertad, la relación que tenía con el exministro José Luis Ábalos y exhibe su supuesta cercanía a altos cargos de la administración. El documento, adelantado por El Español y que ha podido examinar este periódico, acusa a Ábalos de cobrar comisiones a cambio de adjudicar obra pública a determinadas empresas y al hoy ministro Ángel Víctor Torres de haber cobrado una comisión de 50.000 euros.

Su letrado ha aportado esta documentación después de que, a finales de noviembre, confesara su implicación tanto en el 'caso Koldo' como en la trama de hidrocarburos y fuera dejado en libertad con cautelares. En paralelo a estas revelaciones, el juez de la Audiencia Nacional que investiga el resto del conocido como 'caso Koldo' ha pedido a la Guardia Civil que compruebe si lo que dijo en sus dos horas de confesión es cierto.

Parte de su confesión llegó hasta el Tribunal Supremo, que recientemente le ha llamado a declarar tanto a él como a José Luis Ábalos, acusado de beneficiarse de la trama que lideraba su mano derecha, Koldo García. Este miércoles ha sido la defensa de Víctor de Aldama la que, una semana antes de la comparecencia, ha aportado un escrito con afirmaciones y documentos que, según su versión, avalan sus acusaciones contra el exministro y hoy diputado.

El documento de Aldama arranca explicando varios asuntos que ya han sido analizados por la Guardia Civil en la Audiencia Nacional: su cercanía a José Luis Ábalos y su mano derecha, Koldo García. Desde que en 2018 ayudase al entonces ministro a hacer una visita oficial a México hasta otros viajes a Venezuela, Georgia o San Petesburgo. Es en este punto en el que vuelve a recordar que se sacó una foto con el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en un acto del PSOE: “A los efectos de que éste agradeciera a don Víctor de Aldama las gestiones que estaba realizando en favor de su Gobierno”, afirma.

Buena parte del escrito se basa en los informes de la Unidad Central Operativa que ya obran en la causa, pero también defiende la existencia de “numerosos pagos en efectivo realizados a don Koldo García, para sí y para ulterior reparto con el entonces Ministro don José Luis Ábalos”. Tanto por las adjudicaciones millonarias a su empresa Soluciones de Gestión para la venta de material sanitario como, también, “por otros conceptos, algunos sin vinculación a actos administrativos concretos, y otros vinculados a la adjudicación de obra pública”.

La defensa de Aldama aporta varios documentos y hace afirmaciones relacionadas con Ábalos que, según reconoce él mismo, no llegaron a ejecutarse. Por ejemplo un contrato de 2019 para que el entonces ministro, según la versión de De Aldama, obtuviera a modo de comisión un piso valorado en casi dos millones de euros en el Paseo de la Castellana de Madrid. “El inmueble nunca fue ocupado por don José Luis Ábalos, de hecho”, reconoce. También habla de gestiones para comprar un coche modelo Mini para la entonces esposa del exministro: “Finalmente no compró este vehículo, pero se avanzaron las gestiones para su adquisición en favor de la esposa del sr. Ábalos, que finalmente adquirió un vehículo Mercedes descapotable”.

Sobre el cobro de comisiones por parte de Ábalos a cambio de adjudicaciones públicas “prefijadas” a determinadas empresas, Víctor de Aldama aporta un diagrama de estas adjudicaciones, algunas subrayadas en rosa y otras en verde con una serie de indicaciones que no sabe si pertenecen a Koldo García o al propio ministro. “Aparecen subrayados en color rosa los contratos públicos, ya pre-adjudicados a empresas previamente seleccionadas, a quienes debían ser adjudicados. Se trataría de empresas que habrían adquirido el compromiso de pago de comisiones si resultaban adjudicatarias”, afirma.

El exministro Ábalos acudirá a declarar como imputado ante el juez del Supremo que ha asumido parte del caso el próximo 12 de diciembre. Cuatro días después lo hará el propio Víctor de Aldama y, posteriormente, su exasesor Koldo García. El empresario detalla las comisiones que él mismo cobró, supuestamente por intermediar en adjudicaciones. Asegura que cobró 18.000 euros mediar en una adjudicación pública. Otros 77.000 euros los cobró de la empresa adjudicataria de la obra de la sede de la Agencia Tributaria de Canarias.

Ángel Víctor Torres y Santos Cerdán

En su declaración ante la Audiencia Nacional, Víctor de Aldama afirmó haber pagado comisiones dirigidas, entre otros, al hoy ministro y entonces presidente canario Ángel Víctor Torres, al dirigente socialista Santos Cerdán y a un alto cargo de Hacienda, colaborador de la ministra María Jesús Montero. En este escrito insiste en que se le pidieron 50.000 euros para Ángel Víctor Torres además de exponer que había hecho gestiones “facilitando inmuebles para encuentros de diversa naturaleza en los que participaba junto a otras personas el sr. Torres. En particular fue recurrente el alquiler de un piso en la calle Atocha”.

El equipo del ministro Torres ha negado todas estas acusaciones y afirman que se añadirán as las acciones judiciales que han iniciado contra el empresario. Sobre Santos Cerdán, asegura que existió un “desencuentro” con la empresa Civis Global que “concluyó” con una comisión de 15.000 euros para el dirigente socialista, sin aportar tampoco más pruebas.

En cuanto a Carlos Moreno, alto cargo de Hacienda, Víctor de Aldama afirma que le pidió consejo para comprar un piso, aunque finalmente la gestión no fructificó. Tras exhibir su contacto en la agenda del móvil y su tarjeta de visita oficial, el empresario añade que posteriormente le pidió ayuda para gestionar la deuda de una de sus empresas. “Podrá comprobarse la concesión del aplazamiento y su fecha, y su cotejo con las fechas en las que se mantuvieron aquellas comunicaciones”, dice.

El resto del documento dedica sus páginas a exhibir la supuesta cercanía que afirma tener o haber tenido con determinados altos cargos cercanos al Presidente del Gobierno. Entre ellos, una carta de Iván Redondo, entonces director de gabinete de Pedro Sánchez, enviada a Cipriano García, director de uno de los principales patrocinadores del CF Zamora que pertenece a Aldama: “Lamento comunicarles que la agenda del Presidente no le va a permitir llevar a cabo la reunión que solicita”, era la respuesta enviada a García.

El juez pide verificar su confesión

En paralelo, el juez de la Audiencia Nacional que sigue investigando la parte de la causa que no afecta a Ábalos ha movido ficha en torno a su confesión de dos horas de finales de noviembre. Ha solicitado a la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil que analice sus palabras para saber qué parte de su confesión se corresponde con la realidad. Entre otras cosas, De Aldama llegó a afirmar que había pagado miles de euros en comisiones destinadas, entre otros, al dirigente socialista Santos Cerdán, que ha anunciado acciones legales contra él.

El empresario, en libertad con cautelares desde hace más de una semana, está imputado en tres causas diferentes. Una de ellas, por la que estaba en prisión provisional, gira en torno a una trama de evasión masiva de impuestos en el sector de los hidrocarburos, con varias de sus empresas consideradas como el epicentro del entramado.

Las otras dos son las dos ramificaciones del caso Koldo, una en la Audiencia Nacional y otra en el Tribunal Supremo, en la que es considerado el 'conseguidor' de la trama: el que estaba en contacto directo y constante con Koldo García, mano derecha de Ábalos en el ministerio durante la pandemia, con 53 millones de euros en contratos públicos de compraventa de material sanitario bajo sospecha.