Alfon se enfrenta a cinco años de prisión por tenencia de explosivos

La Audiencia de Madrid celebrará este jueves el juicio contra Alfonso Fernández, ‘Alfon’, un joven madrileño de 22 años que se enfrenta a una pena de 5 años y 6 meses de prisión por tenencia de explosivos. La Policía detuvo a Fernández el 14 de noviembre de 2012, jornada en la que había convocada una huelga general. Los agentes aseguran que el joven portaba una bolsa que contenía una bomba de fabricación casera. El acusado asegura que es un montaje y que los agentes sacaron el artefacto de entre unos matorrales próximos.

Está previsto que el juicio no se prolongue más allá de la mañana de hoy. El veredicto depende de que el tribunal considere como prueba suficiente el testimonio de los policías de la Brigada Provincial de Información que detuvieron al joven, que declararán en la vista. Las pruebas incorporadas al sumario no incluyen el hallazgo de huellas en la bolsa o el artefacto, según defiende la defensa.

En una entrevista concedida a eldiario.es, Alfonso Fernández relató su detención, junto a su novia, la mañana del 14-N: “Había más gente, estábamos en una calle entre la casa de mi tío y la mía, y entonces tres policías secretas nos paran, nos piden la documentación, accedimos a entregársela, nos preguntaron dónde íbamos, yo les dije que a casa de mi tío. Estábamos justo ya casi debajo de la ventana de la casa de mi tío, y entonces un policía secreta, vestido de paisano, saca de unos matorrales algo, una bolsa, y me pregunta que dónde voy con eso, que qué era eso que llevaba yo ahí”.

En el escrito de acusación, el fiscal asegura que Fernández fue detenido cuando “llevaba un artefacto explosivo de fabricación casera, tratándose de un artefacto mixto explosivo incediario de funcionamiento sencillo”. El artefacto, continúa el fiscal, contenía “metralla susceptible de poder ocasionar importantes daños materiales, así como heridos si la explosión tuviera lugar en una distancia intermedia”.

Alfonso Fernández estuvo 56 días en prisión privisional tras su arresto. El proceso contra él ha provocado un movimiento de solidaridad en una parte de la izquierda, que respalda la tesis del montaje policial, dentro de una estrategia de represión de la protesta social por el actual Gobierno del PP.

Según Fiscalía, Alfonso Fernández fue condenado en el pasado a dos años de prisión por un delito contra la salud pública. El pasado julio se sentó en el banquillo de los acusados por haber participado presuntamente en la agresión a un grupo de policías que dieron el alto al coche en el que viajaba junto a familiares y amigos. El juicio fue suspendido y está pendiente de su reanudación.