El cara a cara entre el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, y la portavoz del PP, Cayetana Álvarez de Toledo, a cuenta de una interpelación parlamentaria por el acuerdo suscrito por el PSOE y Unidas Podemos con Bildu para derogar la reforma laboral ha terminado con la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ordenando retirar del Diario de Sesiones las graves acusaciones de Álvarez de Toledo contra el padre de Iglesias, al que ha acusado de ser un “terrorista”.
La interpelación tenía por objeto inquirir sobre “cómo van a influir en la acción de Gobierno los acuerdos políticos con el nacionalismo radical”. El PP había elegido a Iglesias para que respondiera en nombre del Ejecutivo, pese a que no fue firmante del acuerdo con Bildu, ya que es un pacto que alcanzaron los grupos parlamentarios.
En su primera intervención, Álvarez de Toledo e Iglesias han ido elevando el tono. La portavoz del PP ha acusado al vicepresidente segundo de ser “un impostor” al defender una Constitución en la que, ha dicho, no cree. La mano derecha de Pablo Casado en el Congreso ha terminado su intervención llamando a Iglesias “burro de troya” del nacionalismo.
Iglesias ha recogido la frase en su primera réplica. “Mucho más digno ser burro de troya que marqués”, le ha respondido. El vicepresdente ha expuesto el proyecto de reconstrucción que tiene el Gobierno cuando pase la crisis de la COVID-19, basado sobre todo en el refuerzo de los servicios públicos.
El vicepresidente segundo ha trufado su intervención con referencias al título nobiliario de Álvarez de Toledo, marquesa de Casa Fuerte. En su turno, la portavoz no lo ha dejado pasar: “Ha hecho referencia a mi título. Los hijos no somos responsables de nuestros padres. Primera y última vez que lo digo, usted es el hijo de un terrorista. A esa aristocracia pertenece usted, a la del crimen político”.
Pablo Iglesias, visiblemente molesto, iniciaba su segundo turno asegurando que no iba a perder “la compostura” por lo que consideraba una provocación de la portavoz del PP. Y apuntaba a que invitaría a su padre a emprender acciones legales contra Álvarez de Toledo. De hecho, el eurodiputado de Vox Herman Tertsch ya fue condenado a pagar 15.000 euros por unos hechos similares. Y antes, otros 12.000.
Tras el debate, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha pedido a Álvarez de Toledo que retirara sus palabras. Pero la portavoz se ha reafirmado y ha esgrimido un artículo en el que Iglesias hablaba de la militancia juvenil de su padre en el FRAP. De hecho, el padre de Iglesias cumplía condena por repartir octavillas cuando se cometió el crimen que falsamente se le ha atribuido.
Batet, haciendo uso de sus prerrogativas, ha ordenado retirar las palabras del Diario de Sesiones, lo que ha provocado las quejas de la bancada del PP. Y de Vox. De hecho, el vicepresidente de la Mesa del Congreso que representa al partido ultraderechista, Ignacio Gil Lázaro, se ha levantado de su lugar en el Hemiciclo en protesta por lo ocurrido.
Al diputado de Vox le ha seguido la también vicepresidenta, esta vez del PP, Ana Pastor, quien también se ha levantado de su sitio. Curiosamente, Pastor ya ejerció esta misma potestad durante su mandato como presidenta del Congreso.
Álvarez de Toledo se reafirma
La portavoz del PP no ha tardado en reafirmarse en sus palabras. En su cuenta de Twitter ha publicado el artículo donde Iglesias habla de la militancia de su padre en el FRAP.
También han llegado los apoyos a Iglesias. Uno de los primeros, de su antiguo compañero de partido, el líder de Más País, Íñigo Errejón.
Los mensajes de apoyo o rechazo a las palabras de Álvarez de Toledo se han sucedido en las redes.