Primero fue Bárcenas y ahora Álvaro Lapuerta. Ambos extesoreros del PP iniciaron el periplo judicial del caso Gürtel asistidos por letrados del agrado de Génova 13. Ambos han roto relaciones con sus abogados, lo que en el seno del PP se vive con inquietud. Lapuerta ha decidido romper sus relaciones con el letrado Javier Iglesias y dejar en manos del abogado catalán Cristóbal Martell su representación legal.
El hasta ahora abogado de Lapuerta, Javier Iglesias, se queda fuera de la causa. A iglesias se le relaciona con la cúpula del partido y el propio Bárcenas le acusa de haber acudido a prisión para chantajearle supuestamente en representación de la dirección del partido.
Según la familia del tesorero al que sucedió Bárcenas, la decisión se debe a su deseo de contar con una defensa más jurídica y de perfil más bajo. Según ha declarado Iglesias a eldiario.es, existía un problema de compatibilidad ya que también defiende a Alfonso García Pozuelo (Constructora Hispánica), uno de los supuestos donantes indentificados por Bárcenas.
La importancia de Lapuerta en el proceso de los papeles de Bárcenas es crucial. La dirección popular defiende la teoría de que Bárcenas es un delincuente y Lapuerta una persona intachable. Se da la circunstancia de que en los papeles entregados por Bárcenas al juez Pablo Ruz figura la firma de Lapuerta con supuestos “vistos buenos” en varios de los apuntes de sobresueldos en B entregados presuntamente a altos cargos populares. En este punto, la postura jurídica de Lapuerta es fundamental para los intereses de Rajoy. Si decide corroborar las tesis de Bárcenas, al PP se le pone muy cuesta arriba defender la inexistencia de contabilidad B en el partido y la concurrencia de prácticas relacionadas con la financiación irregular de la formación. Nada en el entorno de Lapuerta denota que su cambio de letrado suponga también un cambio de estrategia procesal.
El hasta ahora abogado de Lapuerta, Javier Iglesias, ya defendió al extesorero en el caso de los supuestos espionajes ordenados en el PP de Madrid. Esa relación es ahora agua pasada, a la espera de conocer los detalles en torno a los nuevos letrados de los que Lapuerta se hará acompañar en sede judicial.
Luis Bárcenas también cambió de abogado en medio del proceso. Con su cambio llegó la revolución: el extesorero pasó a reconocer la autoría de los papeles que se le atribuían y surtió al juez de copiosa información sobre los manejos internos del PP que podrían vulnerar la legalidad. Tras el cambio de estrategia de Bárcenas, las informaciones sobre el PP se desencadenaron con un punto álgido en la publicación de los mensajes de texto intercambiados entre Bárcenas y el propio Rajoy. Esos SMS, que dieron la vuelta al mundo, provocaron la comparecencia de Rajoy en el Senado en la que el presidente del Gobierno defendió una vez más no conocer nada de prácticas delictivas en el entorno de su partido.
La novedad judicial se produce en una semana clave para el proceso y a pocos días de las declaraciones ante el juez de Javier Arenas o María Dolores de Cospedal.