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Ana Pastor descarta combatir en la batalla del PP y evita apoyar públicamente a un candidato

Ana Pastor no dará la batalla por el liderazgo del PP. Así lo ha asegurado en una comparecencia ante los periodistas en el Congreso en la que ha asegurado que “miles” de militantes le han pedido que diera un paso al frente, pero se ha escudado en su posición institucional para no hacerlo. Pastor ha evitado respaldar públicamente a alguno de los candidatos que pelearán por el puesto que deja Mariano Rajoy.

“No me puedo presentar por responsabilidad porque presido las Cortes Generales. Soy persona con un compromiso”, ha explicado Pastor tras dar las “gracias” a los militantes de base que, según ha dicho, le han transmitido su apoyo.

A pesar de las preguntas de los periodistas sobre su inclinación por los candidatos, Pastor ha evitado posicionarse en todo momento: “Voy a defender los colores de mi partido junto con los militantes para que el PP salga fortalecido de este proceso”, ha asegurado antes de animar a la participación en la votación.

“Tenemos que ser, lo somos de facto, la alternativa al Gobierno actual”, ha dicho a pesar de su posición institucional: “Tenemos que pensar en nosotros, pero fundamentalmente en los españoles”. “Voy a luchar por mi partido, por mis ideales. Tengo el cariño y la consideración por todos los militantes”, se ha limitado a responder.

Lo que sí ha reconocido es que se llevó un “disgusto gordo” cuando Alberto Núñez Feijóo renunció a presentarse al proceso de elección del presidente del PP. La decisión, según ha argumentado, la comprende porque, como ha dicho en su caso, el presidente gallego tiene también una posición institucional.

Por el momento hay siete candidatos para suceder a Rajoy: Soraya Sáenz de Santamaría, María Dolores de Cospedal, Pablo Casado, José Manuel García Margallo, José Luis Bayo, José Ramón García-Hernández y Elio Cabanes. El PP tiene un plazo de dos semanas para reducir de siete a dos los aspirantes a liderar el partido.

Cada candidato va recibiendo algunos apoyos públicamente. El presidente madrileño, Ángel Garrido, se ha posicionado del lado de Cospedal, mientras que el exministro Iñigo de la Serna está del lado de Soraya Sáenz de Santamaría.