Esta Unión Temporal de Empresas se ha presentado al concurso promovido por el Gobierno de Aragón para acometer la redacción y ejecución de las obras de la nueva estación y la nueva playa de vías, lo que garantizará la reapertura de la línea ferroviaria al tráfico internacional.
Además, estas empresas serán las encargadas de urbanizar la explanada de la estación, convertida en una gran plaza, y de la rehabilitación del edificio modernista de la estación internacional con destino a uso hotelero, comercial y demás usos complementarios autorizados en el Plan Parcial.
Asimismo, la UTE gestionará y explotará el edificio de la estación internacional durante un plazo de 69 años, tal y como se contempla en los pliegos del contrato. El coste por el que se licitó este concurso asciende a 26,9 millones de euros y falta por conocer la oferta de la UTE ganadora.
En declaraciones a Europa Press, José Luis Soro ha afirmado que “por fin, tras décadas de abandono, la ciudadanía aragonesa ha recuperado Canfranc”, dado que su rehabilitación es ya “imparable y muy importante porque no es solo una estación y una explanada”, sino que Canfranc es “un icono que representa los anhelos, las luchas de todo un pueblo, es parte de nuestra identidad colectiva”.
Se trata de un proyecto “de dimensión humana, es un acto de amor hacia Canfranc y lo que representa”, ha dicho Soro, al indicar que con la presentación de esta oferta por parte de la UTE Acciona Construcción, S.A. y Avintia Proyectos y Construcciones S.L. “si todo va bien” antes del verano del próximo año podrían comenzar las obras en la playa de vías, de modo que la urbanización de toda la explanada y la rehabilitación de la estación terminarían en el tercer trimestre de 2021 y “Canfranc sería una auténtica realidad”, llenándose de nuevo “de vida, de gente y de futuro”.
LICITACIÓN COMPLICADA
“De momento solo conocemos que ha habido una oferta, la semana que viene se abrirá el sobre con la documentación” de estas empresas y el día 7 de noviembre se procederá a la apertura del sobre con los datos técnicos y, por último, el de la oferta económica.
El consejero ha admitido que era “una licitación muy complicada”, porque al presentarse de manera conjunta todo el proyecto, la redacción, ejecución de la obra y la explotación de la estación, implicaba unos “requisitos más exigentes y que tuvieran acreditado una triple clasificación para la obra general, para la obra ferroviaria y para la restauración de bienes inmuebles histórico artísticos”, así como se requería experiencia en la explotación de establecimientos hosteleros, “al menos durante cinco años”.
Por tanto, “nos dirigíamos a un grupo muy reducido de UTE” y se precisaba la colaboración entre empresas “para poder atender a todo el planteamiento, pero era mejor así que por separado”. “Era mucho más atractivo y lógico que el mismo adjudicatario se encargara de todo”, ha estimado.
AGRADECIMIENTO Y FELICIDAD
Con el sueño de recuperar la estación de Canfranc ya al alcance de las manos, Soro ha dicho sentir “un agradecimiento inmenso a todo el equipo que ha trabajado muy duro en todos estos meses”, valorando que la clave de este proyecto ha sido “hacerlo sin externalizar, con la Dirección General de Urbanismo y con la empresa pública Suelo y Vivienda”.
“Siento mucho agradecimiento, especialmente al autor intelectual que es el director general de Urbanismo, Carmelo Bosque” y, al mismo tiempo, “me siento un privilegiado por haber participado en algo tan emocionante y apasionante como es recuperar Canfranc”, ha subrayado Soro.