La asociación profesional Independientes de la Guardia Civil (IGC) ha remitido un escrito ampliatorio a la Fiscalía de Navarra para que investigue “la presunta existencia de un delito de riesgo o negligencia en el triple crimen de Cáseda”.
Ayer esta asociación pidió al Ministerio Público la apertura de diligencias para esclarecer las circunstancias en las que se produjo la comunicación de la reyerta de Cáseda y si se alertó a la Guardia Civil desde el 112.
Hoy, dice en un comunicado, testimonios de autoridades gubernativas y forales “dejan evidencia” de que el 112 “no avisa a la Guardia Civil ante el requerimiento de seguridad de los ciudadanos, y que, haciéndolo a la Policía Foral, ésta decide si le llama o no, y cuándo lo hace” a pesar de que la seguridad ciudadana “se afronta en Navarra por el Cuerpo Foral de Policía y por los dos Cuerpos de Policía del Estado”.
En este sentido la IGC indica que “si no se actúa de forma conjunta, coordinada, e instantánea” existe el riesgo de que el servicio “puede dar lugar a pérdidas de tiempo muy necesarias” para salvar vidas o detener a delincuentes.
Por ello ve “conveniente dilucidar si la actuación puntual de las administraciones en el triple crimen de Cáseda fue dolosa” o “si esta forma de actuación es general o común y presuntamente constitutiva de un delito de riesgo en su caso, incluso por negligencia, no por dolo, que pudiera constituir presuntamente además prevaricación” por causar un “tardío” o “defectuoso” servicio.