La persecución que inició la Guardia Civil de los mensajes en Twitter y su continuidad en los tribunales en forma de delito de enaltecimiento del terrorismo, quedarán ejemplificadas la próxima semana en la Audiencia Nacional. De los ocho juicios que comienzan a celebrarse el próximo lunes, siete son procesos sobre mensajes publicados en redes sociales.
Buena parte de la actividad de la Audiencia Nacional está, en los últimos meses, enfocada a juzgar estos comportamientos. Las diferentes fases de la Operación Araña de la Guardia Civil llevaron a los agentes a detener a decenas de personas por el contenido de sus tuits, fuesen mensajes en favor de grupos terroristas o simples chistes, y ahora se agolpan los juicios derivados de esas actuaciones.
En la segunda fase de esa operación fue detenido el músico César Strawberry, cuyo caso puso de relieve las actuaciones contra estos comportamientos. Fue juzgado por la Audiencia Nacional por comentarios como “el fascismo sin complejos de Esperanza Aguirre me hace añorar hasta los GRAPO” o “Franco, Serrano Suñer, Arias Navarro, Fraga, Blas Piñar... Si no les das lo que a Carrero Blanco, la longevidad se pone siempre de su lado”.
El juez le absolvió, pero la Fiscalía insistió en que sus tuits eran delito. Es más, considero que este tipo de comentarios buscan “enaltecer los actos terroristas, consistentes en secuestrar y matar con ánimo de subvertir el orden constitucional”. El caso acabó en el Tribunal Supremo, donde la Fiscalía consiguió una condena de un año sobre la que tendrá que pronunciarse el Tribunal Constitucional. El cantante de Def con Dos ha publicado una canción en la que habla del proceso judicial seguido contra él.
En su misma situación están otros acusados de enaltecer el terrorismo con sus comentarios en Twitter, y que esta semana serán juzgados por la Audiencia Nacional. Entre los siete procesos que comienzan a partir del lunes destaca el de la tuitera Cassandra, que se enfrenta a una condena de dos años y seis meses.
Esa es la petición del fiscal por publicar comentarios como “Kissinger le regaló a Carrero Blanco un trozo de la luna, ETA le pagó el viaje a ella”, “¿Carrero Blanco también regresó al futuro con su coche?”, “Película: A tres metros sobre el cielo. Producción: ETA Films. Director: Argala. Protagonista: Carrero Blanco. Género: Carrera espacial”.
Su juicio estaba previsto para este miércoles, pero ha solicitado un aplazamiento porque ha renunciado al abogado de oficio que la defendía. Según el escrito que ha enviado a la Audiencia Nacional, su letrado quiso argumentar que padecía enajenación mental para exculparla.
“Que me pidan dos años y medio por hacer chistes sobre Carrero Blanco es un ataque a la libertad de expresión”, denunció Cassandra. Lo mismo piensa Arkaitz Terrón, que será juzgado esta semana.
El informe de la Guardia Civil sobre sus tuits recoge que, por ejemplo, publicó el pasado 27 de septiembre, “en el que cada año la organización terrorista ETA y su entorno celebran el día del soldado vasco”, una foto de un tatuaje en el que se puede ver a una mujer soldado envuelta en una bandera vasca. Todo ello con el objetivo de homenajear a ETA, según la versión de los agentes.
Terrón, al igual que Cassandra, también hizo chistes como “no entiendo por qué la placa de Carrero no se la ponen los productores de cava. El día que ETA lo hizo volar se descorcharon muchas botellas!”. Por estos comentarios se enfrenta a una pena de dos años de cárcel.
Junto a ellos serán juzgados otros cinco acusados por este tipo de frases. Los jueces que absolvieron a Strawberry por sus tuits avalaron la operación policial. Los agentes de la Guardia Civil están legitimados, escribieron, para “realizar servicios de vigilancia y observación por las calles y por cualquier tipo de lugares públicos, incluidas las redes sociales públicas”.