El expresidente del Gobierno José María Aznar ha calificado la consulta independentista planeada por Artur Mas de “chantaje político inaceptable”. En cuanto al proyecto de gobernabilidad entre CiU y ERC, Aznar lo considera una “deslealtad” y una “coalición explosiva”.
Aznar reconoció en una entrevista en Los Desayunos de TVE, que su “voluntad es romper el pacto constitucional”, por lo que la situación “es complicada y delicada”. En este sentido, según Aznar, el Gobierno tiene la responsabilidad de hacer cumplir las leyes ante la convocatoria de cualquier consulta o “intento secesionista”: “Hay que ordenar un Estado desbordado, insostenible e inútil, en constante centrifugación y destrucción”. Así, “el Constitucional es el que define el marco de juego. Si te atienes a ese marco, aplicas las leyes”.
Aznar no ve necesaria una reforma de la Constitución y menos “si se plantea para solucionar los problemas de los partidos”. Si usted plantea un chantaje político, se sitúa al margen de la Constitución y la ley, es el que tiene que rectificar. La ley es igual para todos“
A juicio del expresidente, la izquierda “está desapareciendo”. Considera que sería positivo tener una izquierda fuerte “para alcanzar pactos”. “La única fuerza duradera y fuerte es el PP, el resto está desarticulado”, ha afirmado.
“La herencia recibida por este Gobierno ha sido la peor posible”, ha puesto de manifiesto Aznar, quien ha añadido que “el Gobierno no debe bajar la guardia y debe acelerar las cosas”. En este sentido, ha abogado por “reformar el país”. “Hay que reformar la sanidad, la educación, las pensiones y la política energética, entre otras cosas”, ha afirmado.
“Si cada vez trabaja menos gente y cada vez hay más pensionistas, las pensiones están en entredicho y la prueba de ello es que hay que utilizar el fondo de pensiones de la Seguridad Social (...) Todos queremos un sistema de salud que preste buenos servicios, digamos por favor cómo lo podemos mantener”, ha argumentado.
Aznar ha alertado a los miembros del Gobierno de que “no bajen la guardia” y que “aceleren las cosas” porque, a su juicio, hay que reformar la sanidad, la educación, el sistema de pensiones y el sistema energético“para salir adelante”.
Por otra parte, ha opinado que la legalización de Amaiur y Bildu fue un “pésimo” servicio de la democracia española, porque “forman parte de un entramado terrorista” y además, ha recalcado Aznar, “nos tenemos que dar cuenta de la dimensión de la situación” cuando “una parte del territorio español, Guipúzcoa, está gobernado por gente vinculada a la organización terrorista y están sentados en las instituciones”.
Aznar ha añadido que “tendríamos que saber distinguir muy bien que los medios y los fines de una organización terrorista son perfectamente condenables los dos. No hay que distinguir entre ellos”.
Finalmente, ha manifestado que “estábamos en que ETA estaba derrotada”, en cuanto a que “con su capacidad de ejercicio del terror no podía conseguir sus objetivos”. Sin embargo, el “problema” es que la banda terrorista “está viendo que sin la utilización del terror está consiguiendo los mismos objetivos”, ha sentenciado .
Ha dejado claro que no tiene ninguna intención de volver a la primera línea política y se ha lamentado de que la política, en su opinión, no viva sus mejores momentos ni en España ni en otros países.
También ha lamentado que cuando viaja le preguntan si “España va a existir dentro de 15 días” cuando hace unos años le preguntaban cuál era el secreto para el crecimiento.