Luis Bárcenas y Francisco Correa, los dos grandes enemigos del banquillo en el juicio de Gürtel, han coincidido en destapar que el Partido Popular se ha financiado durante años con el dinero negro de las grandes constructoras del país, a cambio de que las administraciones que gobernaba les regaran de contratos. Con su confesión de jueves y viernes, Correa ha teñido de mordidas la gran obra pública del Gobierno de Aznar. Durante dos décadas, Bárcenas fue anotando las donaciones en B que esas empresas hacían al partido que sostiene al actual Gobierno en funciones.
Correa ratificó el jueves la confesión del antiguo dueño de Constructora Hispánica, Alfonso García-Pozuelo, quien había adelantado dos días antes que él entregaba dinero al principal acusado en el juicio con destino final a “organismos centrales”, esto es, a Génova. Y ya advertía Correa: “No era solo con García-Pozuelo”.
Este viernes fue más allá y dio otros tres nombres: OHL, Dragados y ACS. De un plumazo introducía en su declaración los nombres de los dos grandes constructores del país, Juan Miguel Villar Mir (OHL) y Florentino Pérez (ACS, ahora también dueño de Dragados).
En el caso de Villar Mir, los pagos sobrepasan el medio millón de euros en tres anotaciones. El primero, de 100.000 euros, tuvo lugar el 19 de octubre de 2004, apenas cuatro días después de quedarse con uno de los accesos de la M-30 en Madrid, valorado en 25 millones de euros.
Los otros dos abonos no tienen una relación con obras públicas tan definida. El tercer pago es el más elevado, 250.000 euros, y se realiza en un momento en el que OHL se queda con la construcción de líneas ferroviarias del Cercanías de Madrid.
La ACS de Florentino Pérez no aparece en los 'papeles de Bárcenas' publicados por el diario El País sino en otros que entregó el extesorero a Pablo Ruz aquel 15 de julio de 2013 en el que, después de dos semanas en prisión, decidió tirar de la manta. Fueron nueve carpetas de colores y en la número 3 de ellas aparece un manuscrito con la caligrafía de Bárcenas en el que se menciona a ACS y también a OHL.
Bajo el epígrafe “Galicia” se puede leer: “OHL: 300.000 € en campaña / ACS: se comprom. a 1 M€, ha dado 30.000 € / Ingr. 2006 en donat.: = 360 M./Pts / FCC: daba 50.000€/mes; va a dar 12.000€/mes + ayuda campaña”. En la siguiente línea, el gerente y luego tesorero del PP anotó la siguiente valoración: “Las empresas siguen ayudando”.
Según publicó El País, en el último renglón de ese folio se podía leer: “Congreso y Monte Dogazo (sic), pagados”. Las anotaciones coinciden con la época en la que Manuel Fraga perdió las elecciones autonómicas de 2005 contra el pacto de PSOE y BNG. La referencia a “Congreso” se referiría al cónclave del PP gallego que ganó Alberto Núñez Feijóo en marzo de 2006, y “Dogazo” con los grandes mítines que organizaba Fraga cada primavera en el Monte do Gozo, de Santiago de Compostela.
El constructor que ya ha confesado
Basta con acudir a los papeles de Bárcenas para entender que la mención a las constructoras de Correa no se trata de una ocurrencia, fruto de su intento por ganar el favor de la Fiscalía y una rebaja en su petición de condena. Entre 2000 y 2004, por ejemplo, Constructora Hispánica de García-Pozuelo recibió 703 millones de euros en contratos públicos adjudicados por administraciones en manos del PP.
Llama la atención la cercanía de fechas entre los supuestos pagos a Bárcenas y las adjudicaciones de las administraciones gobernadas por el PP. Constructora Hispánica fue la encargada de construir la estación del AVE en Zaragoza. Precisamente, Correa incluyó las obras del AVE dentro de esas grandes obras conseguidas a base de comisiones.
La licitación de esa obra data de noviembre de 2000. Según la documentación que refleja la supuesta contabilidad B en el PP, en esas mismas fechas García-Pozuelo entregó a Bárcenas 30.000 euros. En junio de 2000, Hispánica consiguió la adjudicación de la plataforma de un tramo de AVE entre Lleida y Barcelona: 28 millones a repartir con otra empresa, Copisa, también donante en los papeles. Sólo un mes después, según los papeles del extesorero del PP, Alfonso García-Pozuelo entregó 12.000 euros al PP.
La mayor parte de las adjudicaciones de Hispánica proceden del Ministerio de Fomento, en la época en la que Francisco Álvarez Cascos estaba al frente de esa cartera. Alfonso García-Pozuelo es un viejo amigo de Cascos: estudiaron juntos la carrera de Ingeniería de Caminos. Este viernes, Correa enfatizó que las iniciales PAC que aparecen en la contabilidad B de la red no pertenecen al exministro de Fomento.
Las cantidades que Hispánica entrega presuntamente a Bárcenas parecen ridículas comparadas con la cuantía de los contratos obtenidos, pero son constantes en los alrededores de las fechas de adjudicación. Sin embargo, algo cambia en 2003: las cantidades empiezan a aumentar. Ese año, Hispánica resulta adjudicataria de numerosos contratos públicos en UTE con otra empresa llamada Copisa. Según los 'papeles de Bárcenas', solo entre marzo y mayo de 2003 Copisa habría entregado al PP un total de 200.000 euros.
Alfonso García-Pozuelo fue también, hasta noviembre de 2009, administrador único de EOC de Obras y Servicios. Esta empresa, con domicilio fiscal en Málaga, ha recibido múltiples adjudicaciones en el Ayuntamiento de Pozuelo, en los años en los que Jesús Sepúlveda, exmarido de la ministra Ana Mato, era el alcalde de la ciudad.
En Pozuelo de Alarcón, Constructora Hispánica también recibió contratos superiores a los 4,5 millones de euros de la Sociedad Urbanística Municipal (Sumpasa). Juan Carlos Bárcenas, hermano de Luis Bárcenas, era por entonces uno de los consejeros de esa empresa municipal.
Negación ante Ruz y querella contra Correa
Villar Mir declaró como imputado en la pieza de los papeles de Bárcenas, pero la pieza se archivó contra él y el resto de empresarios al no poder demostrarse que las donaciones iban destinadas a conseguir una adjudicación concreta, lo que habría supuesto cohecho. En la época de las presuntas entregas, no existía el delito de financiación irregular. Villar Mir negó a Ruz haber entregado dinero negro al PP.
García-Pozuelo se negó a declarar ante el instructor del caso de la caja B del PP, acogiéndose a su derecho. Solo cuando su nombre apareció en el escrito de acusación de la Fiscalía Anticorrupción al lado de una petición de condena de cuatro años de cárcel, el amigo de Álvarez-Cascos se prestó a colaborar. Tanto ACS como OHL han anunciado querellas contra Correa por sus afirmaciones.