El Dresdner Bank y Luis Bárcenas estuvieron a punto de romper su relación airadamente porque el banco hizo demasiadas preguntas sobre la procedencia de las ingentes cantidades de dinero que el extesorero del PP gestionaba en sus cuentas. En un memorandum de la entidad bancaria en relación a Bárcenas un ejecutivo del banco relata: “le preguntamos sobre su situación personal, sus actividades profesionales, nombres de sus empresas, etc. El cliente se mostró impactado y molesto por escuchar que le preguntábamos una y otra vez”.
Según el documento redactado por el Dresdner Bank, la principal preocupación de la entidad bancaria era conocer la procedencia del dinero y si esta tenía algo que ver con los cargos políticos de Bárcenas. En ese documento interno el banco relata como Bárcenas “confirmó que sus funciones políticas empezaron en mayo de 2004 y los fondos, de los que tenemos toda la trayectoria, no tienen relación alguna con su función actual”. Barcenas olvidó contarle a los banqueros suizos que antes de 2004 ya era gerente del PP y mintió al señalar que “sus funciones políticas son de naturaleza parlamentaria sin poder de decisión”. En ese año 2004, se conviertió en Tesorero del PP, máximo guardián de la financiación del partido.
El Dresdner Bank se debatía en 2004 entre la desconfianza que le generaba Luis Bárcenas y el temor que, paralelamente, les suponía perder de sus balances 22 millones de euros. Así lo señala otro párrafo de ese dosier interno elaborado sobre Bárcenas: “El cliente estaba molesto con la actitud del banco sobre su historial, mencionando que cambiará de banco si nosotros tenemos un problema con esto. El cliente es todavía cortejado profesionalmente por nuestro exbanquero Rodríguez y, en breve, por ECK, y tiene otras dos grandes cuentas en Ginebra”.
Bárcenas había explicado a los ejecutivos del Dresdner que sus fondos procedían de la compra venta de obras de arte y de negocios inmobiliarios “cuyos beneficios eran muy sustanciosos” y, siempre según el dosier interno de la entidad bancaria, “dijo que había entregado al señor Tom Eckermann un folio en el que daba una descripción de todas las empresas en las que tenía participaciones. Dijo que debíamos estar en posesión de dichos documentos”. Pero el banco no tenía nada: “después de investigar, los citados documentos no están en ninguno de los archivos del cliente (incluidos los cerrados).
Finalmente el Dresdner Bank decidió encargar un informe externo sobre Bárcenas a la compañía Info4C, una empresa suiza especializada en la elaboración de informes sobre “Politically Exposed Persons”. Es decir, personas expuestas políticamente.