Primera reunión del Comité Federal en la nueva etapa de Pedro Sánchez como secretario general del PSOE. El órgano que acabó con su primer mandato se reúne este sábado, una vez que se ha culminado su composición en los procesos regionales, con una situación bien distinta a la de hace un año: los barones socialistas cierran filas en torno a la dirección socialista y el PSC ante las elecciones catalanas del 21D.
Como siempre en estas citas, la atención mediática se la ha llevado Susana Díaz a su llegada a Alcalá de Henares (el lugar escogido por Ferraz para la reunión). La presidenta andaluza ha asegurado que el “PSOE está donde tiene que estar” ante la crisis territorial. Díaz se ha pronunciado así en declaraciones a los periodistas antes de que comenzara la reunión del Consejo de Política Federal, un órgano integrado por miembros de la dirección del PSOE (Pedro Sánchez, Patxi López, Adriana Lastra, entre otros) y los barones y presidentes autonómicos.
Díaz ha asegurado que no va a entrar en “controversias internas” porque “la situación es muy complicada”. El PSOE quiere dejar, al menos por ahora, atrás las cuitas internas y centrarse en las elecciones, primero las catalanas. De ahí el nuevo lema de Sánchez: “Ahora, tu país”. Díaz ha celebrado que el PSOE esté en la defensa de “España, la Constitución y el estado de derecho”. “Ahí es donde he estado yo siempre”, ha repetido.
También Emiliano García-Page ha querido mostrar su respaldo a Sánchez y al PSC. El presidente de Castilla-La Mancha ha asegurado que “el PSOE está lejos del vértigo de la irrelevancia que pudo tener hace un tiempo. Se está recomponiendo para ser la alternativa”. “El secretario general ha vuelto a situar al partido en el lugar de referencia que le corresponde, que es el de la defensa de la Constitución y la legalidad”, ha expresado el presidente extremeño.
Tanto García-Page como Guillermo Fernández Vara han defendido la decisión del PSC de integrar en sus listas a los herederos de Uniò. “Lo que no es inteligente es jugar a que todo siga igual y que los compartimentos sigan estancos. Hay que remover las piezas para poder montar el puzzle”, ha dicho García-Page. “Me parece muy bien porque el espectro político catalán no es el mismo que hay en el resto de España. Esa unidad del catalanismo moderado con el socialismo es una suma perfecta para llegar al corazón de los catalanes que no tenían a quién votar”, ha dicho el líder extremeño, que preside el Consejo de Política Federal.
La presidenta andaluza, sin embargo, no ha querido pronunciarse: “A mí no me corresponde trazar las estrategias electorales en Catalunya y quiero ser muy respetuosa con los compañeros”.
Iceta defiende su “transversalidad”
El acuerdo con Units Per Avançar ha recibido algunas críticas internas por tratarse de un pacto con dirigentes de derechas y nacionalistas. El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, lo ha defendido: “Creo que se está entendiendo porque me fijo más en las críticas de nuestros adversarios”.
Iceta ha sacado pecho de haber conseguido incluir en sus listas a exmiembros de Uniò así como de haber integrado a representar a representantes de la izquierda como Carlos Jiménez Villarejo. El candidato socialista al 21D ha defendido la “transversalidad”.
Así, ha asegurado que en esta situación los políticos no se pueden poner “de morros diciendo que solo se puede acordar con quien piensa como nosotros”.
El presidente valenciano, Ximo Puig, ha aplaudido la estrategia del PSC: “No hay que fronterizar espacios y me parece muy oportuno el mensaje que ha lanzado Iceta”. Puig no ha querido pronunciarse sobre futuros pactos postelectorales –también lo ha evitado Díaz al asegurar que hay que ir a las elecciones a ganar y no a pactar (ha repetido su famosa frase de “me gusta ganar” y ha ironizado con su derrota en las primarias frente a Sánchez)–.