El mayor beneficiario de la trama eólica, Alberto Esgueva, es el propietario de una sociedad que aparece en la lista de morosos hecha pública por Hacienda. Intercatia Corporación S.L debe 18.576.761,33 euros a las arcas públicas. La compañía tiene esa deuda pese a que contaba con un patrimonio de 47 millones de euros. Intercatia, que se creó hace 24 años bajo el nombre de Torre Adrado, absorbió otra sociedad de Esgueva, San Cayetano Wind, que es la que le hizo ganar 47 millones de euros tras asociarse con Iberdrola para explotar un parque eólico y a la que acabó vendiendo sus acciones.
La Fiscalía Anticorrupción le investiga, junto a otros empresarios, porque sospecha que se valieron de su relación con altos cargos de la Junta de Castilla y León para conseguir las licencias de esos parques. El propio Esgueva fue alto cargo de Junta de 2003 a 2006 como responsable de su oficina de internacionalización.
Intercatia, dedicada según su objeto social a la comercialización de cartonajes, intenta resistir los embates de Hacienda. ¿Cómo se genera una deuda de más de 18 millones? Pues según el representante legal de Esgueva, se debe a una contradicción en la que entra Hacienda. Cuando Esgueva vendió sus acciones a Iberdrola, consideró que la venta de participaciones sociales estaba exenta de IVA.
Sin embargo, en el año 2012 el Tribunal Económico de la Administración Central reclamó el 21% de IVA por considerar que se había producido una prestación de servicios, y ello a pesar de que Iberdrola lo negó y aseguró haber realizado todas las gestiones sin Esgueva.
Lo que ocurre después es que en diciembre de 2014 entra en la acción la Fiscalía Anticorrupción, que empieza a investigar la trama eólica. El informe del inspector que genera la investigación relata que presuntamente se ha producido un beneficio ilícito de los empresarios que crearon sociedades para asociarse con Iberdrola, ya que estos nunca tuvieron la intención de explotar los parques.
“Si la actividad fue ilícita no puede estar sujeta a impuestos, y si está sujeta a impuestos, no puede ser ilícita”, sostuvo el abogado de Esgueva. El recurso se ha planteado ya en el Tribunal Económico, no en la Fiscalía Anticorrupción que, hasta el momento, sigue con las diligencias de investigación.
Intercatia toma su nombre del mítico poblado vacceo que resistió a las invasiones de las legiones romanas y que algunos historiadores sitúan en Montealegre de Campos. Fue en esta localidad vallisoletana, entre Tierra de Campos y los Torozos, donde Esgueva intentó invertir el dinero de Iberdrola y bajo una nueva sociedad, Desarrollos Naturales Siglo XXI. Su proyecto de “turismo internacional de lujo”, apoyado por varios consejeros de la Junta de Castilla y León, se quedó en la compra de terrenos y casonas, que han pasado a manos de Hacienda y del Banco Sabadell por deudas de 88.000 euros y 1,6 millones, respectivamente.