El presidente de Caja Madrid Miguel Blesa y su mano derecha, Ildefonso Sánchez Barcoj, probablemente no preveían en 2005 que la entidad se fusionaría con otras seis, alumbraría Bankia y que, ya siendo presidente Rodrigo Rato, ésta se convertiría en protagonista del desastre financiero español, con un rescate por valor de 23.500 millones de euros de dinero público. Pero algo les decía que eran tiempos de hacer crecer su patrimonio todo lo posible. En un correo electrónico que envía el director general de la Caja a Blesa en 2005 Sánchez Barcoj comenta una “gratificación extraordinaria” para el presidente en los siguiente términos: “Disfrutemos, por si algún día llegan las vacas flacas”.
El mensaje está incluido en los correos electrónicos que Bankia entregó a Price Waterhouse Coopers (PwC) para la elaboración de un informe 'forensic', al que ha tenido acceso eldiario.es, y con el que Anticorrupción atribuye nuevas responsabilidades a Blesa y otros miembros de la cúpula de Caja Madrid. “Presidente, adicional a la variable por la consecución por encima de los 10 puntos, te abono además 17.400 euros por exceso aportación fondo de pensiones, ya que la regularización de diciembre la había hecho con el supuesto de RV (retribución variable)=10. Disfrutemos, por si algún día llegan las vacas flacas... Un saludo”, dice Barcoj en su mensaje.
De hecho, Anticorrupción considera a Blesa y Sánchez Barcoj responsables del exceso de aportaciones al plan de pensiones como “gratificación extraordinaria” que se aborda en el citado correo electrónico. También apunta a ellos al atribuir la individualización de las retribuciones fijas en Caja Madrid y el “conocimiento y reconocimiento” de la manera en la que se fijaban los sueldos variables de la alta dirección, todas ellas conclusiones previas del citado 'forensic'.
Anticorrupción atribuye a Blesa y el resto un delito de societario de administración desleal cometido entre 2007 y 2010, que será investigado en un juzgado ordinario de Madrid y no en la Audiencia Nacional. Los fiscales Alejandro Luzón y Luis Rodríguez Sol consideran que ni la pieza principal del caso Bankia, que investiga la salida a bolsa, ni la separada de las 'tarjetas black', podrían unirse a otra de retribuciones, por objeto de lo investigado y falta de coincidencia en los periodos de tiempo.
La fecha del correo de Barcoj a Blesa, de 23 de febrero de 2005, queda fuera del periodo analizado por PWC y objeto de la investigación de las retribuciones irregulares. Aún así, los autores del 'forensic', consideran “importante poner de manifiesto que, de acuerdo con este correo electrónico, la irregularidad detectada sobre el concepto 'gratificación extraordinaria'” venía cometiéndose desde, al menos, ese ejercicio“.
Anticorrupción también acusa a Blesa de asignarse una indemnización de 2,73 millones de euros que le fue abonada a su salida de Caja Madrid, en 2010. Según PWC, no hay constancia de que fuera aprobada por la Comisión de Retribuciones o el Consejo de Administrción, a los que se informó un año después de que Blesa abandonara la Caja.
Otro correo demuestra que tres días antes de que se le abonara la compensación se consultó a un despacho de abogados externo. Uno de los socios del despacho, Martín Godino, escribe al director de Recursos Humanos de Caja Madrid, Federico Navarro, el 29 de diciembre de 2009. En él advierte de que “la claúsula de no competencia del contrato del Sr. Blesa, en lo que se refiere a la compensación por la misma, es un modelo de oscuridad”.
El director de Asesoría Jurídica del FROB, Alfonso Cárcamo, remitió el pasado 26 de diciembre una nota “confidencial” a la Fiscalía Anticorrupción con las conclusiones del 'forensic' encargado a PWC. La principal, que la cúpula de Caja Madrid cobró entre 2007 y 2010 un total de 14,8 millones de euros de forma irregular. Esta cantidad se suma a los 15,2 millones de euros que los consejeros y otros directivos gastaron con las 'tarjetas black', sin que la entidad o ellos declarasen esos ingresos a Hacienda.
Los fiscales han pedido a Andreu que incorpore los 'correos de Blesa' a la investigación de las 'tarjetas black'. Fue uno de esos correos electrónicos, publicado por eldiario.es en diciembre de 2013 el que reveló la existencia de esos plásticos. Pero el informe 'forensic' de PWC incorpora otros de Caja Madrid no incluidos entre aquellos y que también servirán para la investigación de las retribuciones irregulares en un juzgado de Madrid.
Los mismos protagonistas del mensaje de 2005 sobre unas eventuales “vacas flacas” en el futuro, aparecen en otro de los correos desconocidos hasta ahora. Otra vez, Sánchez Barcoj escribe a Blesa. Han pasado 4 años desde el comentario sobre su incierto futuro y ambos están discutiendo sobre la indemnización a Enrique de la Torre, otro de los imputados por las 'tarjetas black' y responsable directo de los plásticos. De la Torre aprieta a sus superiores para sacar el máximo dinero posible de su salida de la entidad y éstos se resisten.
El 16 de julio de 2009, Sánchez Barcoj le escribe a Blesa: “Yo le he dicho que yo no quiero que hacienda se forre, pero que NO puede ser indemnización y que eso ya quedó muy claro en su día y así se hicieron los préstamos de los que disfruta a un interés muy moderado. Por si te ataca, aunque no creo”.
“Un pequeño incumplimiento contable”
Hay otro correo electrónico que afecta al exjefe de la Casa del Rey Rafael Spottorno. “En 2011 percibió 232.500 euros por la extinción de su relación (con Caja Madrid), siendo nuevamente dudoso que ese hecho no se hubiera producido a instancia o iniciativa del mencionado directivo y por ello sin obligación de indemnizar”, asegura en este caso el FROB.
En uno de estos mensajes, escrito el 27 de diciembre de 2007, el jefe de Recursos Humanos, Federico Navarro, propone a Sánchez Barcoj una fórmula para “el caso especial de Spottorno a efectos de dotación contable ILP (incentivo a largo plazo) y póliza aseguramiento”. Presidente de la Fundación Caja Madrid desde 1993 a 2011, de él dice el director de Recursos Humanos: “Es el único que no está en nómina Caja y por tanto, téoricamente habría que hacerlo vía Fundación. Quizá para no tener que constituir una póliza específica ni aflorar la dotación en Fundación (Patronato, desviación presupuestaria...) podríamos incluirle con el resto de Directores dentro de Caja”. A continuación, Navarro admite: “Puede que con esto cometamos, en todo caso, un pequeño incumplimiento contable, pero evitamos difusión. Espero que me digas”.